ASPECTOS FINANCIEROS

 Personaje inquietante y fundamental, banquero austericida, salido de colegio SJ y adulador y adulado por el Vaticano y el movimiento Comunión y Liberación, tan parecido al nuestro, pero en versión italiana. Más relajado, aunque no tanto. Siempre católicos cerca de los poderosos. 

El año 2020 marca el comienzo de una nueva era. El mundo del futuro ya está aquí.

El totalitarismo financiero, bien asentado gracias al Covid, el terrorismo y la locura de los bancos centrales, parece sin embargo seguir buscando a los líderes del mañana para vendernos este nuevo mundo. Durante los últimos días, el establecimiento y sus revistas especializadas han trabajado duro para promover a un individuo que se ha jubilado recientemente: un tal Mario Draghi (exdirector del BCE de 2011 a 2019).

Este tecnócrata-fantasma se nos presenta a los europeos como el hombre con el que habrá que contar en las próximas semanas. El "salvador del euro" podría protegernos de las terribles consecuencias de la actual crisis de Covid. Es cierto que en medio de la crisis sanitario-financiera, muchos miembros del establishment han mostrado sus límites, sobre todo a través de comportamientos que equivalen al pánico, o al menos a la incompetencia flagrante. Con Macron, Castex, Véran, Lemaire, Sánchez, Iglesias, Bonilla, Francia y España están acostumbradas, la actitud de espera e improvisación de los líderes  europeos  no parece agradar a los que están en la planta alta del edificio globalista.

De hecho, los sofocos delirantes, seguidos de movimientos repentinos y sostenella no enmendalla son cada vez más habituales en el establishment. Sin embargo, la serenidad de los planes covidianos no se ve amenazada dada la falta de reacción del pueblo. Christine Lagarde, sin embargo, no dudó en instar a los países europeos a poner en marcha el plan de recuperación europeo con carácter de urgencia.

El ejemplo de Lagarde es indicativo de la existencia de tensiones dentro de la élite. El período excepcional provocado deliberadamente por el Coronavirus es un momento importante para nuestras élites y algunos de nuestros líderes parecen estar realmente bajo presión. La pifia de Lagarde a mediados de marzo también fue reveladora, por lo que la exdirectora del FMI había provocado la caída (a pesar de sí misma) de las bolsas europeas al declarar que la misión del BCE no era "reducir los diferenciales de las tasas de interés ”y esto había sido apreciado moderadamente por los pensadores del euro-globalismo. Algunos expertos, incluso dentro del BCE, no dudaron en cuestionar las habilidades de la exministra de Economía de Nicolas Sarkozy. Está claro que el estilo de sonrisa brillante y confiado de Lagarde contrasta fuertemente con la personalidad humilde y trabajadora de su predecesor Mario Draghi. 

 

La personalidad de Draghi conocido como "jesuita misterioso", se opone a la comunicación  directa de la ex "jefa" del FMI, que brilla más por el postureo que por sus conocimientos precisos del funcionamiento de la política monetaria.

En realidad, si Lagarde funge como vendedora de éxito, Draghi pasa por un buen técnico. De hecho, varios especialistas del mundo financiero dicen: "Mario es un gran experto en los mercados, y ella (Lagarde) no lo es". Natacha Valla, ex Goldman Sachs (como Mario), pasó por la institución monetaria en Frankfurt antes de ser nombrada decana de la Escuela de Gestión e Innovación de Sciences Politiques, confirma: “La gran fuerza de Draghi es que es economista y banquero central. Está muy seguro de su diagnóstico. Tiene el calibre intelectual y el coraje para pasar de la teoría a la acción ". Pero  Draghi no es solo un técnico, también es un político. Fue él quien durante una década (mucho más que Sarkozy, Hollande, Macron e incluso Merkel) influyó profundamente en las políticas de la zona euro.


Un ex jesuita de la hiperclase transnacional

Sin embargo, confiesa a todo el que quiera escucharlo, nuestro Super Mario tiene horror a la política, lo que no le impide seguir dialogando frecuentemente con ciertos jefes de Estado, en particular con Angela Merkel y Emmanuel Macron: los dos grandes campeones de la oligarquía financiera angloamericana en Europa continental. Es obvio que el ex jesuita prefiere la política "real", la que se hace y se elabora en las altas esferas por brillantes caballeros tecnócratas. La que no necesita estrechar la mano de las clases bajas,la que no rinde cuentas a nadie, excepto a los amos que dictan las principales orientaciones ...

