Otra consulta memorable de Enrique Rojas, supernumerario del Opus Dei y psiquiatra de postín
Copio la última historia que me llega de un católico en la vida pública que da un ejemplo de profesionalidad para caerse de espaldas. Se añada a las que ya conocemos de María Menchaca, Saturio, Isabel Caballero...ánimo, a ampliar la lista que sois bastantes.
Alejandro Menendez Martinez dijo...
Ana, te dejo aquí mi historia con Enrique Rojas,
Mi historia con Enrique Rojas por suerte fue muy breve, en marzo de 1989 yo era un adolescente de 14 años con problemas en casa, había pasado los anteriores 3 años interno y había boicoteado el internado a golpe de plantes y forzado mi vuelta a casa, mi madre que estaba preparando una oposición a judicaturas ya me advirtió que no podría ocuparse de mi y que tendría que no dar la lata
Como la daba porque obviamente un adolescente requiere cierta atención y además yo no era muy obediente, cosa lógica dado que tampoco en casa miraban mucho para mi, mi madre buscaba una solución mágica que le permitiera tenerme tranquilo sin molestar mientras ella preparaba sus oposiciones, las oposiciones son algo que quema muchísimo y ella en aquella época estaba muy nerviosa e irritable
Esa solución mágica la planteo una tía mia que conocía un psiquiatra estupendo de Madrid, un señor que tenía una cabeza privilegiada, que había sido premio extraordinario en medicina y catedrático de psiquiatría de la complutense
Además había atendido al novio de ella y lo había curado de una fuerte depresión que lo había tenido mucho tiempo en muy mal estado y con ideas suicidas, por esa razón ella estaba muy agradecida a Rojas y lo defendía a capa y espada, aunque el tratamiento no había sido precisamente barato, el padre de su novio incluso tuvo que vender tierras para pagarlo
Mi experiencia fue la siguiente, fui 2 veces a Madrid, en una lo vi solo una vez y en la otra dos veces
El tenía la consulta en la calle Serrano de Madrid, era un piso enorme, debía ser un edificio de oficinas que se alquilaban y el debía tener varias alquiladas y haberlas unido, tenía varias enfermeras, mientras estabas en la sala de espera te ofrecían una coca cola, había cestos con caramelos que podías coger y como suele pasar en este país donde vivimos tanto de la apariencia tenía la pared tapizada de cursos y diplomas de todo tipo, algunos hechos en universidades anglosajonas
En aquellos tiempos, aparte de Rojas había otros dos psiquiatras que trabajaban con él y que también los veías, eran un hombre y una mujer, me hicieron unos test de los que salió que yo era muy impulsivo y que tenía muy poca capacidad para controlarme y para sacrificarme
Después conocí a Rojas, su despacho parecía una capilla, tenía hasta una virgen gigantesca en una hornacina colgada de la pared
En general su conversación fue un mero continuismo de lo que habían dicho los otros dos, que yo era un psicópata, que carecía de autodominio y que con mi personalidad iba a tener serios problemas en la vida
A los 14 años yo aún era bastante infantil, conservaba esa mentalidad libre de prejuicios que te hace ver las cosas como son, pero infantil no quiere decir estupido, quizá fue por esa razón por la que no me dejé deslumbrar por sus titulitos, su premio extraordinario y su catedra y al revés que mi madre y mi tía al salir de la consulta dije claramente lo que pensaba de él: este tío a lo que está es a sacar
Rojas me había dado muy mala espina, si pudiera definir su carácter en una sola palabra esta sería fullero, era un tipo de maneras suaves, muy ladino, con mucha letra.
