UNA LECCIÓN DE SANTA PILLERÍA INTERNACIONAL

DE Villegas había estudiado ingeniería. Era ecologista, contrario a la energía nuclear y creía en los platillos volantes. Sobre todo era un furibundo anticomunista. Estaba convencido  de que faltaba agua en el mundo, solía decir que podíamos pasar sin petróleo pero no sin agua. Le dijo a  Jean Violet que había inventado una máquina detectora de agua subterránea. El triple agente Violet se dio cuenta de que una máquina así podía ser una máquina de hacer dinero si se vendía en países como España o en el próximo oriente.

Villegas y su ayudante Bonassoli habían inventado además un proceso de desalinización a bajo coste. Su invento para buscar agua podía profundizar hasta 6 km bajo tierra. Violet se convenció cuando vió el prototipo y pensó en el financiero Carlo Pesenti, un industrial italiano próximo al Vaticano y a Crosby Kelly de NY. Este último se confesaba de derechas, conservador y anticomunista. Se dijo que trabajaba para la CIA. Trabajó en la Ford diseñando coches. Le dijo a Jean Violet que antes de poner dinero quería asegurarse de que el invento funcionaba. 

Sánchez Bella, ministro de información y turismo hacia 1969

Sánchez Bella a la sazón ministro de información y turismo puso a funcionar el invento en varios lugares de la seca y turística España. Pagaba el gobierno español. Los ensayos se vieron interrupidos por la guerra de Yom Kippur en 1973 y la subsiguientes crisis del petróleo por el boicot de los países productores. Villegas convenció a Pesenti de que su invento también detectaba petróleo y el italiano puso más dinero.

 

Dada la situación internacional el proyecto de la máquina detectora de agua y petróleo se transformó en algo más, una cruzada para liberar a Europa de la necesidad del petróleo islámico. Antoine Pinay ayudó con sus contactos a que la máquina fuera probada en Sudáfrica, se gastaron millones y no salió ni gota después de haber perforado la tierra hasta 6000 m.

Los socios españoles de Jean Violet se desinteresaron del invento. Tras el asesinato de Carrero en diciembre de 1973, los opus fueron barridos del gobierno. Ya hemos aprendido que es posible que lo fueran por el propio opus, opus hasta la fecha nunca pierde en España, se van para regresar. De hecho ya habían vencido puesto que el candidato a Jefe del Estado una vez muerto Franco lo eligieron ellos y me atrevería a decir que nadie más lo eligió. Mientras, como "no hay mal que por bien no venga" -enigmáticas palabras del dictador tras la muerte de su mano derecha-, España había establecido muy buenas relaciones con Arabia Saudí, en parte por el príncipe saudí que estaba mezclado en uno de los opusinos proyectos anticomunistas, el principe Turki, así que Arabia nos vendía a buen precio su petróleo.

Una compañía sándwich es un invento para forrarse facilitando contratos en paraísos fiscales donde no se sabe de quien es el dinero. Jean Violet usó sus contactos como espía para buscarse otros incautos clientes, ya que los españoles no le hacían caso. En mayo de 1976 la ELF firmó un contrato en Zurich en la Union Bank de Suiza con una compañía sándwich radicada en Panamá llamada FISALMA que representaba al inventor Villegas. ELF pagaría 50 millones de dólares por el uso durante un año de 2 detectores de petróleo.

El presidente del banco donde se firmó el contrato era Philippe de Weck y otro de los directivos el cónsul panameño en Zurich, Arthur Wiederkehr. FISALMA se la había inventado Wiederkehr, la controlaba Villegas y de Weck era el presidente de la misma.

Hicieron pruebas en 1976 sin éxito. Luego se fueron a hacer agujeros en Montégut, en el Languedoc, en enero de 1977 empezaron a perforar, en abril seguía sin salir petróleo. Pero ELF renovó el contrato por un año más.

