PROCESO CANÓNICO
Muchas gracias por el lazo al que llaman filósofo navarro a pesar de su apellido irish y su nacimiento en la orilla derecha del Nervión, ¿Arenas o Neguri? De manera que en el ajo de la autodeterminación catalana, normal, nunca rompió con gran Hermano,
sigue en sus fregados, de hombre moderado y templador de gaitas. Qué tropa, borreguismo el de todos los que de intelectuales ejercen en España. Qué afán de pertenecer a la tribu y seguir en el encuadre. No le pasa sólo a éste. A otros admirados por su obra literaria y filosófica, no tanto por su falta de valor y su nula independencia.
El uso torticero del lenguaje, opusino uso, unionista que procede precisamente del conflicto de Irlanda del Norte, aplicado aquí no viene a cuento.
No se le acaban las penas al cardenal australiano. Pell de 77 años podría enfrentar procedimiento canónico que lo expulsara del estado clerical. Lo explicó el portavoz vaticano Gisotti este miércoles, la congregación para la doctrina de la Fe inicia trámites exigidos por el derecho canónico al respecto.
Los jueces eclesiásticos podrían utilizar las pruebas que lo incriminaron ante el tribunal civil. Abusó de un adolescente de 13 años y molestó a otro, por ello se enfrenta a la condena que pudiera ser de hasta 50 años, desde el miércoles está detenido. A mediados de marzo se sabrá el veredicto y la defensa no deja de proclamar inocencia además de que recurrirá. Por el momento es el más alto dignatario católico directamente afectado por el escándalo.
Por otra parte el arzobispo Coleridge de Brisbane, se enfrenta a otro procedimiento por no escuchar a una mujer en 2006 cuando era obispo en Canberra que quiso quejarse de abusos, no se sabe contra quien. La diócesis ha declarado que el arzobispo investigó las acusaciones y las rebatió completamente y por eso la mujer decidió hacerlas públicas.
Coleridge es el presidente de la Conferencia Episcopal Australiana que tras la reciente cumbre en Roma habló de "revolución copernicana" en el asunto abusos clericales.
Y ahora que las cañas se vuelven lanzas a estos dos obispos de primera plana, entre Roma y Sidney, me he acordado de aquel australiano al que echaron del episcopado por haber sugerido algo sobre la Ordenación de mujeres o similar. Se tiene que estar riendo a mandíbula batiente, a buen seguro que estos dos peces gordos hoy en entredicho algo tuvieron que ver en su destitución por tamaña futilidad. Se demuestran muchas e interesantes conclusiones sobre las hiper ortodoxias. Obispo Morris, por si alguien quiere mirar el tenor de las acusaciones que se le imputaban en 2011.
sigue en sus fregados, de hombre moderado y templador de gaitas. Qué tropa, borreguismo el de todos los que de intelectuales ejercen en España. Qué afán de pertenecer a la tribu y seguir en el encuadre. No le pasa sólo a éste. A otros admirados por su obra literaria y filosófica, no tanto por su falta de valor y su nula independencia.
El uso torticero del lenguaje, opusino uso, unionista que procede precisamente del conflicto de Irlanda del Norte, aplicado aquí no viene a cuento.
No se le acaban las penas al cardenal australiano. Pell de 77 años podría enfrentar procedimiento canónico que lo expulsara del estado clerical. Lo explicó el portavoz vaticano Gisotti este miércoles, la congregación para la doctrina de la Fe inicia trámites exigidos por el derecho canónico al respecto.
Los jueces eclesiásticos podrían utilizar las pruebas que lo incriminaron ante el tribunal civil. Abusó de un adolescente de 13 años y molestó a otro, por ello se enfrenta a la condena que pudiera ser de hasta 50 años, desde el miércoles está detenido. A mediados de marzo se sabrá el veredicto y la defensa no deja de proclamar inocencia además de que recurrirá. Por el momento es el más alto dignatario católico directamente afectado por el escándalo.
Por otra parte el arzobispo Coleridge de Brisbane, se enfrenta a otro procedimiento por no escuchar a una mujer en 2006 cuando era obispo en Canberra que quiso quejarse de abusos, no se sabe contra quien. La diócesis ha declarado que el arzobispo investigó las acusaciones y las rebatió completamente y por eso la mujer decidió hacerlas públicas.
Coleridge es el presidente de la Conferencia Episcopal Australiana que tras la reciente cumbre en Roma habló de "revolución copernicana" en el asunto abusos clericales.
Y ahora que las cañas se vuelven lanzas a estos dos obispos de primera plana, entre Roma y Sidney, me he acordado de aquel australiano al que echaron del episcopado por haber sugerido algo sobre la Ordenación de mujeres o similar. Se tiene que estar riendo a mandíbula batiente, a buen seguro que estos dos peces gordos hoy en entredicho algo tuvieron que ver en su destitución por tamaña futilidad. Se demuestran muchas e interesantes conclusiones sobre las hiper ortodoxias. Obispo Morris, por si alguien quiere mirar el tenor de las acusaciones que se le imputaban en 2011.
Comentarios
Por lo que se ve de alguna terminal opusina en España es muy posible que sea cosa de ellos, tanto como venganza por ser el encargado de limpiar las finanzas del vaticano, siempre controladas por el Opus, como, y sobre todo, modo de atacar al Papa y sabotear la cumbre anti abusos. Con este precedente de salvaje y notorio abuso judicial, y por lo que dejan entrever las terminales opusinas, es probable que vayan ahora directamente a por el Papa. No sería raro que tengan algún juez ad hoc en Argentina, u otro sitio, dispuesto a procesar al Papa. Tienen buen surtido de jueces prevaricadores. En Argentina acaban de condenar a un juez por prevaricación en el caso Amia, por procesar a inocentes. Tienen a más de uno.
Así es:
¿Cómo es posible que en estos países tan " supuestamente libres y transparentes” como Australia se pueden hacer estas cositas?:
“Ha sido difícil informar sobre las vicisitudes de este juicio, ya que las autoridades judiciales australianas aplicaron una orden mordaza que impedía toda comunicación sobre el mismo”
https://infovaticana.com/2019/02/26/el-doble-juicio-del-cardenal-pell/