SORDOS. OD A LA CONQUISTA DEL PODER
Me señalan que no me pierda este documental sobre los niños abusados por curas en Estados Unidos
la reparación por parte de la iglesia les ha pillado jubilados.
Juan Pablo II, el santo del Opus Dei no movió un dedo ante las quejas que le fueron presentadas en su momento. Una santidad que pretende tapar numerosos crímenes contra seres inocentes. No tienen piedad ni perdón, sólo piensan en prestigio, poder, gente, dinero, propaganda...apariencias.
¿El bien de los fieles? la fe de la gente sencilla, una excusa que ni pintada para aprovecharse y beneficiarse de ella. No se puede cometer peor delito. El escándalo y la rueda de molino se comprende. En este caso "niños sordos", toma ya, los que no hablan, qué fuerte...y los que no se pueden defender.
UNA HISTORIA VERDADERA
Opus Dei se dedicó a seleccionar y formar las élites de la dictadura hasta lograr controlar el poder. En los años 70 el gobierno presidido por el almirante Carrero Blanco fue llamado gobierno "monocolor" : porque de 19 ministros, 12 “pertenecían”. Aunque Escrivá no tenía ninguna responsabilidad directa en el régimen, el “padre” no dejó de aconsejar al generalísimo. El le sugirió el restablecimiento de una monarquía de derecho divino de la que Franco se proclamó regente vitalicio.
Escriva quiso ser nombrado regente tras la muerte del Caudillo. Por ello se hizo con un título nobiliario en 1968 Monseñor Escriva de Balaguer, marqués de Peralta. Pero el plan cambió cuando al año siguiente Franco nombró sucesor a Juan Carlos de Borbón. Monseñor tenía otras ambiciones. Desde el final de la segunda guerra mundial Escrivá residía en Roma y buscaba extender su poder en América latina. En todas las embajadas españolas se instalaron oratorios del Opus que facilitaron los contactos con las élites locales. Prodigó sus consejos espirituales con los que querían luchar contra el comunismo y reforzar la fe católica en su país. Por ello viajó a Santiago de Chile en 1974 para dar gracias junto con sus tres "hijos espirituales", el general Pinochet, el almirante Merino y el general Leigh.
Monseñor de Balaguer quiso extender su Obra en Europa pero no pudo logralo por el aislamiento diplomático de España. Sus objetivos consistían en recrear una internacional anticomunista (comparable a la alianza Franco-Mussolini-Hitler durante la guerra civil), terminar con el aislamiento de la España franquista y favorecer la construcción europea.
En 1957, hizo que el archiduque Otto von Habsburg-Lothringen fundara el Centre européen de documentation et d’information (CEDI) y gracias a otros dos de sus hijos espirituales, Alcide de Gasperi y Robert Schuman, tuvo su influencia en la redacción del tratado de Roma que dio lugar al nacimiento de la creación de la Comunidad europea. Franco y el “padre” murieron en 1975. Equivocadamente se pensó que OD se iría al infierno junto con ambos. OD floreció 3 años más tarde en 1978. Aprovechando intrigas que paralizaban al Sagrado Colegio Cardenalicio OD consiguió convencer a los cardenales para que eligieran a un « amigo predicador », el arzobispo de Cracovia, Karol Wojtyla. Desde ese momento la secta iba a poder desviar el aparato diplomático vaticano en su propio beneficio así como la organización religiosa de la Iglesia católica.
Juan-Pablo II constituyó un grupo de colaboradores en el que prácticamente sólo había opusinos y se dedicó a romper toda resistencia en la Iglesia. Para ello aisló « por razones de salud » al superior de jesuitas, Pedro Arrupe, y nombró a un administrador provisional el opusino padre Dezza. Pero el papa polaco no se atrevió la Compañía de Jesús. Llevó a cabo una “limpia” de curas latinoamericanos, culpables de compartir los análisis marxistas y oponerse a las dictaduras católicas (Chile de Pinochet, Argentina de Videla).
Hubo dos personajes que sirvieron con celo esta política : monseñor Josef Ratzinger, prefecto de la Congregación para la doctrina de la fe, y Monseñor Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo pontificio para la familia. Un centro de vigilancia se instaló en Bogota, dotado de un ordenador de capacidad estratégica, cuyos terminales están instalados en el Vaticano. Se ficharon e introdujeron en él todas las actividades políticas de los religiosos latinoamericanos. A partir de estas informaciones se planearon los asesinatos llevados a cabo por los escuadrones de la muerte del padre jesuita Ignacio Ellacuria o Monseñor Oscar Romero. Juan-Pablo II promulgó un nuevo código de derecho canónico, cuyo autor principal fue un prelado del OD, Monseñor Julián Herranz-Casado, que llegó a ser presidente del Consejo pontificio para la revisión de los textos legislativos.
Por otra parte dió al OD un estatuto hecho a medida, el de « prelatura personal ». Desde ese momento los miembros del OD escapan definitivamente al poder de los obispos diocesanos. No obedecen más que al prelado y al Papa. Su organización se ha convertido en un instrumento de control de las iglesias locales al servicio del poder temporal del Vaticano. Un destino que recuerda el de otra secta que dominó con el terror religioso en la España del siglo XVI antes de imponer su fanatismo en la iglesia universal: la Inquisición.