Algunas veces el alma de una persona queda retratada en una décima de segundo, yo vi con muchísima claridad a Rojas en un momento que estaba hablando con mi madre que se le quejaba de lo trasto que yo era, que me miró, sonrió y dijo: es que eres un psicópata
En ese momento al sonreir hizo un gesto que yo capté perfectamente el tipo de persona que era Rojas, era un gesto así sonriente, prepotente, con los ojos me decía: ya te tengo; era un gesto de cazador, de ave de rapiña
Por lo demás el tratamiento consistió en recetarme una medicación de 120 gotas de Haloperidol, 4 Artanes y 3 Largactil diarios, esa medicación me causaba somnolencia, engordé o mejor dicho hinché muchísimo llegando a pesar 98 kg. Tenía poco pulso, mucha salivación, hablaba mal y era mucho más lento para moverme
Además le recomendó a mi madre que fuese a clase aunque no estuviera en condiciones, que me apuntase a campamentos, que estuviera siempre con gente de mi edad, en una palabra, que me socializase, como las consultas con él solían ser breves le dijo a mi madre que le contase cosas de mi por escrito
El resultado de todo esto fue que perdí el curso y fue la primera vez que tuve que repetir, los problemas en casa no solo no se solucionaron sino que se agravaron, era normal, antes salía más y me relacionaba con mis amigos, al engordar y ponerme tan mal en plena edad del pavo me empezó a darme vergüenza salir y relacionarme y empecé a meterme más en casa lo que generó más roces con mi madre
Por este “maravilloso” tratamiento nos cobró 40.000 pesetas, en aquella época sus honorarios eran 20 mil pesetas por consulta
Y eso fue mi salvación, en aquellos años el sueldo de auxiliar administrativo de mi madre no llegaba a las cien mil mensuales, eso y la incomodidad de desplazarse a Madrid fue lo que terminó prematuramente con este exterminio, además en aquella época un hijo de Rojas que tenía 2 años se cayó a la piscina de su casa y lo sacaron muerto, eso hizo que Rojas se desentendiera por un tiempo de la consulta y facilitó aún más el perderlo de vista
Seguí algunos meses con el tratamiento aunque algo disminuido, en octubre al empezar el curso me volvieron a meter interno, abandoné la medicación y perdí 31 kg. en 6 meses y todos los efectos secundarios desaparecieron, fue como volver a nacer, aquella medicación incluso me limitaba a nivel de inteligencia y de resolución de problemas, al quitarla era como si me hubiera vuelto más listo
Alejandro Menendez Martinez dijo...
Ana, te dejo aquí mi historia con Enrique Rojas,
Mi historia con Enrique Rojas por suerte fue muy breve, en marzo de 1989 yo era un adolescente de 14 años con problemas en casa, había pasado los anteriores 3 años interno y había boicoteado el internado a golpe de plantes y forzado mi vuelta a casa, mi madre que estaba preparando una oposición a judicaturas ya me advirtió que no podría ocuparse de mi y que tendría que no dar la lata
Como la daba porque obviamente un adolescente requiere cierta atención y además yo no era muy obediente, cosa lógica dado que tampoco en casa miraban mucho para mi, mi madre buscaba una solución mágica que le permitiera tenerme tranquilo sin molestar mientras ella preparaba sus oposiciones, las oposiciones son algo que quema muchísimo y ella en aquella época estaba muy nerviosa e irritable
Esa solución mágica la planteo una tía mia que conocía un psiquiatra estupendo de Madrid, un señor que tenía una cabeza privilegiada, que había sido premio extraordinario en medicina y catedrático de psiquiatría de la complutense
Además había atendido al novio de ella y lo había curado de una fuerte depresión que lo había tenido mucho tiempo en muy mal estado y con ideas suicidas, por esa razón ella estaba muy agradecida a Rojas y lo defendía a capa y espada, aunque el tratamiento no había sido precisamente barato, el padre de su novio incluso tuvo que vender tierras para pagarlo
Mi experiencia fue la siguiente, fui 2 veces a Madrid, en una lo vi solo una vez y en la otra dos veces
El tenía la consulta en la calle Serrano de Madrid, era un piso enorme, debía ser un edificio de oficinas que se alquilaban y el debía tener varias alquiladas y haberlas unido, tenía varias enfermeras, mientras estabas en la sala de espera te ofrecían una coca cola, había cestos con caramelos que podías coger y como suele pasar en este país donde vivimos tanto de la apariencia tenía la pared tapizada de cursos y diplomas de todo tipo, algunos hechos en universidades anglosajonas
En aquellos tiempos, aparte de Rojas había otros dos psiquiatras que trabajaban con él y que también los veías, eran un hombre y una mujer, me hicieron unos test de los que salió que yo era muy impulsivo y que tenía muy poca capacidad para controlarme y para sacrificarme
Después conocí a Rojas, su despacho parecía una capilla, tenía hasta una virgen gigantesca en una hornacina colgada de la pared
En general su conversación fue un mero continuismo de lo que habían dicho los otros dos, que yo era un psicópata, que carecía de autodominio y que con mi personalidad iba a tener serios problemas en la vida
A los 14 años yo aún era bastante infantil, conservaba esa mentalidad libre de prejuicios que te hace ver las cosas como son, pero infantil no quiere decir estupido, quizá fue por esa razón por la que no me dejé deslumbrar por sus titulitos, su premio extraordinario y su catedra y al revés que mi madre y mi tía al salir de la consulta dije claramente lo que pensaba de él: este tío a lo que está es a sacar
Rojas me había dado muy mala espina, si pudiera definir su carácter en una sola palabra esta sería fullero, era un tipo de maneras suaves, muy ladino, con mucha letra.
