¿Por qué se ocultan los del Opus Dei?

Lo de dar los nombres de miembros y ex miembros duele particularmente al opus dei.

En las entrevistas a diversos miembros cuando se les saca la cuestión salen por peteneras. Con su habitual falsa sonrisa, lo llaman discreción, pero están pensando algo así como "es que sabemos que somos mucho mejor que los demás pero no queremos presumir de ello."
Realmente nunca me he topado con un marista, jesuita, carmelita, cura de parroquia, ex monja, ex cura, capuchino, franciscano o adoratriz que se moleste porque se le recuerde su pertenencia antigua o presente a una orden religiosa. ¿Por qué se pican si cuando se dice Opus Dei se entiende que eso significa "católico que se santifica en medio del mundo con su trabajo profesional"? Debería de ser un motivo de orgullo y satisfacción....

Yo comprendo que los compañeros de Al capone o los miembros de la banda ETA no fichados (¿legales?), o cualquier facineroso le venga bien estar en la sombra. Lo que no comprendo es porqué una institución católica que va camino de ser la mayor fábrica de santos de la historia tengan este prurito de que no se sepa quienes son. Se ha llegado a dar el caso que un juez ha multado a un abogado por preguntar a dicho juez sobre su pertenencia al opus dei. Le ha ocurrido a Magi, un abogado que pasó por aquí.

La fe no es creer cosas raras. Se confunde voluntariamente la fe con el sometimiento a unas autoridades religiosas. Falso, puedo estar muy sometida a unas autoridades religiosas sin tener fe ninguna. Y al contrario, sin autoridades religiosas también se puede tener fe. Y eso lo saben mejor que nadie los curas...hay un terreno de juego con las conciencias bastante resbaladizo y en el que nadie se mete a fondo.

La fe es firmeza. En realidad los dogmas "raros" en la iglesia (tipo la virgen es virgen y madre, o las tres personas y una naturaleza), han tenido una finalidad de poder. De asentar el mando de unos, los clérigos que los proclamaban, sobre la grey. Jesús no vino al mundo a decirnos cosas imposibles para el intelecto y así "hacernos necesitar la fe", eso es una deformación fomentada por el afán de dominio en la iglesia. Sin los dogmas de la encarnación ni de la trinidad, la fe sigue siendo igualmente necesaria para vivir las personas. Porque el mundo, la vida, mi vida, la de cada cual plantea muchas preguntas sin contestar y porqué no sabemos que será de nosotros, pero nos lo preguntamos como seres racionales. Ahí entra la fe. El opus dei es un fraude, el evangelio no es un fraude, ni el Dios de la Biblia ni Jesús. Son creencias perfectamente legítimas si se viven en el respeto y sin inquisiciones. Y además me parece que una fe sincera en cualquier religión, une a las personas entre sí, también interreligiosamente.

Pero la fe es un sentimiento que está dentro de la persona, y eso es lo importante, la fe que se demuestra en la realidad de la vida por lo que uno hace. Ocurre que en España el catolicismo es muy sociológico, la religión ha sido y todavía parece ser un expediente social de buena conducta. Falta espiritualidad auténtica. Eso es otra cosa y yo la encuentro en filósofos como Simone Weil, que tiene una mirada muy especial sobre este mundo.

Yo no quiero un premio nobel de la constancia. Yo quiero que tú que piensas y dices eso des la cara, y tantos más que entran por aquí. Porque este problema del opus dei es de todos, (como la crisis), y no se soluciona por que una Isabel y una Ana sean valientes.

Me alegro de que digan en Pamplona en la calle públicamente que UPN favorece al opus dei, vamos avanzando.