GURÚS

El tipo me caía bien, fuimos compañeros de clase unos años, no tenía prejuicios hacia él, si acaso admiración porque había salido de una secta como la mía pero se le añade la dificultad de haberse despegado del grupo en un país extraño. No deja de ser otro idioma y otro continente. Le hice todos los favores que pude de corazón, no esperaba nada a cambio, le eché un cable en lo que pude, él reprochaba al grupo haberle hurtado la realización de una carrera universitaria. Me pidió ayuda en ese aspecto y le presté lo que tenía a mano y pensé le podía hacer falta.

Entiendo que mientras perteneció se dedicó a dar catequesis por el mundo, "ayudando" en parroquias, de este país y de otros países que no eran el suyo. No entendí muy bien el planteamiento de vida que les hacía Plinio, pero de lo que me contó entendí que había estado en contacto con curas diocesanos, que había cantado en corales y que se supone que actuaba como especie de "monaguillo" cualificado allí donde viviera. 

Al salir no tenía título de nada, se ganaba la vida con trabajillos, algunos en el coleescrivariano, algunos en la enseñanza pública con los peques... en diversas tareas que no llegan a ser de "maestro".

Escuché respetuosamente su historia, tenía mucho que contar, y me sirvió para comparar, parecidos y diferencias entre dos sectas católicas, aprendí un montón, nunca me preguntó sobre mí, no sé si estaba al corriente de que yo era una exOpus, nunca lo mencionó ni tampoco yo saqué el tema. 

El último curso en el que lo traté tuve oportunidad de  compartir numerosos traslados por carretera  y daba para mucho hablar. Hablaba él. Mejor.

Si no me preguntan  no hablo de esto, si me preguntan hago como san Agustín "tolle, lege", "vete y lee". 

No le guardo rencor, hace ya unos años que, yendo a mi trabajo lo ví por última vez, cruzando un paso de cebra. Acaso se ha trasladado de ciudad. Su hermana estaba casada con un español, según me dijo, en esa gran ciudad que me parece es a la que te refieres. No recuerdo que tuviera más hermanos.

 Uno más que pasó por mi vida, que habiendo sufrido parecidos abusos,  no ha evolucionado en el mismo sentido, no estábamos en la misma longitud de onda. Decía que opus era "falsa derecha", debía ser un mantra de su ex organización, no recuerdo bien el trasfondo. ¿Se entendía que Plinio era verdadera derecha?

Daría para un congreso de ex sectarios diversos y variados.

En cualquier caso,  frente a la opinión mayoritaria hemos demostrado que "en la Iglesia católica también hay gurús", gurús "a imagen y semejanza de cada país de nacimiento del gurú". 

Ante la pretendida reforma que defiende Leonardo, siempre se me olvida que se me fueron las sobrenaturalidades por el desagüe el día en el que comprobé que tanto la directora de mi centro como un sacerdote diocesano  de la sociedad sacerdotal escrivariana "para su uso, disfrute y control",  utilizaban el lenguaje comprensible para todo quisque en la calle cuando se dirigían al quisque en cuestión, y utilizaban el lenguaje de "espíritu sobrenatural de la empresa" cuando se dirigían a mí. El doble  lenguaje. Mientras estuve de nume solo supe un idioma, y así de mal me fue.

Más se hundió en la cloaca el invento cuando en sala de audiencia en un juicio en el que yo era la acusada o demandada tuve en frente al abogado escrivariano barbastrense defendiendo al demandante. Entendí que se dejaban las sobrenaturalidades en el cajón y que ante un juez se trata de llevarse el gato al agua mintiendo si es menester.

Qué par de bofetones de realidad me envió la vida, el universo, la providencia, el desarrollo de los acontecimientos. 

Después de veinte años de encierro en el submundo en el que había que ser "salvajamente sincera" y no guardar ni medio secreto con el diablo, me dí de bruces con que opusinos reunidos y actuantes de cara a la galería  usaban el arma de los cobardes en un intento de enterrarme viva.

"Salvajamente sinceras", así nos tenían, entregando las llaves de nuestra vida, "tous les leviers", nuestras palancas y motivaciones, a unos golfos apandadores santificadores de la estafa.

Por todo esto lo que comentan del sanchismo no me da ni frío ni calor, cuerda de mangantes, que al menos no reclutan infantes ni les hacen ponerse un cilicio. Pero antes estuvieron los ppros y fue parecido, "nada por aquí, nada por allí". Cleptocracia es nuestro régimen político. Tienen a quien parecerse, mediante engaños llegó a los altares.