Algunas veces el alma de una persona queda retratada en una décima de segundo, yo vi con muchísima claridad a Rojas en un momento que estaba hablando con mi madre que se le quejaba de lo trasto que yo era, que me miró, sonrió y dijo: es que eres un psicópata
En ese momento al sonreir hizo un gesto que yo capté perfectamente el tipo de persona que era Rojas, era un gesto así sonriente, prepotente, con los ojos me decía: ya te tengo; era un gesto de cazador, de ave de rapiña
Por lo demás el tratamiento consistió en recetarme una medicación de 120 gotas de Haloperidol, 4 Artanes y 3 Largactil diarios, esa medicación me causaba somnolencia, engordé o mejor dicho hinché muchísimo llegando a pesar 98 kg. Tenía poco pulso, mucha salivación, hablaba mal y era mucho más lento para moverme
Además le recomendó a mi madre que fuese a clase aunque no estuviera en condiciones, que me apuntase a campamentos, que estuviera siempre con gente de mi edad, en una palabra, que me socializase, como las consultas con él solían ser breves le dijo a mi madre que le contase cosas de mi por escrito
El resultado de todo esto fue que perdí el curso y fue la primera vez que tuve que repetir, los problemas en casa no solo no se solucionaron sino que se agravaron, era normal, antes salía más y me relacionaba con mis amigos, al engordar y ponerme tan mal en plena edad del pavo me empezó a darme vergüenza salir y relacionarme y empecé a meterme más en casa lo que generó más roces con mi madre
Por este “maravilloso” tratamiento nos cobró 40.000 pesetas, en aquella época sus honorarios eran 20 mil pesetas por consulta
Y eso fue mi salvación, en aquellos años el sueldo de auxiliar administrativo de mi madre no llegaba a las cien mil mensuales, eso y la incomodidad de desplazarse a Madrid fue lo que terminó prematuramente con este exterminio, además en aquella época un hijo de Rojas que tenía 2 años se cayó a la piscina de su casa y lo sacaron muerto, eso hizo que Rojas se desentendiera por un tiempo de la consulta y facilitó aún más el perderlo de vista
Seguí algunos meses con el tratamiento aunque algo disminuido, en octubre al empezar el curso me volvieron a meter interno, abandoné la medicación y perdí 31 kg. en 6 meses y todos los efectos secundarios desaparecieron, fue como volver a nacer, aquella medicación incluso me limitaba a nivel de inteligencia y de resolución de problemas, al quitarla era como si me hubiera vuelto más listo
Comentarios
Haloperidol, tiene muchas contraindicaciones. Diría que se prescribe cuando otras terapias fallan (a Enrique Rojas parece que le gustaba mucho en su día este fármaco, a María Menchaca también se lo dio de inicio y le aumentaba la dosis aunque se sintiese fatal, estuviera como un corcho y el marido le dijese al ama "Pobre señora!! la vamos a tener que ingresar"). Saturio también se quejó de una medicación que lo podía haber matado (no sé si fue Haroperidol, pero él tuvo un infarto que dice que se debe a la medicación que Rojas le dio).
No podemos saber si Rojas pretendía cambiarte de tu internado a interno en el psiquiátrico privado donde internaba, pero tu madre era una presa muy fácil (con 14 años, no, pero ahota creo que puedes entender su lógico estrés por las oposiciones y su empeño en sacarlas.
El psiquiátrico privado al que mandaba Rojas, era una clínica con conciertos con Cías. de Seguros, hubiera bastado una póliza con una Cía. que tuviera al psiquiátrico en su cuadro médico.
