SIGUE LA HISTORIA
El 12 DE ABRIL DE 1933, pocas semanas después de la llegada
de Hitler al poder, una filósofa católica alemana nacida judía, Edith Stein,
escribe una carta a Roma pidiendo al Papa Pío XI y a su secretario cardenal
Pacelli, ex nuncio en Alemania y futuro Pío XII que no callen más y denuncien
las primeras persecuciones contra los judíos.
¿Cómo explicar que la Iglesia católica se haga la sorda ante una carta
profética y haya tardado 70 años en sacarla de los archivos? Edith Stein, aún
siendo monja carmelita descalza refugiada en un convento holandés, será
deportada y gaseada en Auschwitz en el verano de 1942.
Edith Stein, muerta en cámara de gas 1942 |
En 1936 un grupo de generales conservadores intenta un golpe
de Estado que fracasa y degenera en guerra civil.
Jose María Escriva vive la guerra civil española como la ha
querido presentar el franquismo, lucha entre católicos y comunistas en los que
veía la encarnación del mal. (De ahí el post Stalin y España)
La Iglesia
apoya la rebelión, curas y obispos bendicen los cañones de los militares
insurrectos dirigidos por Franco.
En 1936, los franquistas ayudados por el compromiso con la
rebelión de falangistas practican en los territorios que van ocupando una feroz
depuración política.
Todos los partidarios del Frente Popular, anarquistas,
masones, librepensadores, intelectuales de izquierdas y ateos son encarcelados,
torturados, fusilados.
“Para salvar a España, declaró Franco, fusilaré a la mitad
de la población si es preciso”. Y de hecho muchos miles de españoles fueron
fusilados en las plazas de toros (Badajoz).
Hubo más de un millón de muertos en la guerra civil y si
durante la guerra Franco fusiló a 200.000 prisioneros, tantos o más rebeldes
serán también fusilados una vez establecido el fin de las hostilidades.
La Iglesia
apoya las ejecuciones y la guerra. En 1937 la aviación alemana destruye
Guernica. Frente a la masacre algunos católicos dudan de la santidad de la
causa nacionalista.
La Iglesia
ayuda a Franco: justifica la guerra, la jerarquía católica toma posición
oficial frente a las ejecuciones de prisioneros, una carta firmada por dos
cardenales, 6 arzobispos, 35 obispos y 5 vicarios generales (casi todo el
episcopado español) es enviada a todos los obispos del mundo. Definen la guerra
civil como cruzada.
Los firmantes se alegran de las ejecuciones de los
prisioneros porque en el momento de la ejecución el ejecutado se reconcilia con
Dios. Monseñor Díaz Gómara obispo de Cartagena dirá “benditos sean los cañones
si en las brechas que abren florece el evangelio.”
En 1938 tiene lugar la “Noche de los cristales rotos”, los
SS y SA vestidos de civil atacan sinagogas y comercios pertenecientes a los
judíos.
La población alemana está aterrorizada. El obispo de
Friburgo, monseñor Gröber declara en respuesta a las preguntas sobre las leyes
raciales y los progroms: “No se puede negar a nadie el derecho a salvaguardar
la pureza de su raza y de tomar las medidas necesarias para conseguirla.”
En 1939 el periódico La Croix
publica un artículo del sacerdote Thellier: “miles y miles de combatientes (…)
dolorosa como es su muerte, les trae por la misericordia divina un bien
superior a la vida (…). Sin la guerra, muchos muertos hubieran llevado una
existencia moralmente insignificante, religiosamente casi nula, destinada a
terminarse en un fin mediocre, quizás malo que les hubiera llevado a un futuro
dudoso.”
En la España
de 1939 la cruzada franquista venció el comunismo y la Iglesia está en el campo
vencedor, José María Escrivá entra en Madrid con los primeros camiones del
ejército de Franco, el 28 de marzo. Tiene dos objetivos: llegar a Roma y
controlar la universidad.
