Celebración de la familia

"Sí Ana, falta una sesión de juicio q se celebrará el 8 de abril porque algunos médicos no habían podido ser citados y un testigo de Rojas, q ya compareció en su día en instrucción, no aparece.




Cuando los asuntos pendientes se alargan tanto, se dan muchas dificultades, la gente cambia de domicilio... y en ese juzgado que me ha tocado había pocos funcionarios (creo q sólo tres).



No sé si los juzgados son muy diferentes de unos a otros, yo conozco los que conozco y éste me ha parecido especialmente ordenado.



No puedo hablar todavía sobre el asunto de Rojas, estoy como muda, bloqueada... supongo que se me pasará en unos días.

Creo que tengo más miedo que antes, no por la justicia, a la justicia no le temo, si no hay justicia recurriré y ya me habían dicho los abogados, que me preparara para no terminar, porque si se hacía justicia seguramente recurriría Enrique Rojas y si no se hacía recurriríamos nosotros.



Quizás el miedo venga por algunas declaraciones que oí, pero tampoco estoy segura que sea por eso, es una sensación general.



No estaba permitido hablar de la falsa cátedra que Enrique Rojas se adjudica desde 1984, en la Universidad Complutense de Madrid, para llenar su consulta, por lo tanto no se habló.

Entiendo que el juez no se pronunciará sobre este asunto, ni habrá comunicado para alertar ni a España ni a ultramar, por lo que habrá que seguir pregonando, para que nadie caiga en la trampa de acudir la consulta de un individuo, que se presenta con sabiduría y fama impecable, cuando no es cierto.



No te prives de subir 4 papeles de esos que tenemos de los que informan y alertan del peligro que supone este engaño.

En cuanto tenga ánimos lo haré en mi blog.



Y para los que acuden a su consulta (para los que han acudido ya no hay remedio), os aseguro que cualquier aspirina q os dé este sujeto, la utilizará en vuestra contra para etiquetaros y recriminarlo en un juicio. Aunque nunca acepté sus aspirinas (en realidad tuve escaso contacto con Enrique Rojas, comparando con lo que dura una terapia o un tratamiento), las está utilizando en mi contra.



Un saludo a todos,



Pdta.: Acabo de darme cuenta que yo, con perfil de ciudadana de a pie sin relevancia alguna, me estoy enfrentando a un "catedrático de Psiquiatría de la Universidad Complutense de Madrid" y quizás la sensación de miedo sea por eso. David contra Goliath + el tráfico de influencias, pero que se haya dado hasta ahora, no quiere decir que ahora también se dé.














Isabel, has hecho mucho. Es normal que tengas miedo. Toda la gente que se arrima al Opus Dei sabe que es el mejor árbol para cobijarse de cara "al progreso a la cumbre sin demasiados trastornos." Todas las puertas se les abren, todas las dificultades y problemas de la pequeña gente de a pie que somos tú y yo no existen. Se deshacen como la nieve al sol. Esto es así desde hace ya cincuenta años en España, y no ha cambiado ni un punto ni una coma. Florecieron con el dictador, porque nacieron a su sombra. Donde hay autoritarismo, imposición, ausencia de libertat y de derechos están en su elemento.

Lamentablemente no hubo verdadera transición a un régimen de libertades y de "igualdad de los ciudadanos ante la ley". Nominalmente, hay una constitución. Pero a la hora de la verdad siguen existiendo "poderes fácticos", el Opus Dei es uno de ellos, "que se llevan el gato al agua". Es significativo que este sea el título del programa más famoso de Intereconomía....su cadena.

Todas las dilaciones que se han dado en tu caso es una forma de no hacer justicia, de agotar al contrario, de hacer que se te quiten las ganas de seguir, de aburrir al personal. De que te tires de los pelos a poder ser.

Claro que somos David contra Goliat, no tenemos el apoyo de ningún grupo de presión que pueda amenazar por detrás a un juez, a un fiscal, a un abogado, a un médico, a un testigo en un juicio incluso a un policía como hacen ellos. Muchas veces cuando amenazo a los alumnos con ponerles un parte o suspenderles, me doy cuenta de que el Opus Dei no necesita amenazar con que te voy a hacer tal o cual cosa. Esta gente te la hace sin esperar y sin dar oportunidades. Cuando y donde menos te lo esperas atacan. Sin que les tiemble el pulso. Son implacables, crueles, carentes de cualquier escrúpulo. Y  lo contagian.

David contra Goliat

El común de los mortales no es "terminator" pero ante lo que se le puede venir encima si no haces lo que ellos quieren, cede.
Cuando se nota el poder del Opus Dei esa fuerza ciega y sorda, que hace que la gente calle la boca por puro miedo, por puro interés, ya no por perder un puesto de trabajo, sólo "por quedar mal"... la verdad que sí que te sientes como una hormiga frente al monstruo. Es normal. Pero lo importante es resistir y resistir. Dar los pasos que tú has dado hasta llegar al día de hoy.
 
