CONFESIONES CARDENALICIAS (Y 2)

— ¿Por qué no se hace ?
— Somos varios los que lo hemos intentado [investigar movimientos católicos sospechosos de sectarismo], créame. Hablamos al Papa y a  Sodano por supuesto. Intervenimos en el Consejo para los Laicos del que dependen casi todos ellos.



— Cuando dice "nosotros" ¿en quién está pensando? 
— Primero en mí mismo no me voy a esconder detrás de los demás. Obispos como  Carlo Martini antes de dejar la diócesis de Milán. Daneels de Bélgica. Bastantes obispos franceses. También americanos que han prohibido esos grupos en sus respectivas diócesis.

Cardenal Martini, no pro "Opus"

— ¿Y por qué no se llegó a nada?
— Oficialmente no se llegó a nada. Pero si se llevaron a cabo algunas accionas oficiosas. En realidad la Secretaría de Estado estimaba que las acciones oficiales no estaban justificadas mientras no se comprobaran las acusaciones con certeza....

Cardenal Daneels

— Perdóneme una vez más. Es un poco raro querer esperar a estar seguro antes de lanzar una investigación para tener una opinión razonable. 
— No sea ingenuo. Una investigación oficial en el seno de la Iglesia se parece bastante a un trueno en un cielo azul. El anuncio de una investigación despierta inmediatamente los comentarios menos autorizados, la prensa se ceba y los grupos y las personas implicadas son inmediatamente declaradas culpables por el rumor y el juego de los medios de comunicación. Es justo y prudente no abrir de ese modo el campo a las especulaciones mientras no nos hemos asegurado con respecto a los posibles riesgos.

— ¿Cuáles son las otras razones ?
— La segunda me parece que es menos honrosa. Esos movimientos han sabido ser útiles a la Iglesia y algunos de sus dirigentes. Siempre han cuidado las relaciones públicas con unos  y con otros, consiguiendo solidaridades, amistades …  En resumen, existe una red en el seno de la jerarquía que sostiene a esos movimientos por razones diversas.

— ¿Por ejemplo ?
— Me refiero a la contribución financiera del "Opus" al movimiento polaco Solidarnosc. Algunos juzgan que frente a la secularización del mundo, esos movimientos.…

— No, Eminencia, no le preguntaba por ejemplos de razones que tienen los miembros de la jerarquía para mantener su apoyo a esos movimientos, le preguntaba que me dijera quién los apoya. 
— Oh, perdón. Es algo tan conocido que no creía que le interesaba. Es público y notorio que  Cipriani Thorpe, el cardenal de Lima, es miembro del "Opus Dei",  Julián Herranz, miembro de la curia y cardenal también es del "Opus Dei". El cardenal Ratzinger era cercano a Comunión y Liberación que no es un movimiento con derivas sectarias. Presidió la misa funeral del fundador hace algunoes meses (padre Giussani)  Sodano, el cardenal secretario de Estado, está cercano  a los Legionarios de Cristo y al Opus...Scola, el  cardenal de Venecia, es miembro de Comunión y Liberación. Uno de los secretarios particulares de Benedicto XVI, M^sr Gänswein, fue profesor de la universidad de la Santa Cruz en Roma que pertenece al  Opus… Para mi, la cuestión verdadera no es esa, sino el hecho de que esos movimientos muy organizados se guían por un análisis equivocado del estado de la iglesia.


 



— ¿Es verdad Eminencia que esos movimientos estaban muy presentes en la plaza de San Pedro con motivo de los funerales del papa, y que se habían puesto de acuerdo para lanzar el famoso "santo súbito", pidiendo la canonización rápida de Juan Pablo II ?
— Vaya, ha oído hablar de ello. Todos los espectadores del funeral televisado de nuestro difunto Papa pudieron apreciar esos movimientos de la muchedumbre que reclamaban "Santo ya", el slogan que significaba la canonización inmediata del papa que estábamos enterrando.  Es cierto el slogan no fue espontáneo. Se lo inventaron, si es que puedo hablar así, los representantes de los movimientos que lograron que fuera repetido por la gente. Ya sabe cómo pasan estas cosas: en momentos de mucha emoción las muchedumbres están dispuestas a repetir los cánticos que se le ofrecen. Lo que no está en contradicción con la devoción extraordinaria de esa misma masa de personas que habían guardado cola pacientemente durante horas para rendir el último homenaje al difunto papa los días anteriores.

—Por tanto tenemos en el seno de la iglesia movimientos muy organizados y poderosos que disponen de medios financieros importantes y que cuentan con el favor de los altos dignatarios. ¿Cuál es su objetivo? 
— Le repito que es un poco osado pretender colocarlos a todos bajo la misma etiqueta. Lo hemos hecho sólo por comodidad. Tienen en común la "autoproclamada" fidelidad al papa, con la costumbre si es necesario de escapar a la autoridad del obispo de las diócesis en las que trabajan. Su ideología es conservadora y su teología un tanto aproximativa. Proclaman que tienen como objetivo la nueva evangelización, su intención más discreta es tener un peso en la iglesia y en la sociedad en la que se encuentran. A la par que la agenda religiosa mantienen una agenda política determinada.

— Es evidente que gustaron a Juan Pablo II…
— Le gustaron porque se pusieron a su disposición.