El terreno es propicio. Las heridas de la guerra civil
siguen abiertas. La universidad esquilmada no es un bastión frente a la
dictadura, muchos intelectuales simpatizaban con los republicanos.
Según la predicación del “Opus Dei”, cualquiera, aunque no
tenga vocación de cura o monja, puede ser santo. Un santo panadero, un santo
peluquero, un santo empresario, una santa limpiadora.
No es necesario ordenarse sacerdote ni irse a un convento.
En la España
ultraclerical del momento el discuso escrivariano resulta radicalmente nuevo.
En 1939 Eugenio Pacelli es elevado al trono de san Pedro con
el nombre de Pío XII. Felicita a Franco por la victoria católica lograda en
España.
En 1941 llega el tiempo de las persecuciones para OD
procedentes de los jesuitas que dirigen algunas importantes congregaciones y
para quienes hacerse santo en el mundo profano es pura locura.
El Opus pasa por una secta herética tanto más perversa
cuanto que a los ejercicios de caridad, mortificaciones y actos piadosos, añade
el celibato y la castidad. Camino es objeto de quemas, siendo hoy un best
seller mundial, dice, de la espiritualidad.
Para huir de los jesuitas, Jose María Escrivá se esconde y
añade de Balaguer al apellido paterno.
Toda su vida guardara
rencor a los hijos de San Ignacio.
Maria del Carmen Tapia, directora de la sección femenina del
Opus Dei en Venezuela, recuerda haber oído de la boca de José María Escrivá
esta declaración: “Más vale morir sin los últimos sacramentos que recibirlos de
manos de un jesuita.”
La desconfianza del fundador hacia todos los que no se
dejaban influir por él era profunda y vasta:
“Como no dejo de advertiros, el mal viene de dentro (de la Iglesia) y de muy arriba.
La podedumbre es auténtica y palpable, hasta el punto de que el cuerpo místico
de Cristo más parece un cadáver en descomposición, que hiede…”
“Pedid perdón, hijos míos, por esos actos despreciables
permitidos por la Iglesia
y que procedentes de arriba, corrompen las almas casi desde la infancia”
(Crónica).
Decía a “sus hijos”: “Tenéis la libertad para confesaros con
quien queráis pero sería una locura confiar en manos extrañas, que quizás se
avergüenzan de haber sido consagradas, No podéis confiar en ellos.”
Hubo depuración y represión en la España franquista. Lanzado
a la conquista de las cátedras universitarias y manipulando a los responsables,
OD obtendrá casi 40% de los puestos.
En 1943 funda la Sociedad Sacerdotal
de la Santa Cruz
que hará posible la ordenación de sacerdotes del Opus Dei.
Lo mismo que Pío XII, José María EdB minimizó el horror del
nazismo y la gravedad del holocausto, el nazismo fue una defensa frente al
comunismo.
El Monde Diplomatique cita una de sus afirmaciones: “El
cristianismo fue salvado del comunismo gracias a la llegada al poder del
general Franco con el apoyo del canciller Hitler, el cual, siendo anti eslavo,
era anticomunista.”
El papa Pío XII tomó partido por los alemanes ocupantes de
Francia y contra la resistencia: el 12 de marzo de 1944, para festejar su
llegada al papado, lanza una llamada contra la insurrección popular frente a
los alemanes.
Aún condenando la ideología nazi, los principales
responsables de la iglesia católica apoyaron masivamente los regímenes
fascistas. (Fue más grave todavía, ver Annie La Croix Riz)
El hundimiento del III Reich debería de haberse traducido no
sólo por la depuración de los políticos europeos, también en la iglesia romana,
pero nada de eso pasó.
Los eclesiásticos pro nazis manipularon la ilusión religiosa
hasta el punto de que todo cuestionamiento de su responsabilidad en los crímenes
contra la humanidad apareciera como una blasfemia.