Draghi prefiere mil veces el pequeño mundo de la hiperclase transnacional que le permite almorzar y trabajar con personas del “mismo mundo”, sean belgas como Peter Praet (ex economista jefe del BCE) y Frank Smets, o incluso alemanes. como Roland Straub (ex FMI y ahora asesor de Christine Lagarde)o franceses como Arnaud Marès (economista jefe Europa de Citigroup, ex del tesoro británico y del banco central europeo durante la creación del euro), Alain Minc o incluso Benoît Coeuré, ex miembro de la junta directiva del BCE, hoy en el BRI (Banco de Pagos Internacionales) ...

Además, en esta mezcla de personajes con carreras híbridas entre los sectores público / privado propio del establishment apátrida, Mario Draghi aún disfruta (en su calidad de "gran benefactor" de Italia) de una oficina en el Banco de Italia, Roma y otro en la sede del BCE en Frankfurt. Aunque nada lo justifique. Pero el dinero público es tan atrayente, sería tonto prescindir de él ... Obviamente, tener una oficina en una de las ciudades más bellas del mundo (Roma no Frankfurt) facilita el encuentro con tus colegas. Porque aunque jubiladdo del BCE hace más de un año, Mario sigue muy activo, en particular recibiendo y conversando con sus ex compañeros de Jackson Hole o del Club de los Treinta.

Además, entre los contactos privilegiados de Super Mario, encontramos curiosamente a Larry Fink, el fundador de BlackRock, y a Lawrence Summers, el exsecretario del Tesoro de Bill Clinton. Sin olvidar a los amigos históricos del MIT: como Stanley Fischer, el banquero central israelí-estadounidense, o Olivier Blanchard, ex economista jefe del Fondo Monetario Internacional ... Pero Mario Draghi no solo invita, también es invitado a varias reuniones y encuentros, es miembro desde hace mucho del Grupo Bilderberg, un "grupo de expertos" donde conoció a Emmanuel Macron, Christine Lagarde y a Benoît Coeuré.

Como buen italiano  Mario Draghi no se olvida de la Iglesia, o más bien del Vaticano. De hecho, desde el verano, el exdirector del BCE ha sido nombrado por el Papa Francisco (también jesuita) miembro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales, a propuesta de los demás miembros. Sí sí, no es una broma, nuestro querido Mario Draghi, el hombre que inventó el concepto de "impresión ilimitada de dinero a cualquier precio" participa en reflexiones sobre la evolución de la doctrina social de la Iglesia, dentro de este "think tank" vaticano, creado en 1994 por Juan Pablo II. La calificación de Temple Merchant no podría ser más apropiada para evocar el caso Draghi. Pero es cierto que con este Papa, los católicos ciertamente no han acabado de sorprenderse ... Como anécdota, también figura en este comité de reflexión personalidades (no muy católicas) como el Premio Nobel de economía estadounidense Joseph Stiglitz (que sin embargo tiene el mérito de ser un opositor al euro), prueba de que el ecumenismo frenético (sincretismo globalista) de Francisco, por falta de coherencia, se ha convertido en la columna vertebral del Vaticano.

Un relevo importante para el euroglobalismo

Pero  ¿ qué puede impulsar a la hiperclase a presentar a un insípido banquero italiano de 73 años como un potencial solucionador de la crisis? Porque casi un año después de dejar el BCE, este romano de 73 años no parece ser el más atractivo de los campeones. ¿Bastaría su pobre condición de "salvador del Euro" para colocarlo como el nuevo líder de una Unión Europea en crisis? Por ahora, es suficiente para que los medios oficiales declaren que "sus intervenciones son tan raras como notables ".

Un poco como Dominique Strauss Kahn de principios de la década de 2010, menos el alcoholismo, se nos dice que su experiencia es fundamental. Los observadores de la política italiana ya lo presentan como un candidato natural para suceder a Sergio Mattarella como presidente de la República Italiana para 2022. De hecho, consideran que el hombre que salvó a la eurozona de la implosión en 2012 , está mejor equipado para contribuir a la estrategia europea de “salida de crisis” post-covid. Así, después de Monti, ex de Goldman Sachs / Comisión Europea, entonces presidente del Consejo de Ministros de 2011 a 2013, la oligarquía todavía parece querer imponer a Draghi en la presidencia de la república italiana. El primer Mario ya había ayudado a adoptar drásticas medidas de austeridad en la península a principios de la década de 2010. Además, el nombre de Draghi incluso se menciona en el Palazzo Chigi (el gobierno italiano), y no en el Quirinal (palacio presidencial). a la cabeza de un gobierno de unidad nacional para reemplazar al Traidor Conte, si Italia se rebela ante el colapso planeado, lo cual no es imposible que pase.