De momento, en todos los que hemos hablado sobre la experiencia con Enrique Rojas, el interés en medicarnos con fármacos que han sentado fatal además de dejar sin, o disminuir la energía y por consiguiente anular la voluntad, ha sido una constante.
El haloperidol, bloquea los receptores de una sustancia, que se cree que los psicópatas producen en exceso (digo se cree pq esos resultados generalmente los dan los laboratorios farmaceúticos y después de lo visto, no me creo los resultados q dan los laboratorios).
Además de tener cierto riesgo cardiovascular, producir cambios de peso, sueño, tanto sequedad como salivación y un montón de cosas más, altera la función neurocognitiva (por eso te volviste más listo) y también pueden surgir problemas de psicomotricidad. Todo depende del tiempo y de la dosis.
Que te socializaras en ese momento en un ambiente normal con gente que no tuviese una motivación especial o "advertida y adiestrada", para relacionarse contigo, seguramente te hubiese producido más daño que beneficio. Al quejarte a Rojas, se hubiese encargado de proponerte campamentos, clubs para el ocio y amigos.
Rojas pone la maquinaria en marcha y deja que vaya dando sus frutos. Antes de conocerme Rojas a mí, a uno de mis hijos le dio por ir a un club del Opus y después fue a un campamento, cuando nunca había existido interés ni relación con el Opus, ni por n/parte ni por ellos.
El caso, es que sólo estamos aquí la gente con las que por azar, Enrique Rojas falló. Con todos surgió un imprevisto y no pudo culminar el plan que nos tuviese asignado.
Me preocupa mucho la gente con la que NO tuvo imprevistos.
Da taquicardias,y puede dar infartos, se te cae el pelo...En mi opinion nada positivo para nadie ni para nada.La vida se construye y se hace de otra manera no a base de internamientos,medicinas...
Pero tiene tela que el Rojas ande así desde el 89.
No hemos dicho nunca que el Instituro Español de Investigaciones Psiquiátricas, no es otra cosa que una sociedad mercantil propiedad de Enrique Rojas y Familily??
Lo digo ahora, es un punto que se me suele olvidar.
Es de ese sitio - una sociedad mercantil -, de donde Rojas vocea que es director.
De algo suyo - donde él se ha nombrado director a sí mismo -, no de ninguna Institución u organismo donde le hayan nombrado director, pese a que en la Comunidad de Madrid reina el Partido Popular desde hace tiempo.
Pero esas seguridades tienen siempre fecha de caducidad. Son engañosas. Apelan a lo más bajo siempre, bajo el barniz de "espiritualidad".
Bravo por los valientes que dan la cara y luchan, como esta chica Ana Azanza y otras personas que aquí escriben.
"Dios se vale muchas veces de los débiles para abatir a los poderosos".
Menuda gente. Esto de la "Justicia" del estado es una farsa.
Desde luego me parece normal que haya gente haciendo todo lo que puede para sacar del negocio a semejante animal de bellota.Cuantos más testimonios en contra se le acumulen mejor, en un mundo justo ya sólo el timo de la estampita de la Complutense le habría salido caro, pero no, como estamos en éste en el que al que no tiene ni dinero ni influencias sólo le queda el ruido que pueda hacer, espero que se vaya acumulando testimonio sobre testimonio, y ojalá incluso denuncias públicas, que dejen claro el tipo de desgraciado que es éste hombre incluso al que no se quiera enterar.
Yo por lo pronto me lo apunto, y si algún día lo escucho nombrar, o veo que cualquier persona está en proceso de caer en sus zarpas, ya correré yo a ponerles en la cara éste blog y el de Isabel y todo lo que pueda encontrar sobre ese bicho para evitar desgracias a más personas.
Lo cual no quiere decir que los médicos chapuzas no deban ser denunciado, Anónimo, y te animo a ello, pero si el chapuzas no tiene nada que ver con el Opus Dei, que es la causa que persigue éste blog, hazlo en otra parte: seguro que hay más de una plataforma de afectados por malos médicos, quizá incluso de afectados por psiquiatras concretamente. Suerte con ello.
Ya sabes que aquí hablamos, discutimos, decimos lo que pensamos... pero no quitamos a nadie de en medio por la espalda, ni siquiera lo intentamos.