— Se comenta que esos grupos se tomaban muy en serio la organización de una presencia masiva de sus respectivos seguidores con ocasión de cada aparición pública del Papa. 
  — Ah, se dice incluso eso… Pues sí, hay que reconocer que tienen razón en decirlo. El fundador del Camino Neocatecumenal (Kiko Argüello)  prometió a Juan Pablo II que llevaría 50.000 seguidores a la JMJ de  Denver en 1993. Eso era más del 10% del total de participantes, ¡una enormidad! No había un viaje del papa sin que los representantes de esos movimientos se ocuparan de manifestar su presencia y apoyo.

— Se entiende que Juan Pablo II no haya querido prestar oídos a las acusaciones de derivas sectarias que florecen aquí y allá.  
—Cuando intentábamos hablar de ello desviaba la conversación. Era un tema tabú, lo viví al menos en dos ocasiones. En realidad se entiende bien, los necesitaba. 

— ¿Cómo dice?
— Póngase en el contexto de su elección como Papa en 1978. Juan Pablo II se encuentra una Iglesia en la que las fuerzas tradicionales conocen una crisis muy seria. Las vocaciones disminuyen, muchos curas dejan el sacerdocio en Europa occidental y en Norteamérica, una parte de las órdenes religiosas se lanza al compromiso político y social. El viene de Polonia, un país en el que la religión es la única fuerza de resistencia al marxismo, tiene la impresión de que esta ideología está imponiéndose en América Latina con ayuda de los sacerdotes. Teme que ocurra lo mismo en Asia. Estos movimientos le dan la impresión de ser una fuerza que podría movilizar en favor de sus objetivos, mientras que los grupos tradicionales, jesuitas, dominicos, franciscanos y otros, aparecían peligrosamente debilitados.

— Los movimientos aparecen como una devota milicia, algo así como hicieron los jesuitas que pretendían ser el ejército del papa en los tiempos de su fundación.
— Sí, en efecto, de ahí la protección de la que disfrutaron y puede que la excesiva indulgencia del Papa con ellos.

— Esta protección llegará demasiado lejos puesto que Juan Pablo II otorgará un estatuto hecho a medida al "Opus Dei" erigiéndolo en prelatura personal, la única institución que disfruta de dicha figura jurídica, y canonizará a su  fundado en un tiempo récord.
— Tiene Vd. razón en señalarlo. Una prelatua personal es un estatuto jurídico excepcional que permite que los miembros del  "Opus" no dependan más que de su Prelado (Presidente en el original), es el nombre oficial de su superior general, que no depende más que del Papa. Por lo tanto ningún obispo territorial, ningún dicasterio de la curia tiene autoridad sobre el "Opus". Una situación envidiable cuando gusta el secreto.

 

— Uno de los  argumentos de los partidarios de esos movimientos, es que hoy repreesentan lo que fueron las grandes órdenes religiosas de siglos pasados. 
— Ese argumento se utiliza a menudo. Pero omite una realidad fundamental:  Esas grandes órdenes, jesuitas, dominicos, franciscanos, carmelitas y todas las innumerables congregaciones religiosas femeninas o masculinas, reunían y reúnen a personas que profesan una vocación religiosa y que respetaban reglas de vida después de un período de prueba. El período de noviciado que hay en ellas antes de los compromisos definitivos es largo, su estructura es sólida, su teología es una teología fruto de la reflexión. El modo degobierno que hay en ellas es bastante democrático.  Los nuevos movimientos reúnen laicos, también algunos curas, que no tienen la misma protección [Ana A: NINGUNA]. El modo de reclutar de algunos de ellos es muy agresivo. Su poder financiero omnipresente. La autoridad es ejercida sin control real.

— Le resulta difícil hablar de esos movimientos de su influencia y de sus prácticas. 
— Sí, es difícil porque significa aceptar que hay que sacar a la luz sucesos, modos de hacer, debates que me parece hacen daño a la Iglesia. Un doble mal en realidad. Primero pienso en algunas de esas personas que se dejaron captar en unas estructuras que no sirven a su desarrollo personal. Después me parece que esos movimientos se equivocan de objetivo. No comprenden que no son creíbles para la mayoría de nuestros contemporáneos. Dan una imagen de la fe y de la religión puede que oportuna hace algunos siglos, pero que hoy no va  poder convencer más allá de un círculo restringido.  
 Fuente : “Confessions d’un Cardinal” de Olivier Le Gendre Éd. J.-C. Lattès, 2010, pp. 263-271.

[En España da lo mismo que sean "antiguos", "Opus" es el poder, cuentan con todo lo que se mueve a su disposición: finanza, partidos políticos nacionalistas catalanes y partidos políticos nacionales de España, periódicos, televisiones, radios, catedráticos silentes (de historia, de teología, de filosofía), sociedad postfranquista no evolucionada=anestesiada, "beautiful people", "celebrities" nacionales salidos de su ambiente, silencio cómplice de todo el que sabe como las gastan. En resumen: más vale tenerlos de amigos que de enemigos y que no se acuerden de una. En todas las polémicas nacionales que se montan están en los dos campos agitando un campo contra el otro. Ultimamente el tema "banderas disputadas". A no ser que alguien se plante en frente y les descubra el juego.]