Pero la pregunta surge en estos términos: ¿podría el establecimiento que carece de un hombre de confianza competente imponer al hombre que  logró superar la crisis de la eurozona a gusto de la  hiperclase a la vez que traicionó a su pueblo (Italia) mientras esclavizaba a los “primos” griegos? Como buen soldadito de la oligarquía, ¿sacará Draghi una vez más a la Unión Europea / Euro del punto muerto en el que parece encontrarse desde la real-falsa pandemia ?

El ex residente del MIT en cualquier caso tiene todas las características para aplicar al pie de la letra, el programa euro-globalista en la perspectiva del Gran Reset (2021-2022). Incluso podría crearse un nuevo puesto a medida a nivel europeo, como el de Ministro de Economía y Finanzas de Europa o incluso el de director de una nueva Agencia Europea de Deuda. Ahora que los estados miembros han acordado a través del acuerdo Macron-Merkel encadenar a todos en torno a una deuda común (que será pagada por los países latinos), con el objetivo de salvar el euro , necesitan un gran líder para dirigir el barco. También es posible que siga el ejemplo de su amigo Larry Summers, (citado anteriormente) quien había sido nombrado "Comisionado para la recuperación económica" por Barack Obama, tras la crisis económica de 2008, pero  en versión europea ...

Nada es imposible, porque no olvidemos que durante su mandato, Draghi luchó duramente a favor de la Unión Bancaria y el creciente desarrollo de las instituciones paneuropeas como lo prescribió durante años recomendaba Jacques Attali. De hecho, su amigo del Club de los 30, el premio Nobel de Economía, Paul Krugman, dijo de Mario Draghi cuando dejó el BCE en 2019 que era "el mejor banquero central de los tiempos modernos". Por lo tanto, Super Mario tiene "todos los boletos" por varias razones ...


Salvador del euro y bombero pirómano

En primer lugar Draghi es apreciado porque es un hombre de redes, pero esa no es su cualidad esencial. Sobre todo, como señaló Valla, es un animal de sangre fría que no dudó en actuar durante la crisis post-subprime. En 2011 fue quien impuso claramente políticas de austeridad mientras explotaba las deudas de los estados europeos. Su expresión "Cueste lo que cueste" para salvar el euro, desafiando la prosperidad de las personas que sufrieron las consecuencias de sus decisiones, le granjea la admiración de la hiperclase. Muchos miembros del establishment le están agradecidos y todavía ven "como un milagro su capacidad para transferir una parte significativa de la deuda pública de Italia al balance del Banco Central Europeo, mientras salva a Angela Merkel". "

De hecho, su famoso “cueste lo que cueste” del 26 de julio de 2012 será recordado ya que esta fórmula habría detenido (según la leyenda) la especulación contra los estados miembros más débiles de la zona euro. E incluso si la realidad es bastante diferente (la nefasta acción de Goldman Sachs realmente se detuvo antes de su declaración), Mario Draghi ha adquirido la reputación de hombre capaz para la oligarquía financiera al salvar la integridad de esta ineficiente zona monetaria por su "cueste lo que cueste". Porque, a pesar del legítimo enfado del pueblo, el capitán Mario Draghi se aferró a su política ultra-acomodaticia (inyección de liquidez, tipos de interés más bajos, compras masivas de activos financieros, etc.) asumiendo "los esfuerzos" que exigió a las poblaciones (asesinato económico de los griegos, la amputación de los italianos, la sedación de españoles y portugueses, y el sometimiento de los franceses a una dieta estricta). Es obvio que nuestro Mario tiene un la piel dura y la sangre fría.

Si para distinguir el bien del mal, basta leer los escritos de Bernard-Henry Lévy-Jacques Attali y adoptar posiciones contrarias, lo mismo ocurre cuando Emmanuel Macron elogia la acción de una personalidad. En Twitter, el presidente no regateó los cumplidos cuando "Super Mario" se despidió de la institución monetaria europea. “Mario Draghi, al frente del Banco Central Europeo, has llevado muy alto el sueño europeo. Eres el digno heredero de los padres fundadores de Europa. Salvaste a Europa del hundimiento, aseguraste y fortaleciste la protección de Europa y sus ciudadanos,  tuiteó un adulador Macron en octubre de 2019.