A pesar de los evidentes fracasos en 1978 la compañía ELF volvió a contratar el invento y triplicó la inversión, todo ello se logró en la central del banco mencionado en Zurich. El Tesoro Público francés autorizó a ELF a mantener secreto el contrato, los audiotores gubernamentales no debían enterarse. 150 millones de $ cayeron para el supuesto invento. Eran 450 millones de francos suizos y el banco cobró unos intereses del 6% con lo que al final la cosa quedó en 500.

En la reunión en que se firmó dicho contrato había mucho opus, estaban a parte de 3 directivos de ELF, los dos inventores, Pinay, Jean Violet, Philippe de Weck y dos curas: Marmier, un cura de Friburgo especializado en nulidades matrimoniales, así lo presentó de Weck. No se sabe qué pintaba un cura allí, y menos dos. De toda fomas no hubo divorcio entre ELF y FISAMA y se firmó el nuevo contrato millonario.

Valéry Giscard d’Estaing estaba en su sexto año como presidente. Estaba informado del proyecto pero se quedó helado cuando supo que las prospecciones ya habían costado 200 millones. Pinay que ya era un octogenario, tenía 88, le convenció para que asistiera a una demostración en abril de 1979. También estubo Philippe de Wcck, fue un fiasco como siempre. Giscard ordenó parar y pidió una investigación.

En pocos minutos se dio cuenta del engaño en el que habían caído los directivos de la ELF, los descodificadores eran dos cámaras de vídeo con un generador de efectos especiales..

La amenaza de denuncia animó a los banqueros de la USB a devolver 250 millones de francos suizos. Los liquidadores del caso embargaron una pequeña flota de aviones que tenía Villegas en un hangar  de Bruselas, con su venta más las acciones ELF recuperó otros 41 millones. Villegas y Bonassoli, este último el único título que tenía era reparador de televisiones, no fueron denunciados por alta estafa.

Chalandon, el nuevo jefe de la ELF explicó en el parlamento francés, “más que estafadores eran un par de locos. Habían falsificado las máquinas pero creían en su invento. Villegas era un místico en el límite de lo normal y Bonassoli vivía fuera de la realidad.” En otras palabras, ambos se habían bebido un buen trago de santa pillería.

Por lo demás el grupo de Pinay continuó elaborando informes enviados a ministerios  y servicios de inteligencia previamente y cuidadosamente seleccionados.

Nunca se dieron cuenta cabal de  donde fueron a parar todos los millones que ELF dio a FISALMA. 2,8 millones financiaron la construcción de un Foyer de Charité con su iglesia dedicada a María Madre de Dios en el sur de Francia inaugurada en junio de 1979. Villegas dio 52mil a una escuela para los indios de la región colombiana de Chocó. A través de una fundación creada en Liechtesntein, Villegas financió proyectos en Níger, Ruanda y España por otros 7 millones de dólares. Los proyectos africanos consistían en comprar ambulancias y hacer pozos, lo que lleva a pensar que el grueso se fue para España. FISALMA tenía cuenta abierta en el IOR, el banco vaticano, que supuestamente financió secretas operaciones políticas.

ELF recuperó 100 millones ¿qué pasó con los otros 50? Lo mismo que los 180 de MATESA se perdieron a través de contratos con compañías sándwich. Con MATESA y FISALMA más de 200 millones de los contribuyentes españoles y franceses chapotearon en el sistema monetario internacional, fuera de control y preparados para ser utilizados en diversas opusinas cruzadas, por ejemplo la lucha contra la guerrilla de inspiración marxista en América hispana o el asalto a un estratégico banco europeo.

Los 2 banqueros suizos mencionados en esta historia salen como banqueros al servicio opus en historias de RUMASA sacando dinero de España para proyectos opus en otros países, y también salen a propósito de los líos del IOR, el Ambrosiano y Calvi. 

Canela en rama todo lo que se puede deducir y colegir de las memorias de Blas Piñar y su relación con Alfredo Sánchez Bella. Lo dejo para otro día.