CHOQUE DE "ESPIRITUALIDADES"

¿ Abogados en Barcelona especializados en Opus Dei o especializados en asuntos de psiquiatras y médicos?

Armada confesó a Manuel Soriano que su idea de soberanía se basaba en Jovellanos, “la plenitud de soberanía reside en el monarca…Es una herejía política decir que una nación…es soberana…” (JOVELLANOS, Memoria en Defensa de la Junta central). Armada conservaba en su pazo de Sta Cruz de Rivadulla la mesa sobre la que Jovellanos había firmado dicho texto.

Desde el 55 hasta el 77 AA compatibilizó ascender en el escalafón con estar al servicio de Juan Carlos. Pero se dijo que en 77 se fue de Zarzuela porque tenía que seguir ascendiendo y para ello tenía que mandar tropas.

La tesis de Sabino por todas partes parece confirmada: Suárez y Armada eran incompatibles y que Suárez pidió su cabeza a Juan Carlos. Y es que tenía pruebas de que Armada “conspiraba” contra la política reformista de Suárez.

Asi que Armada, principal valedor de Sabino para entrar en Zarzuela,  sería luego un sujeto del que Sabino se distanciaría.

Llegar a la cumbre tiene estas cosas.

El rey no quiso tener limitaciones a la hora de escoger colaboradores e introdujo un párrafo al respecto en la ley 10/77 que sigue vigente. Ese real decreto rezuma ideología de extrema derecha, prohibía a los militares afiliarse a partidos, los militares no podrían acceder a cargos públicos de designación directa. En el art. Tercero estaba la excepción que se asignó el rey para designar a quien le diera la gana. Y ese art servía para tener a Armada siempre consigo. Pero muchos militares se quejaron a Armada de que se hubiera reservado ser la excepción.

Dice Sabino que el rey tenía a Armada por ser persona de su máxima confianza desde hacía 20 años. Que Armada era tan católico como monárquico, lo de que su madrina fuera la madre de Alfonso XIII me descuadró…y etc. Total que si Armada fue “echado” de Zarzuela fue por causa mayor.

Armada informaba al rey de lo que pasaba en el ejército. Tampoco le gustaba la política de Gutiérrez Mellado en cuanto a ascensos de “demócratas”. “Id con más cuidado que vamos a tener un disgusto”, decía. Armada empezaba a salirse del “círculo del luz” de los que están en el “poder” y saben por donde van los tiros. Empezó a desmarcarse del Gobierno Suárez y empezó a ser un elemento incómodo.

Un primer roce con Suárez fue la legalización del PCE.

En septiembre 76, en un encuentro grabado por doble, un general sacó su grabadora y Suárez la suya, el flamante presi prometió a los militares no legalizar el PCE. La guerra civil con los comunistas “el enemigo” por antonomasia estaba viva en los corazones y mentes de todos.

Armada fue informado de lo que había habido en la reunión y escribió un informe a JC rey.

Suárez escribió el suyo a JC. Y Juan Carlos vió las discrepancias de ambos. Los convocó en su despacho y discutieron. Dice Sabino que Suárez alegó que el ejército estaba controlado y no había peligro de involución. Y que Armada pretendía reflejar la preocupación de los militares ante lo que estaba pasando.

A Suárez empezó a molestarle Armada que se sentía el ayo de Juan Carlos y actúaba como tal. Tras la legalización del PCE, más bronca en Zarzuela entre Suárez y Armada, estaban el rey y Mondéjar presentes. “El rey entendió de qué parte tenía que colocarse”, tras tantos años iba a prescindir del ayo. Mondéjar fue avisando a Armada, pero pasaron meses hasta que de verdad se fue de Zarzuela. Formas de vida y creencias distanciaban a Armada y Suárez. “Suárez hacía tiempo que se había alejado de aquella religiosidad cercana al Opus Dei que había practicado al comienzo de su carrera política”.