LOS 3 OBJETIVOS OD EN 1978
Primero un vídeo de "historia oral", testimonios de hijos de deportados españoles en campos de concentración nazis durante la segunda guerra mundial a los que Franco desposeyó de la nacionalidad española, porque "todos los españoles estaban en España". Benito, un historiador que se ha preocupado de estas personas. Francia, el país que reconoció pensiones en los años 70 a estos compatriotas.
Estamos en 1978. El matrimonio Calvi acompañados de Giacomo Botta, dir. del departamento extranjero del Ambrosiano viajan a Montevideo. Allí se encuentran con Umberto Ortolani, quien había abierto las puertas del Vaticano a Calvi, había sido nombrado embajador de la extraña y exótica Orden de Malta, con sus sellos, sus matrículas de coche y sus embajadores. Ortolani y uno de sus hijos viajó con los Calvi y Botta a Buenos Aires, donde esperaba Licio Gelli, su esposa Wanda y sus 2 hijos.
En Buenos Aires Calvi negoció con las autoridades argentinas la apertura de una sucursal del Ambrosiano. De hecho Calvi, Gelli y Ortolani invitaron a todos los jefes militares de la marina a una cena. Al final del convite los almirantes preguntaron cómo podrían financiar la compra de 50 misiles AM39 Exocet para la aviación naval. Cada Exocet costaba 1 millón de dólares, los almirantes pedían por tanto 50 millones $. Se fabricaban en Italia con licencia de la firma francesa Aerospatiale. Calvi respondió sin dificultad. El financiaría sin que quedara huella de la operación en las cuentas del Ambrosiano, se supone que a través de United Trading.
El 29 de septiembre mientras veían la tele en el hotel los Calvi se enteraron de la muerte de JPI, de que lo habían encontrado muerto en la cama. Roberto se quedó de una pieza. Ya había declarado a su mujer Clara que Luciani le parecía muy valiente, abierto al diálogo, pero muy imprudente. En sólo un mes había dejado claro que seguiría su propio plan en el Vaticano. Había mostrado intransigencia lo que significaba que iba a echar a Marcinkus. Pero con un nuevo papa ya no era seguro.
Calvi le había dicho a su mujer que las razones para los problemas financieros del Vaticano procedían del banco de Gotardo, donde estaban escondidas las cuentas de todas las compañías United Trading. El jefe contable del IOR, Pellegrino de Stroble viajó a las oficinas del Gottardo en Lugano para confirmar la posición expuesta de United Trading. Calvi se preguntaba si JPI sabía algo del asunto. Suponía que nada de nada.
Lo que JPI hubiera querido del IOR era echar a Marcinkus, también era seguro que Luciani quería reiniciar la Ostpolitik de de Pablo VI. Pero la apertura hacia Moscú se quedo a medio camino cuando el arzobispo ruso ortodoxo de Leningrado Nikodim de 49 años al que se consideraba agente KGB murió de un infarto de miocardio agudo en la antecámara papal antes de poder hablar con JPI.
Una semana más tarde Luciani encontró encima de su mesa una lista de masones, 121 prelados pertenecían a la franmasonería: Villot, Poletti, Baggio. Fue una gran sorpresa para Luciani que se dirigió a la única persona que le daba confianza, Benelli, arzobispo de Florencia. Benelli le aconsejó prudencia, pensaba que Pecorelli que había sacado la lista estaba "afilando el hacha de otro". Luciani le pidió que fuera su Secretario de Estado. Su regreso a la Curia hubiera supuesto la reconciliación del Vaticano con el bloque comunista y un poco más de flexibilidad con el asunto birth control, dos temas claves para los Conservadores. El 28 de septiembre Luciani informó a Villot de que además de quitar a Marcinkus enviaría a Baggio a Venecia y al Vicario de Roma, Poletti, a Florencia. Finalmente pidió a Villot que dimitiera para sustituirlo por Benelli.