Hicieron lo posible por ayudar a escapar hacia América
Latina a los jefes fascistas, a fin que de que no dieran cuentas ante la
justicia y para que los procedimientos judiciales no pusieran de manifiesto la
propia culpabilidad eclesial.
En este contexto, OD hizo todo lo posible para borrar las
huellas de la historia y favorecer la reconciliación europea.
¿Será casualidad si vemos a Paul Touvier, miliciano del
régimen de Pétain cerca de Niza en un lugar propiedad del Opus Dei?
El certificado de resistente del que se valió Maurice Papon
el 25 de octubre de 1944 lo firmó Claude Arnould, alias coronel Olivier, jefe
de la red de información “Jade Amicol”, tratado por el servicio de inteligencia
británico.
Arnould fue antes de la guerra agente de la
Santa Sede y del OD encargado de informar a
Pío XII sobre las cuestiones de Extremo
Oriente.
Arnould firmó los certificados de Paul Baudoin, ex
presidente ministro de asuntos exteriores de Pétain, confundidor del OD en
Francia, de monseñor Felletin, del cardenal Suhart y de René Bousquet (proceso
instruido conjuntamente con el de Papon).
Un caso sorprendente fue el de Robert Schuman. En septiembre
de 1944 este político cristiano demócrata, a la edad de 58 años, aparece como
consejero efímero del mariscal de Lattre de Tassigny en el momento de la
liberación de Alsacia-Lorena.
Elegido diputado en 1945, ministro de Hacienda en 1946,
presidente del Consejo en 1947, ministro de Exteriores en 1948. En 1949 instala
la sede de la OTAN
en París.
Lanza la idea de la Europa comunitaria en 1950 (CECA y CED),
participa activamente en el gobierno de Antoine Pinay.
Cuando llega de Gaulle lo mantiene al margen de los asuntos
internos franceses y fue el elegido el primer presidente del Parlamento
Europeo. Aquejado de senilidad, muere en 1963 y ha quedado en la memoria como
el “padre de Europa”. Se sabía que era una persona profundamente religiosa,
acudía a misa a diario y practicaba dolorosas mortificaciones. Hoy,con ocasión
de su proceso de beatificación nos enteramos de que era miembro del Opus Dei.
Comentarios
A los jesuitas los expulso la República ( Como hoy deberían expulsar al Opus, por antiespañoles) y los hizo volver ese Framco tabn opusino ynacional católico que su padre era Masón
A los Rojos los depuró el Stalinismo ( al menos a todo los que estorbaban el triubfo del alzamiento que también apoyó Tarancon, es que luego decidió aopyra a los nacionalismos etarras antiespañoles, como Setien, como Uriarte, con el silencio del resto de la jeraquía episcopal católica.
Y los anarquistas fueron los que quemaron el Monasterio de Sijena para que los obispos catalanes pudieran construir el supremacismo burgués catalán rellenando el museo de Arte de Cataluña ( Hoy de " nacional de " Catalunya" como manda el orden francoaleman) com piezas de Arte saqueadas en otras regiones de España
Claro que el monasterio medieval de Sijena era de monjas sanjuanistas de la orden de Malta ( que no es española sino romana pero si muy opusina últimamente)
Habla de estos.
Paul Louis Arthur Baudouin (gobierno de Petain) 1946 alors qu'il cherche à passer en Espagne
https://fr.wikipedia.org/wiki/Paul_Baudouin
Claude Arnould, espía multiple:
https://fr.wikipedia.org/wiki/Claude_Arnould
Que habría facilitado papeles a Maurice Papon. Este es un caso célebre de colaborador de los nazis al que con el tiempo descubren y condenan. Le pillan en 1981 cuando está en el gobierno del opusino Raymond Barre.
https://es.wikipedia.org/wiki/Maurice_Papon
Opus y poder francés, un asunto interesantísimo a investigar. Ahí hay mucha tela.