Sin embargo, quienquiera que se presente como el "salvador" es en realidad el principal responsable de la situación actual en Europa. El sacrificio de varias generaciones que están haciendo nuestros gobernantes y la continua destrucción de las riquezas de los pueblos de Europa son en gran parte consecuencia de la política monetaria de Mario Draghi.

De hecho, la política complaciente de Super Mario con intereses bajos, incluso negativos, ha perpetuado un sistema moribundo, que si se hubiera quebrado, habría permitido a los países de Europa retomar sus monedas nacionales y verse mejor armados frente a la actual crisis. La acción del BCE de la era Draghi (2011-2019) no ayudó a enderezar la inflación y, sobre todo, no apoyó en absoluto la demanda empresarial y la inversión, ya que estas inyecciones de liquidez se dirigieron esencialmente a sectores parasitarios y a implementar las ganancias de los círculos financieros. El dinero no ha ido al mundo productivo (industria, infraestructura, investigación, etc.). Europa, Francia e Italia en particular, incluso han acelerado su desindustrialización masiva. La repetida “flexibilización cuantitativa” acaba de provocar el auge del sector inmobiliario y ha ampliado las desigualdades entre los más pobres y los más ricos.

Son pocos los personajes como el pequeño Alain Minc (portavoz de los hipernómadas) que se atreven a decir con tranquilidad que "Su palabra [la de Draghi] cuenta más que nunca en un momento de cambio de pensamiento económico en el que entramos en un universo muy difícil de predecir ”. Así que el sistema no tiene vergüenza en vendernos a Draghi como un bombero después de ser el mayor pirómano de dinero de la última década. 

El 18 de agosto de 2020 en Rimini, durante la gran reunión política anual del (nuevo) mundo católico italiano organizada por Comunione e Liberazione, Mario Draghi incluso se atrevió a hacer una declaración que fue ampliamente compartida por el mundo político italiano y por los observadores financieros internacionales.
 

Draghi se tomó la libertad de emitir una severa advertencia sobre los límites del dinero mágico y la responsabilidad histórica de los gobiernos frente a las generaciones futuras ... Como dijo Michel Audiard, famoso escritor de diálogos: “Los idiotas se atreven a todo. Por eso los reconocemos."

 

Superemos el gratuito placer del insulto, podríamos dudar de las capacidades cognitivas de Mario Draghi si no supiéramos que en realidad, el exbanquero central es un verdadero tiburón y que el cálculo político es parte integral mde su naturaleza. Durante esta conferencia, el hombre de “Cueste lo que cueste” de 2012 explicó con serenidad qué era “buena deuda” (inversión en capital humano que hace crecer la economía) y a diferencia de “ deudas incobrables ”(improductivo). Luego pidió a los políticos (en el lugar) que prioricen el uso de fondos del Plan Europeo de Recuperación para la investigación y la educación.

Así, según un periódico especializado como Les Echos, esta salida de Draghi en Rimini, lo habría devuelto al centro de atención. Sin embargo, no es seguro que el "Conde Draghila" desee dejar las comodidades de la oscuridad, quien ya ha hecho tanto por el establecimiento.

El lado oscuro de Super Mario: Man of the City antes de ser Goldman Sachs

Como ocurre a menudo en la clase media alta mezclada con las antiguas aristocracias europeas, Mario Draghi cultiva efectivamente la discreción. De hecho, el ex alumno de los jesuitas protege su intimidad y es una figura mediática a pesar de los altos puestos que ocupó.

Sin embargo, hay algunas cosas interesantes sobre su vida privada que pueden ayudarnos a aprender más sobre el personaje. Sabemos que el banquero lleva casado más de cuarenta y cinco años con una tal Serena Cappello.  Su esposa es de hecho una descendiente lejana de Bianca Cappello, segunda esposa del tiránico e impopular Gran Duque de Toscana : Francisco I de Médicis (padre de la Reina de Francia, María y esposa de Enrique IV). Bianca Capello y Francisco I de Medici (hijo de Como de Medicis) acabaron envenenados con arsénico debido a las intrigas de poder inherentes a la familia más famosa de banqueros florentinos. Es interesante ver que el nombre de Draghi está relacionado de alguna manera con el nombre de Médici. En cuanto a sus antepasados, el padre de Mario ya era un importante banquero y formaba parte de la clase media alta italiana.