Esto,
"mi madre que se le quejaba de lo trasto que yo era, que me miró, sonrió y dijo: es que eres un psicópata",
no me parece azar sino crueldad, daño perverso a un adolescente e intención de manipular a una madre a la que encontró presa fácil, con independencia de lo que hiciese el psiquiatra de Barcelona contigo, que no sabemos lo que fue. Me gustaría saberlo.
No he puesto una querella a Enrique Rojas y lo que me quede por poner... por ser del Opus Dei, sino por lo que me ha hecho y lucho para que se investigue lo que haya podido hacer a otros que no pueden luchar (no creo que Rojas me haya perseguido sólo a mí, no tenía nada especial, excepto q se daban unas circunstancias que consideró favorables para urdir su plan). Ha sido después cuando he descubierto su pertenencia al Opus Dei.
Yo he conocido varios psiquiatras publicos, la mayoría no tienen ni idea, se dedican a recetar y cambiar las medicaciones al buen tuntun, viven muy bien sin molestarse gran cosa y tienen una relación digamos un poco sospechosa, con los laboratorios farmacéuticos, yo como Isabel no me fío nada de estos laboratorios ni de ellos, pero lo de Rojas ya es dar una vuelta de tuerca al asunto, eso de inventarse títulos, cobrar unas minutas de escándalo y andar con componendas por detrás es algo excesivo incluso para la elástica moral de los psiquiatras públicos
La psiquiatría es la hermana pobre de la sanidad, la que menos presupuestos recibe, de ahí que muchas cosas que el estado no cubre las tenga que cubrir un sponsor privado
Cuando aún no había ordenadores en todos los servicios, los primeros ordenadores los pagaron ellos, que si un médico edita una revista y se la pagan ellos, que si llevamos a los médicos a un congreso a Roma, París o Londres todo pago en hotel de 5 estrellas, que si unas vacaciones pagadas al jefe de servicio, que si los invitamos a una cena en restaurante de lujo, en fin...
Logicamente no dan puntada sin hilo, y ya sabes lo que se deriva de esto
En cuanto al Haloperidol si tiene bastantes efectos secundarios, además por lo visto es un medicamento muy genérico, he conocido gente diagnosticada de esquizofrenia que lo tomaba, así que no es solo para trastornos del comportamiento, y lo mismo pasa con otros medicamentos como zyprexa o trankimazin, parece como si la psiquiatría aún no hubiese llegado a la época de los específicos
Lo que si te puedo decir es que en mi caso no hubo otras terapias que fallasen porque fue lo primero que me endosaron
Individuo de ademanes estudiados, suaves y mucha palabrería hueca, era un charlatán de palabras que suenan bien, un mal poeta. Yo intuí como era Rojas desde el primer día y prueba de ello es que tuve varios desencuentros por su forma de actuar, de disponer de mi tiempo, por la ausencia de mejoría a sus tratamientos y en definitiva por mi desconfianza hacia él.
Ante lo reivindicativo que le debía resultar, cada que vez que iba a Madrid a su consulta, me propuso una terapia a base de electroshock. (Pensaría silenciar para siempre mis reivindicaciones, sin importarle lo mas mínimo mi vida).
Se confirmaron de forma contundente mis prejuicios hacia Rojas. Nunca más volví por la consulta.
Creo, después de haberlo conocido, con el paso del tiempo y leer sobre sus fechorías, que este individuo es un psicópata (cuidado con él) y que debería llevar años inhabilitado como medico.
También tiene su cuota de responsabilidad el Colegio de Médicos de Madrid por encubrirlo y no sancionarlo disciplinariamente, pese a las denuncias presentadas.
Además apela a un suero milagroso que cobra aparte a precio de oro. Es el Florentino de la psiquiatria y te lo puedes tomar a risa salvo por el hecho que sopla 200 euracos por consulta y trata a personas con graves problemas.
este no tendria k salir d por vida d la carcel por todo lo k manipula y hace y...ya ha hecho.
mi madre me ha dado a leer un libro k pensaba ella me iba a ayudar y gustar leerlo...
el amor : la gran oportunidad
no he pasado del tercer capitulo y mi mente pensaba k no podia ser verdad lo k leia.. ojeando mas hacia delante aun ha sido peor...
entonces me he puesto a investigar y la verdad menos mal que no era yo la ke estaba ekivocada.
esta como una cabra!!!