Jamás pensó ese sujeto que ibas a llegar a sentarlo en un banquillo. A él, al catedrático, al que los ex ministros PP presentan como el gran gurú de la "felicidad", de cuyos libros están las librerías llenas, y sus porquerías de planfletos en primera plana... Es un opus dei, y ten por seguro que irán diciendo: "Póngame este libro en el escaparate". Protegido del Rouco y el Cañizares....qué horror, un hombre que por tal de arañar unos míseros millones es capaz de quitar a una madre de en medio. De meter cizaña en unos hijos adolescentes, ¡qué barbaridad!. Ellos que llevan años con sus celebraciones en pro de la familia, llenando la Castellana, y mira lo que te han hecho a tí.



Misa de las famiias

  
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Porque sé bien que más que tu dinero lo realmente duro y lo que de te deben recompensar allí arriba es el haber pasado por eso, porque tus propios hijos a los que has dado la vida y has criado como la cosa más preciosa, como cualquier madre, te los pongan en contra, y con 12 15 años, vaya un "falso catedrático" a decirles que "mamá está enferma".
 
Está bien Isabel, lo has pasado, lo has vivido, lo has soportado. Es real. No son elucubraciones. No estamos haciendo discursos, ni teorías, ni sermones sobre la "esencia eterna de la familia", o "la esencia del matrimonio", lo que el matrimonio es y no es por definición. Estamos demostrando lo que tanto tú como yo como cualquier persona afectada por el fanatismo Opus Dei en cualquiera de sus versiones hemos tenido que soportar.
Envenenamiento de las relaciones con aquellos que son carne de tu carne y sangre de tu sangre. Que se sepa, que esa es la "celebración de la familia" que hacen los miembros del Opus Dei, amargar la existencia, separar hermanos, separar hijos de padres, maridos de mujeres, encizañar, sembrar odio.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
De todo lo que te quita el Opus Dei eso es lo peor, y hay que pasarlo y aguantarlo. La pérdida de dinero, las calumnias "enferma, depre, loca"....un cuerno para todos los que repiten sin saber, lo peor es que te quitan a los tuyos, a la gente que más quieres.
Pero la historia no se acaba ahí, eso es lo que les gustaría. Al menos en mi caso me ha servido para aprender, para madurar, y distinguir.
 
Otra persona me hablaba de un acoso por parte de gente del Opus Dei. Yo sólo tengo una receta. No sirve de nada ir a sus centros, armar la marimorena, montar un escándalo en la calle, a veces no estaría de más. Lo mejor es denunciar. Yo lo hice y fui numeraria casi dos décadas. Cuando desperté a mis derechos como ciudadana de un régimen de libertades, cuando me dí cuenta de la tomadura de pelo que había sufrido tomé la decisión de cortar toda relación. Me habían engañado, llevaba desde la adolescencia metida en una secta, de la manera más tonta. Pero quería darle un giro a mi vida y se lo dí. Y me dió igual ir a la policía. Fui a la comisaría de la policía nacional de Arquitecto Berges, aquí en Jaén.
 
Denuncié a la numeraria con la que "había hecho la charla", Toya Herrera porque no dejaba de acosarme, de ponerme recaditos en el móvil, en el buzón.Ya está bien, tengo derecho a decidir y a llevar a cabo mi decisión, me metieron en el Opus sin yo saber donde estaba, y ahora que lo sé, me voy. Y me voy es me voy. No "me quedo a medio camino". Me voy.
Me impresionó lo que estaba haciendo pero hoy más curada que entonces sé que es lo suyo, que las personas, los ciudadanos de un país con constitución, no tienen porque someterse a esclavitud de nadie. Ni del Opus Dei, ni de un cura, ni de una organización. Y si has tardado 20 años en darte cuenta eso es lo que hay.
 
Por eso denuncié, porque había agotado todas las vías de la paciencia y la educación, había escrito a las dires de Granada, de Madrid y de Roma: "no quiero contactos".
Para esta gente la palabra de una numeraria minúscula, gilipollas y retontísima como me tenían catalogada es papel mojado. Así que siguieron llamándome, y tuve que tomar la decisión de denunciar. ¿No voy a poder estar tranquila en mi casa sin llamadas inoportunas? ¿No voy a poder ir por la vida relacionándome con otras personas que no tengan nada que ver con esta secta? se proponen que no lo consigas y te cierran todos los caminos. Y hay que pelear. Los derechos no son nada sino se pelea por ellos.
 
Ahora ya no sé que más podrían quitarme, tengo poco.
 Pero  no voy a volver a permitir que se me arrebate mi dignidad.
 
Tú has peleado Isabel, y te lo has ganado. Da igual lo que pase y lo que dure este juicio, no está ocurriendo en una rincón oscuro como a ellos les interesa.
No van a poder tapar nuestra voz. Aunque nos maten. Que no nos van a matar. El testimonio está dado.