Consejo regulador en marcha
Robert Finn es. En su columna semanal lamenta que un medio informativo asentado en esa ciudad, el National Catholic Reporter no vive la palabra "católico". El reproche me suena al conocido caso que hemos vivido con la Pontificia Universidad Católica del Perú.
En su columna y aprovechando que es el día de san Francisco de Sales 24 de enero, patrón de las periodistas y los medios de comunicación católicos, se ve obligado a instruir a los fieles. Seguro que festejaron a san Fco. de Sales en la facultad de comunicación de Pamplona.
Como lo suyo es fomentar y proteger la fe, primero nombra los cánones en los que se basa para sus reproches. Después repasa uno a uno los medios diocesanos que están siguiendo las normas, los buenos ejemplos: el periódico "The catholic Key" y la emisora de radio KEXS. Sin embargo en el caso de National Catholic Reporter no puede estar contento, ha recibido muchas quejas de un tiempo a esta parte.
En particular porque en ese periódico se contradice la enseñanza oficial sobre la ordenación de mujeres, sobre la contracepción artificial y sobre la moral sexual en general, a la vez que se alaba a los teólogos disidentes.
Desde 2004 que entró como obispo coadjutor ya se preocupó de instruir al periódico para que sometieran sus publicaciones a las expectativas de la ley eclesiástica, pero los del NCR dijeron que eran un periódico independiente que comentaban sobre asuntos católicos. Y no parece que vaya a ser tan fácil obligarles a quitarse el nombre "católico" como en Perú.
Tiene muchos síntomas este señor de pertenencia. En especial cuando habla de que dado que "humanamente" nada se puede hacer debe acudir al nivel sobrenatural. Es decir, que rezara por ellos y los encomendará a san Francisco de Sales.
Un tal Edward Peters, profesor de derecho canónico en el Sacred Heart Major Seminary de Detroit, apoya la moción del señor obispo añadiendo que el uso de este NCR de la palabra católico es canónicamente ilícito. Los doctores de la ley que salen en el evangelio no lo harían mejor: Razones, se reclaman del nombre católicos sin el consentimiento de la autoridad eclesiástica competente, y se puede invocar la ley penal canónica con consecuencias para el staff del periódico. ¿Excomulgados? Peters tiene un hijo responsable de un blog cuyo título en español es un poco risible, "el papista americano".
Los periodistas escogieron bien su nombre, no pretenden ser los profesores oficiales de la iglesia, sólo informar sobre temas "relacionados con".
Parece ser que el fondo de la cuestión es que este obispo como otros intenta ocultar casos de pederastia clerical y el NCR informa de ello. NCR informa también de un banco que pretendiendo recibir y proteger las donaciones de caridad se dedicaba a lavar dinero de la droga centroamericana. Los católicos leales no deberían informar sobre estos feos asuntos que no ensalzan la identidad católica.
Por otra parte al final de las palabras episcopales vienen el mismo tipo de comentarios cheer up! que se pueden leer en las noticias sobre obispos españoles que se cubren de gloria: "bravo por el obispo, gracias por recordarnos la doctrina verdadera" y del estilo. Leo que la diócesis tiene problemas financieros y que hay que animar a los generosos donantes a seguir dando, han dejado de publicar un boletín diocesano mensual, y como en San Sebastián pasó tampoco hay gran quorum a su favor entre los diocesanos.
Extraños caminos los de la providencia: desde un grupo de estudiantes que se dirigían con un cura de posguerra con aspiraciones que nunca alcanzó el episcopado, pasando por una "orden laica" dedicada a la santificación del trabajo ordinario, hasta llegar a vivero de clérigos "prêt à porter" para todo tipo de cargos eclesiásticos. Desde secretario papal a obispo o vicario de...con el papel de "consejo regulador del nombre católico."
Me queda una duda ¿qué pasa en Los Angeles? ¿más casos de curas abusadores de niños?
En su columna y aprovechando que es el día de san Francisco de Sales 24 de enero, patrón de las periodistas y los medios de comunicación católicos, se ve obligado a instruir a los fieles. Seguro que festejaron a san Fco. de Sales en la facultad de comunicación de Pamplona.
Como lo suyo es fomentar y proteger la fe, primero nombra los cánones en los que se basa para sus reproches. Después repasa uno a uno los medios diocesanos que están siguiendo las normas, los buenos ejemplos: el periódico "The catholic Key" y la emisora de radio KEXS. Sin embargo en el caso de National Catholic Reporter no puede estar contento, ha recibido muchas quejas de un tiempo a esta parte.
En particular porque en ese periódico se contradice la enseñanza oficial sobre la ordenación de mujeres, sobre la contracepción artificial y sobre la moral sexual en general, a la vez que se alaba a los teólogos disidentes.
Desde 2004 que entró como obispo coadjutor ya se preocupó de instruir al periódico para que sometieran sus publicaciones a las expectativas de la ley eclesiástica, pero los del NCR dijeron que eran un periódico independiente que comentaban sobre asuntos católicos. Y no parece que vaya a ser tan fácil obligarles a quitarse el nombre "católico" como en Perú.
Tiene muchos síntomas este señor de pertenencia. En especial cuando habla de que dado que "humanamente" nada se puede hacer debe acudir al nivel sobrenatural. Es decir, que rezara por ellos y los encomendará a san Francisco de Sales.
Un tal Edward Peters, profesor de derecho canónico en el Sacred Heart Major Seminary de Detroit, apoya la moción del señor obispo añadiendo que el uso de este NCR de la palabra católico es canónicamente ilícito. Los doctores de la ley que salen en el evangelio no lo harían mejor: Razones, se reclaman del nombre católicos sin el consentimiento de la autoridad eclesiástica competente, y se puede invocar la ley penal canónica con consecuencias para el staff del periódico. ¿Excomulgados? Peters tiene un hijo responsable de un blog cuyo título en español es un poco risible, "el papista americano".
Los periodistas escogieron bien su nombre, no pretenden ser los profesores oficiales de la iglesia, sólo informar sobre temas "relacionados con".
Parece ser que el fondo de la cuestión es que este obispo como otros intenta ocultar casos de pederastia clerical y el NCR informa de ello. NCR informa también de un banco que pretendiendo recibir y proteger las donaciones de caridad se dedicaba a lavar dinero de la droga centroamericana. Los católicos leales no deberían informar sobre estos feos asuntos que no ensalzan la identidad católica.
Por otra parte al final de las palabras episcopales vienen el mismo tipo de comentarios cheer up! que se pueden leer en las noticias sobre obispos españoles que se cubren de gloria: "bravo por el obispo, gracias por recordarnos la doctrina verdadera" y del estilo. Leo que la diócesis tiene problemas financieros y que hay que animar a los generosos donantes a seguir dando, han dejado de publicar un boletín diocesano mensual, y como en San Sebastián pasó tampoco hay gran quorum a su favor entre los diocesanos.
Extraños caminos los de la providencia: desde un grupo de estudiantes que se dirigían con un cura de posguerra con aspiraciones que nunca alcanzó el episcopado, pasando por una "orden laica" dedicada a la santificación del trabajo ordinario, hasta llegar a vivero de clérigos "prêt à porter" para todo tipo de cargos eclesiásticos. Desde secretario papal a obispo o vicario de...con el papel de "consejo regulador del nombre católico."
Me queda una duda ¿qué pasa en Los Angeles? ¿más casos de curas abusadores de niños?
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