Si lo lee alguien con menos criterio se la cuela hasta la cocina. es vejatorio para la mujer y subrealista y muy machista.
Y encima leo q la publicacion es d planeta y esta edicion la regalan en colaboracion con la Fundacion la CAIXA.
hasta donde puede llegar esta gente .su manipulacion y su adoctrinamiento ...porke esto no son solo mentiras...
A esas edades un chaval lo que necesita son respuestas concretas, no a un enteradillo que se pone a divagar delante tuyo de todo lo divino y lo humano y todavía pretende que te quedes diciendo: oohhh que listo eres, yo te puedo decir que a mis 14 lo único que me interesaba del psiquiatra era quitarmelo de en medio, que para mi era un rollo como las clases de matemáticas del instituto y que a mi lo que me gustaba era la música, el role, jugar al ordenador, andar por ahí con mis colegas y tontear con las chicas
No necesito de ningún tutor, prefiero equivocarme yo, para mi el desarrollo está en equivocarse y aprender para la próxima vez no en un sabelotodo mantenido que te pretende organizar la vida desde su sillón con su gran sapiencia
Nunca he conocido a nadie realmente inteligente que se fíe de otra persona, el ser humano es como es y aunque no tengo la menor duda que existen buenas personas la tendencia al mal está ahí y tenemos que guardarnos de ella, yo jamás confiaré en un profesional de estos, nunca lo hice y con la perspectiva que dan los años se que hice lo mejor
Además no somos iguales, tú puedes querer algo para otra persona con la mejor voluntad y ese algo no ser bueno para ella
Pienso que la sociedad y el estado lo único que quieren es fabricar individuos que les sirvan y la psiquiatría va en esa línea, un psiquiatra puede ser un médico que intenta curar trastornos nerviosos pero no es menos cierto que también es un individuo que intenta meterte los valores de la sociedad, es decir la disciplina del miedo, la ley del más fuerte, el aborregamiento y la sumisión, en esa línea va la prepotencia con que los psiquiatras y auxiliares de enfermería tratan a los internos en las unidades psiquiatricas publicas, las contenciones, los cuartos de aislamiento, la falta de pestillos en los baños, todo ello recuerda muchísimo a la mili que más que un sitio para aprender formación militar era un sitio para que los militares hicieran sus trapicheos con los suministros y para que los chavales que eran rebeldes pues allí los cortaban y los usaban como criados de los mandos, pasa lo mismo con la policia que puede que intente evitar delitos pero también está para apalear manifestantes y disidentes, etc.
Desde luego tanto mis libertades como mi idiosincrasia son incompatibles con la psiquiatría, yo el sentarte con alguien que no conoces y abrirte con él lo veo totalmente exótico, y lo mismo pienso de la religión y de los videntes y demás especies, no entiendo como la gente se fía de alguien que gana dinero solo por hablar
Yo desde luego tampoco pretendo ser la brujula de nadie ni que nadie lo sea de mi, opino lo mismo que decía un anónimo más arriba, la vida se construye de otra forma y no con internamientos ni pastillas, si a ti te colorea la vida ese médico me parece estupendo pero como tú misma dices nadie está cortado por el mismo patrón, la mía era muy gris con los psiquiatras al lado, por suerte ya hace mucho que acabó y no parece que vaya a volver
Tenemos que aprender que en la vida no existen las soluciones mágicas ni las recetas para ser feliz, sino lo asumimos los horrores de la sumisión y la psiquiatría pueden ser algo mucho más cercano de lo que deseariamos
.No sé cuánto dinero se dejaron mis padres en Serrano 100. Me repelió siempre su personalidad, su displicencia, su altanería.Acabó por desahuciarme , casi literalmente. Me prometió buscarme un empleo de cajera en un banco de mi ciudad, ante lo que mi padre y yo salimos huyendo. A día de hoy, soy periodista y máster en Relaciones Internacionales, he publicado 3 libros y mi vida es buena gracias al trabajo de psicólogos y psiquiatras magníficos. Estoy casada , enamorada y feliz. Cada vez que paso por su consulta me pregunto qué seguirá haciendo. Me dan ganas de vomitar cuando veo sus libros en las librerías. Este tipo debería estar fuera de la carrera de Medicina. Ojalá algún día podamos verlo en la calle.
