EUGENIO TRIAS Y LEONARDO POLO
Kari, si hay algo que has dicho y no ha salido, mándalo otra vez. Me disculpo por el tinte filosófico de esta entrada, para mí de la mayor necesidad de cara a mi autoaclaración existencial e intelectual, un rollazo para quien venga al blog a buscar sangre. Dejé a medias mi lectura del "Arbol de la vida" de Eugenio Trías. Me hace gracia que a eso se llame investigación: he ido a la humilde biblioteca pública de esta humilde ciudad y he cogido el libro del estante. Y me lo he leído de cabo a rabo. Investigación era cuando hacía mi tesis doctoral y tragué polvo en algunas bibliotecas, leyendo manuscritos en latín, y pasando horas delante de los ficheros hasta la extenuación.