Por tanto, podemos ver que por su esposa y su propia filiación, Mario siempre estuvo íntimamente ligado al mundo de las finanzas. Es un hijo del serrallo. Además, sus descendientes también formarán parte de esta cultura familiar. Su hija Federica, licenciada en bioquímica, no se aleja demasiado del entorno natal ya que trabaja para Genextra, empresa italiana especializada en biotecnología (un sector con futuro) fundada por el financiero Francesco Micheli. En cuanto a su hijo Giacomo trabajó durante mucho tiempo en Wall Street como trader de tipos de interés (cuando su padre era jefe del BCE). Sin embargo, después de varios años con el gran banco de inversión estadounidense Morgan Stanley,  entró en un fondo de inversión de Londres, más conocido como Hedge Fund, con sede en la City: LMR Partners. El hijo trabaja así en la "empresa matriz" a la que su padre sirvió pero de forma indirecta.

De hecho, Mario Draghi antes de ser el hombre de Goldman Sachs o del Banco Central Europeo fue el gran artífice del programa de “privatizaciones salvajes” italianas (IRI, Telecom, Comit, ENI, Enel ...), iniciado en a bordo del yate real Britannia propiedad de la reina Isabel. A  principios de los noventa en las aguas del puerto de Civitavecchia, recibió las instrucciones de "sus amos" sobre la aplicación de la desregulación muy de moda en aquel momento. Cuando era director del Tesoro italiano, no dudó en vender los buques insignia económicos de Italia a bajo precio a los "vampiros" de la City de Londres. Todavía se le apoda "Mister Britannia" en Italia por cumplir servilmente las órdenes de los banqueros de la City cuando no tenía porqué haberlo hecho.

Oligarquía, pirámide y dragón

 

La puerta que originalmente servía para regular el comercio, simbolizaba el poder de los empresarios de la City de Londres.

 

 Una oligarquía de vampiros montados en un dragón.

Añádanse los tres años en Goldman Sachs, donde respaldó los trucos contables orquestados por el banco que permitieron que Grecia ingresara en la moneda única, el rescate a cualquier precio del euro, luego la esclavitud de los griegos y la destrucción de las economías de la Europa continental. ¡Super Mario ya tiene un gran historial en su haber!

Por todo ello podría ser Campeón de Hiperclase en los próximos meses. Bajo cualquier condición, parece que el Conde Draghila, como lo han apodado los periódicos alemanes, hará el trabajo. ¡Este tecnócrata que vampiriza nuestras cuentas bancarias! Como titulaba el "Bild Zeitung", unas semanas antes de su salida del Banco Central de Frankfurt, bien podría volver a liquidar lo que queda de riqueza de los pueblos europeos.

Porque lo cierto es que Draghi por sangre fría, no dudará en llevarse lo que queda de energía vital de la Europa continental en el proceso del Gran Reset promovido por el Foro Económico mundial de Davos. El técnico alquimista no tendrá piedad en seguir perpetuando la casta de aquellos a quienes representa: los usureros transnacionales.

Además, Draghi, como su nombre indica, no es solo un vampiro: es sobre todo un Dragón, que tiene (y tuvo) la misión principal de aniquilar políticamente la vieja Europa (manteniendo el Euro). En realidad, la “estatua” inamovible de Draghi vela por los intereses de sus amos en la City de Londres, como lo hizo en su tiempo el Dragón de Temple Bar en Londres. De hecho, desde la Edad Media hasta el período victoriano, una puerta monumental encarnó el poder de la corporación de la City de Londres y marcó su territorio. Esta puerta, que originalmente se utilizó para regular el comercio, había simbolizado con el tiempo el poder de los empresarios de la City de Londres.

 

La puerta de la foto que originalmente servía para regular el comercio, simbolizaba el poder de los empresarios de la City de Londres.

Hoy en día reducida a una simple “estatua de dragón”, atracción turística londinense, sigue siendo útil ya que el monarca británico cuando desea ir a la City de Londres, debe hacer una parada imperiosa frente a este Dragón del Temple Bar, (obstáculo que materializa la antigua sede de la Orden de los Templarios) y esperar la autorización del Lord Mayor para recibir las llaves de la Ciudad… Parece pues que la hiperclase se encuentra una vez más “su Dragón”, en el nadie de Mario Draghi, para protegerla y servir sus intereses en Europa ...

Finalmente, incluso si un Mario Dragón demasiado cansado no regresa para devastar nuestras tierras ya muy quemadas, sus amos vampiros y lobos encontrarán otra forma de desangrarnos ...

Marc Gabriel Draghi

 

Franck Pengam

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