Abrazos para todos
Es que la rebeldía no es una enfermedad, es que no se pueden convertir problemas sociales en biológicos, si llevarse mal con una madre que no miró para mi en la vida y no salir de vinos es ser un psicópata pues apaga y vámonos
La psiquiatría no tiene nada que ver con la medicina, los DSM no se basan en descubrimientos científicos ni en cambios en la metodología científica sino en un proceso de votaciones y consensos en los congresos psiquiatricos norteamericanos, es decir se reunen un grupo de especialistas gringos y deciden entre ellos que es enfermedad y que no (y esos especialistas están muy tocados por la industria farmaceutica, un 60% de los que redactaron el ultimo DSM tenía vínculos con los laboratorios según un artículo del New York Times)
¿por qué en los 70 ser homosexual era una enfermedad mental y ahora no? ¿por qué hasta ahora ser transexual era tener disforia de género y ahora ya no se considera enfermedad? para un hematologo tanto un sida como una leucemia son enfermedades, independientemente del estigma social que acarreen
Un diagnostico psiquiatrico no deja de ser la opinión personal de un individuo que tendrá todos los estudios que quieras pero ese diagnostico no tiene el menor aval científico ni la menor evidencia, un anatomo-patólogo te diagnostica un cáncer basándose en una biopsia, un hematólogo un sida basándose en un analisis de sangre, un psiquiatra te coloca un diagnostico basándose en su opinión personal que saca mirándote la cara, opinión personal que es bastante discutible y que suele ser más un resumen de sus propias miserias y insuficiencias proyectadas en ti que de tu realidad
En el fondo eso eran los grandes psiquiatras, gente como Vallejo-Najera que a sus clases iban incluso de otras facultades porque las convertía en un espectaculo exhibiendo enfermos y excitando el morbo barato de la gente, son personas que tienen cierta valía para hablar, escribir, tienen cultura, son amenos pero eso no los hace científicos, son simplemente vividores con mucha trastienda (Vallejo-Najera a la hora de la verdad no curaba a nadie, recibía enfermos de toda España en su consulta, les cobraba un pastón, les daba un baul de pastillas y pa casita)
Una amiga mía describe a esta gente con una frase que no diciendo nada es tremendamente descriptiva, que esta gente son mucho lelele y poco lalala
A día de hoy, y siendo graduada en química, me doy cuenta de que este hombre se aprovechó de nuestra ignorancia, una familia de clase media extrapeninsular, que las pasaba canutas para poder costearse una semana a base de salino en Madrid. Sólo puedo darle las gracias por haberme convertido en la científica escéptica que soy ahora. Por suerte mi padre consiguió mejorar sin el cóctel de benzodiacepinas y salino que pagaba a precio de oro.
Por otro lado, me resulta alucinante que un psiquiatra tenga su despacho como una capilla y con vírgenes. Denota una auténtica falta de profesionalidad.
Acabo de dar con este blog porque ayer estuve viendo un vídeo de una conferencia de su hija Marian, también psiquiatra, que me gustó mucho pero hubo tres detalles que me llamaron la atención: en primer lugar, nada más empezar a hablar me recordaba a un cura dando un sermón en el púlpito (esos curas que quieren adoctrinar con un tono de voz que te cala hasta los huesos. No sé si me explico. Es una sensación que me dio parecida a eso que explico); en segundo lugar, una idea subliminal que lanzó muy sutilmente sobre la maternidad. Y pensé: esta tía es del Opus. En tercer lugar, las experiencias que cuenta sobre ciertas actividades que realizó durante su etapa universitaria. Me daba por pensar que detrás de ello habría una mano que la favorecía. El caso es que no conocía nada sobre ella ni sobre su familia. Pero por el apellido, me hizo ponerme a investigar esta misma mañana. Soy de naturaleza curiosa y critica. Pues nada más rascar un poco, he dado con este blog y muchas más páginas donde dicen lo mismo que vosotros. Confirmando que mis intuiciones de ayer mientras la escuchaba tenían fundamento.
He leído aquí en un comentario algo sobre un libro suyo, del padre, que regala la fundación La Caixa. No me extraña puesto que la mujer de este tipo tiene un puesto importante en dicho banco. Todo cuadra.