Aunque Luciani no tenía medio de saberlo los 4 prelados que pretendía quitar de en medio eran esenciales para el éxito del OD en la curia, a saber para lograr su tres objetivos de la época:
La Prela
La Canonización
y el control de las finanzas vaticanas.
Estamos en 1978. El matrimonio Calvi acompañados de Giacomo Botta, dir. del departamento extranjero del Ambrosiano viajan a Montevideo. Allí se encuentran con Umberto Ortolani, quien había abierto las puertas del Vaticano a Calvi, había sido nombrado embajador de la extraña y exótica Orden de Malta, con sus sellos, sus matrículas de coche y sus embajadores. Ortolani y uno de sus hijos viajó con los Calvi y Botta a Buenos Aires, donde esperaba Licio Gelli, su esposa Wanda y sus 2 hijos.
En Buenos Aires Calvi negoció con las autoridades argentinas la apertura de una sucursal del Ambrosiano. De hecho Calvi, Gelli y Ortolani invitaron a todos los jefes militares de la marina a una cena. Al final del convite los almirantes preguntaron cómo podrían financiar la compra de 50 misiles AM39 Exocet para la aviación naval. Cada Exocet costaba 1 millón de dólares, los almirantes pedían por tanto 50 millones $. Se fabricaban en Italia con licencia de la firma francesa Aerospatiale. Calvi respondió sin dificultad. El financiaría sin que quedara huella de la operación en las cuentas del Ambrosiano, se supone que a través de United Trading.
El 29 de septiembre mientras veían la tele en el hotel los Calvi se enteraron de la muerte de JPI, de que lo habían encontrado muerto en la cama. Roberto se quedó de una pieza. Ya había declarado a su mujer Clara que Luciani le parecía muy valiente, abierto al diálogo, pero muy imprudente. En sólo un mes había dejado claro que seguiría su propio plan en el Vaticano. Había mostrado intransigencia lo que significaba que iba a echar a Marcinkus. Pero con un nuevo papa ya no era seguro.
Calvi le había dicho a su mujer que las razones para los problemas financieros del Vaticano procedían del banco de Gotardo, donde estaban escondidas las cuentas de todas las compañías United Trading. El jefe contable del IOR, Pellegrino de Stroble viajó a las oficinas del Gottardo en Lugano para confirmar la posición expuesta de United Trading. Calvi se preguntaba si JPI sabía algo del asunto. Suponía que nada de nada.
Lo que JPI hubiera querido del IOR era echar a Marcinkus, también era seguro que Luciani quería reiniciar la Ostpolitik de de Pablo VI. Pero la apertura hacia Moscú se quedo a medio camino cuando el arzobispo ruso ortodoxo de Leningrado Nikodim de 49 años al que se consideraba agente KGB murió de un infarto de miocardio agudo en la antecámara papal antes de poder hablar con JPI.
Una semana más tarde Luciani encontró encima de su mesa una lista de masones, 121 prelados pertenecían a la franmasonería: Villot, Poletti, Baggio. Fue una gran sorpresa para Luciani que se dirigió a la única persona que le daba confianza, Benelli, arzobispo de Florencia. Benelli le aconsejó prudencia, pensaba que Pecorelli que había sacado la lista estaba "afilando el hacha de otro". Luciani le pidió que fuera su Secretario de Estado. Su regreso a la Curia hubiera supuesto la reconciliación del Vaticano con el bloque comunista y un poco más de flexibilidad con el asunto birth control, dos temas claves para los Conservadores. El 28 de septiembre Luciani informó a Villot de que además de quitar a Marcinkus enviaría a Baggio a Venecia y al Vicario de Roma, Poletti, a Florencia. Finalmente pidió a Villot que dimitiera para sustituirlo por Benelli.
Aunque Luciani no tenía medio de saberlo los 4 prelados que pretendía quitar de en medio eran esenciales para el éxito del OD en la curia, a saber para lograr su tres objetivos de la época:
La Prela
La Canonización
y el control de las finanzas vaticanas.
