Fe adulta

 

En esta iglesia de Plasencia se reunían las diferentes comunidades religiosas (judíos, musulmanes, cristianos) para resolver sus diferencias.

Lo que dice nuestra amiga italiana me da pie para hablar de algo. En efecto, todo lo del opus es impresentabale para las mujeres. Sólo Camino ya basta. Pero España, aunque nos empeñemos en ser la octava potencia económica del mundo, es un país que mentalmente, culturalmente, sintiéndolo mucho por una gran parte no ha avanzado. La iglesia, con el peso tan enorme que tiene en este país, es culpable. Y no sólo ella, también muchas personas responsables de haberle dado a este país un giro de libertad y democracia en serio, no como meras palabras. Entre la envidia que nos corroe y la cobardía para ponerle los cascabeles que hacen falta a los gatos que también hacen falta estamos todavía discutiendo ¡en 2008! sobre los crucifijos en las escuelas públicas.

Mietras que los aparentes defensores de la "libertad religiosa", (tiene toda la risa del mundo que salgan opus o similares a defender la libertad en la tele), realmente defienden ese catolicismo oficial porque les conviene, porque sacan tajada de él. Porque les llegan millones con el cuento de que son más religiosos y defensores de la fe en un mundo incrédulo. Cuando ellos son los primeros en poner toda su confianza en el poder de este mundo: es decir, demuestran con hechos que no tienen fe aunque en las palabras digan otra cosa.

Para una persona de fe, ¿qué te quita ni que te pone que haya o no haya un crucifijo en una escuela pública? o las procesiones de Semana Santa. Efectivamente ahora llevamos unos años de mucho furor con ellas, ¿y si pasa esta moda de procesionar qué? ¿qué pasa si dentro de unos años la junta de Andalucía tiene que pagar a gente para mantener la atracción turística de la semana santa? ¿se acabó la fe? Es preciso una fe más madura que en un país aconfesional con un concordato anterior a la constitución de 1978 no hemos alcanzado.

Querida amiga de Italia, no se improvisa ser una democracia, y aquí nos hemos pensado que prosperidad económica y sistema político democrático, ya tenemos todas las bendiciones para ser un país de los primeros del mundo. Nos faltan hábitos de pensamiento, de debate, de libertad en serio, de poner las cartas sobre la mesa en tantos temas en los que padecemos un pasteleo y peloteo insufribles.

Si alguien quiere preguntar algo privado con avisarme no publico el post, y si puedo contesto. Yo no tengo soluciones milagro para nada y para nadie.