Academia de la vida

Gracias gadero por las precisiones, está muy bien que Italia se manifieste contra la ley mordaza, y de que nos enteremos que esa ley beneficiaría a gente afín a la obra, como dell'Utri o Berlusconi. Espero que lo consigáis. Me gustaría aprender más de Italia pero no tengo tiempo, tendría que pasar un tiempo allá para enterarme de algunas preguntas que me hago.



He leído sobre el nuevo presidente de la Academia de la Vida en religión digital. Personalmente no sé nada del tal Ignacio Carrasco. Van colocando sus peones.

http://www.periodistadigital.com/religion/vaticano/2010/07/01/ignacio-carrasco-espanol-obra-ministro-papa-curia-vaticano-iglesia.shtml

De todas formas si esa Academia por la vida estuvo presidida la primera vez por Lejeune, ya estaba entonces el opus rondando. Lejeune propiamente dicho no sé si llegó a pitar de supernumerario, pero su hija ¿Annick? y su yerno Jean Marie Meyer sí lo eran. El yerno filósofo profesor en una facultad parisina muy carca, el IPC. El Lejeune como médico muy antiabortista lo promocionaban sin parar en Mundo Cristiano, la revista del cura numerario Jesús Urteaga, el del best seller opusino "El valor divino de lo humano". El matrimonio formaba parte del consejo pontificio para la familia que creó Juan Pablo II, esto era al principio de los años 80.

En las páginas de esta revista lo ví por vez primera, incluso podría rebuscar en mis trabajos de ética de adolescencia porque creo que hice uno sobre el aborto sacado entero de Mundo Cristiano. Mi profesor de filosofía del instituto Príncipe de Viana se quedó tan impresionado de mi "seguridad doctrinal" que me llamó a su despacho. ¿De dónde ha salido este monstruo? debió de pensar...

Me han gustado los comentarios que vienen en religión digital a la noticia. Muy acertados: bajan los efectivos ya no tienen 5 ó 6 centros de estudios a rebosar por España como en mi época. Pero saben ir colocando sus peones. Asusta pensar cuantos cientos de historia de decepción y sufrimiento ha provocado el opus dei en nuestro país en este tiempo.

Pero lo que me ha gustado de los comentarios, es que no hace falta insultar al opus dei, sólo decir la verdad. Van derechos, flechados a colocarse en los puestos de mando. Es lo único que les interesa, ser ellos los protagonistas, los dirigentes, los que marquen la doctrina en la iglesia. La doctrina, la fe en sí misma propiamente dicha, no importa tanto. Importa mandar. Parece que nos vamos espabilando lentamente para saber contestar a los defensores sectarios.