Dicho todo esto, tengo que decir que lo que escuché a su hija me gustó mucho. Ahora tengo dudas de que todo lo que se atribuye sea suyo. Pero, sea de quien sea, es muy bueno. Se basa en las típicas frases de autoayuda y en diversos autores nombrándolos, es decir no se apropia de ello. Y también en sus estudios de medicina y sus experiencias. Ahora voy a ponerme a investigar sobre esta chica. Que su padre sea lo que parece ser, no quiere decir que ella también. Veremos…
Mucho ánimo a todos.
Un saludo
Yo tras un bulling y una depresion muy joven hace muchos años y aunque ya iba a un psiquiatra que ya me ayudaba y era bueno, empece a tener problemas con un hermano. Mi hermano era psicopata y muy manipulador y el hecho de yo darme cuenta hizo que empezara a tratar de convencer a mis padres de que yo estaba loco y que todo lo que me habia sucedido era culpa mia y de mi personalidad. Como yo explicaba a mis padres como era mi hermano y el se dió cuenta, pues convencio a mis padres de que mi psiquiatra no me estaba ayudando y me buscaron a Enrique Rojas. Me engañaron con que iba a una terapia familiar y yo cedi a ir porque pense que si era buen psiquiatra en cuanto viera como era mi hermano se lo explicaria a mis padres y se acabo el problema. Pero el se sento conmigo un rato y ni me dejo casi hablar y me hizo un test ya con la intencion de diagnosticarme algun trastorno y yo ni lo sabia. Fui varias veces mas a la psicologa q tenia en su consulta a la que tambien la trate de explicar lo que sucedia en mi familia. Note un cambio en mis padres, hablaban a mis espaldas y se callaban cuando yo aparecia y ni me escuchaban ni creian nada de lo que les dijera, note cambios hacia mi del resto de mi familia asi q les preguntaba a mis padres si pensaban q el problema era yo y me lo negaban. Casi me vuelven loco......(sigo)
Y aprovechando q en esa epoca era famoso el DR Luis Rojas Marcos, se llamaba a si mismo DR Rojas en sua presentaciones o conferencias para q se le asociara a ese otro psiquiatra famoso y ademas promocionaba sus libros presentandolos con sus amigos del OPUS politicos del PP para q sus libros tuvieran mas visibilidad y se vendieran mas. Y asi poco a poco se iba haciendo famoso. Pero quien lee sus libros y post ve q son vacios de contenido real, pomposos y pura fachada como es el, y son copias de trozos de otros libros ingleses de psicologia. Es un psicopata- narcisiata integrado.
Yo en esa unica conaukta con el ya senti algo raro en au actitud,?fria y distante y al contrario del psiquiatra anteeior al que fui 1 año tras el bulling, el cual me trataba como un amigo y me eacuchaba y era empatico, Rojas era frio y le daba igual eacucharme. Se q el teat q me hiso lo saco de algun libro. Asi no acierta nunca ya q ni ha eatudiaso paiquiatria,solo copia libros y usa la psicologia q todo psicopata tiene...
Cualquiera q es inteligente le cala pero si vas ahi siendo joven y aun ingenuo, te cuela cualquier etiqueta y trata de venderte pasatillas de las q saca comisiones y se queda tan agusto.
La mentira del Opus es la mentira de Satanás que solo piensa y vive para y por el dinero,dinero,dinero.En realidad es lo mismo que hacen las mujeres y hombres que venden su cuerpo precisamente,a todos estos y estás que están obsesionados y obsesionadas por el sexo.Los mejores clientes y clientas son del Opus.Recordemos el famoso pub 240 (el dueño era supernumerario y la "familia" amplió
y continuó el negocio.)
Todo un sinsentido: fármacos a boleo, si otro psiquiatra habia dicho que trastorno tal, él se apuntaba a ello y también te lo endosaba.
No comprendo que los medios de comunicación le saquen tanto y como si fuera una eminencia. No sabe hacer la O con un canuto. Y lo peor es la de gente que ingenuamente va a él y es estafada. Consultas de media hora a 200€.
Qué opinais de sus axudantes?
Que fue condenado y todo lo demás...ya lo han borrado de las cabezas de la gente y de los buscadores.