Comentarios
Qué interesante esto, que no sé si está acreditado:
"Benelli le aconsejó prudencia, pensaba que Pecorelli que había sacado la lista estaba "afilando el hacha de otro"
Inevitable pensar en el Opus, visto lo sucedido después. El Opus denunciando masones para ponerse en su lugar.
Hace unos días han sacado una extraña noticia de un atentado frustrado contra el Papa Francisco. Fue en Filadelfia por uno de 17 años. Que se frustró porque su contacto para hacer el supuesto atentado era del FBI, siempre los mismos montajes. En el FBI tiene mano el Opus. El mayor traidor de la historia del FBI era del Opus, Robert Hassen:
https://es.wikipedia.org/wiki/Robert_Hanssen
Son capaces de todo, presumen de audaces. Lo de las banderas falsas es un truco muy viejo. El Papa Benedicto XVI explicó la verdad del terrorismo:
Benedicto XVI: “El terrorismo se ha convertido en una oscura red de complicidades políticas”
DISCURSO DEL SANTO PADRE BENEDICTO XVI
A LOS PARTICIPANTES EN LA 81ª ASAMBLEA GENERAL
DE INTERPOL 9 de noviembre de 2012
https://w2.vatican.va/content/benedict-xvi/es/speeches/2012/november/documents/hf_ben-xvi_spe_20121109_interpol.html
Al Opus le sentó fatal. Y tres días después le respondió con el opusino Fernández Díaz que con jactancia titulo una conferencia: “La gestión del final de ETA”
Tres meses después tuvo que renunciar Benedicto XVI por confesada debilidad para hacer frente a los que usan el nombre de Dios para sus fines de poder, como dijo el miércoles de ceniza posterior a su renuncia.
Al Opus también le ha sentado fatal que los obispos vascos, milagrosa e insólitamente, hayan pedido perdón a las víctimas de la marca ETA en nombre de la Iglesia, en la que parasita el Opus que no pide perdón por nada y se jacta de todo:
“extraordinaria importancia las declaraciones de los tres obispos vascos enla entrevista conjunta que concedieron al diario El Correo , ante el anuncio de desarme de ETA:
“A quienes hayan podido percibir indiferencia, frialdad o cualquier actitud que les haya causado sufrimiento por parte de miembros de la Iglesia quisiéramos pedirles humilde y sinceramente perdón con el compromiso de ponernos a su servicio en todo aquello en que pudiéramos acompañar, ayudar y también en la reparación en lo posible del padecimiento causado tanto por comisión como por omisión”
http://www.elconfidencialdigital.com/seguridad/Cautela-miembros-antiterrorista-desarme-ETA_0_2894110581.html
Ojo, que dicen también “por comisión”. La realidad. Al Opus le ha sentado tan mal, comprensiblemente, que ha dado orden para que ningún medio generalista de esta trascendental noticia y la han cumplido a rajatabla.
Reconocidas terminales del Opus, especialmente José Apezarena en ECD y J.M. Zuloaga en La Razón, se han opuesto estos días al cierre de ETA, llegando a inventarse una escisión en ETA, que sólo conocen ellos, para que continúe la marca terrorista. Como si sin la marca ETA perdieran su poder.
Sus dirigentes efectivos son diabólicos, y son audaces, y están en peligro de extinción. Hay que tener mucho cuidado con ellos. Están envalentonados con el bombardeo de Trump a Siria, que celebran con alborozo y un descaro infame, especialmente desde El País y El Mundo. Quieren guerra, quieren terrorismo. Quizás sólo les frene que si se produce un magnicidio estará bastante claro quien lo ha cometido.
Actualmente la bandera falsa habitual es el yihadismo. No se olvide que el Opus tuvo un yihadista, Eduardo Rozsa Flores, salvaje yihadista y del Opus. Contratado por el opusino Ricardo Estarriol, el de La Clave, para La Vanguardia. Tienen de todo, El diputado del partido etarra Rafael Larreina, opusino. El opusino senador italiano Marcello dell Utri, condenado por asociación mafiosa e investigado por varios atentados terroristas. Esto es el Opus.