Y para colofón el papa confió la "Congregación para la causa de los santos" a un opusino, Rafaello Cortesini. Juan-Pablo II inició el proceso de canonización de Escrivá de Balaguer y eligió para su beatificación el día de su cumpleaños, el 17 de mayo de 1992. Esta canonización provocó agrias y enconadas polémicas en la iglesia católica. Los testimonios contrarios a la santidad de Escrivá fueron rechazados (con malos modos en el caso de Carmen Tapia de la que el recientemente fallecido Echevarría escribió maravillas), hubo 6000 cartas pidiendo la canonización, procedían de 69 cardinales, otras de 987 obispos y el resto de jefes de Estado y de gobierno.
la reparación por parte de la iglesia les ha pillado jubilados.
Juan Pablo II, el santo del Opus Dei no movió un dedo ante las quejas que le fueron presentadas en su momento. Una santidad que pretende tapar numerosos crímenes contra seres inocentes. No tienen piedad ni perdón, sólo piensan en prestigio, poder, gente, dinero, propaganda...apariencias.
¿El bien de los fieles? la fe de la gente sencilla, una excusa que ni pintada para aprovecharse y beneficiarse de ella. No se puede cometer peor delito. El escándalo y la rueda de molino se comprende. En este caso "niños sordos", toma ya, los que no hablan, qué fuerte...y los que no se pueden defender.
UNA HISTORIA VERDADERA
Oficialmente el OD no es más que una asociación católica
internacional. Su actividad se limitaría a dar asesoramientos espiritual a sus 79.303
miembros (de ellos 1.506 sacerdotes, 352 seminaristas y 77.445 laicos). Miembros
escogidos entre la créme de la
sociedad latinoamericana y europea. Entre ellos algunos jefes de
multinacionales, magnates de la prensa y la finanza, jefes de Estado y de
gobierno. De cada uno de ellos espera el OD austera disciplina y completa
obediencia. Al tiempo que hace como que ignora sus actividades políticas “personales”
busca imponer a través de sus miembros sus valores en la sociedad.
Dicha secta fue fundada el 2 de octubre de 1928 por un joven cura español de
modestos orígenes, el cura Escriva. El objetivo : alcanzar la santidad al
tiempo que se participa en un régimen teocrático del que Escrivá sería el
profeta. La guerra civil de 1936-39 fue la ocasión inesperada para fundar el
estado católico con el que soñaban. Escriva se convirtió en director de
conciencia del general Franco (dos gotas de agua como ya dije en otra ocasión).
Juntos rehabilitaron el viejo
principio "Cujus regio, ejus
religio" Opus Dei se dedicó a seleccionar y formar las élites de la dictadura hasta lograr controlar el poder. En los años 70 el gobierno presidido por el almirante Carrero Blanco fue llamado gobierno "monocolor" : porque de 19 ministros, 12 “pertenecían”. Aunque Escrivá no tenía ninguna responsabilidad directa en el régimen, el “padre” no dejó de aconsejar al generalísimo. El le sugirió el restablecimiento de una monarquía de derecho divino de la que Franco se proclamó regente vitalicio.
Escriva quiso ser nombrado regente tras la muerte del Caudillo. Por ello se hizo con un título nobiliario en 1968 Monseñor Escriva de Balaguer, marqués de Peralta. Pero el plan cambió cuando al año siguiente Franco nombró sucesor a Juan Carlos de Borbón. Monseñor tenía otras ambiciones. Desde el final de la segunda guerra mundial Escrivá residía en Roma y buscaba extender su poder en América latina. En todas las embajadas españolas se instalaron oratorios del Opus que facilitaron los contactos con las élites locales. Prodigó sus consejos espirituales con los que querían luchar contra el comunismo y reforzar la fe católica en su país. Por ello viajó a Santiago de Chile en 1974 para dar gracias junto con sus tres "hijos espirituales", el general Pinochet, el almirante Merino y el general Leigh.
Monseñor de Balaguer quiso extender su Obra en Europa pero no pudo logralo por el aislamiento diplomático de España. Sus objetivos consistían en recrear una internacional anticomunista (comparable a la alianza Franco-Mussolini-Hitler durante la guerra civil), terminar con el aislamiento de la España franquista y favorecer la construcción europea.
En 1957, hizo que el archiduque Otto von Habsburg-Lothringen fundara el Centre européen de documentation et d’information (CEDI) y gracias a otros dos de sus hijos espirituales, Alcide de Gasperi y Robert Schuman, tuvo su influencia en la redacción del tratado de Roma que dio lugar al nacimiento de la creación de la Comunidad europea. Franco y el “padre” murieron en 1975. Equivocadamente se pensó que OD se iría al infierno junto con ambos. OD floreció 3 años más tarde en 1978. Aprovechando intrigas que paralizaban al Sagrado Colegio Cardenalicio OD consiguió convencer a los cardenales para que eligieran a un « amigo predicador », el arzobispo de Cracovia, Karol Wojtyla. Desde ese momento la secta iba a poder desviar el aparato diplomático vaticano en su propio beneficio así como la organización religiosa de la Iglesia católica.
Juan-Pablo II constituyó un grupo de colaboradores en el que prácticamente sólo había opusinos y se dedicó a romper toda resistencia en la Iglesia. Para ello aisló « por razones de salud » al superior de jesuitas, Pedro Arrupe, y nombró a un administrador provisional el opusino padre Dezza. Pero el papa polaco no se atrevió la Compañía de Jesús. Llevó a cabo una “limpia” de curas latinoamericanos, culpables de compartir los análisis marxistas y oponerse a las dictaduras católicas (Chile de Pinochet, Argentina de Videla).
Hubo dos personajes que sirvieron con celo esta política : monseñor Josef Ratzinger, prefecto de la Congregación para la doctrina de la fe, y Monseñor Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo pontificio para la familia. Un centro de vigilancia se instaló en Bogota, dotado de un ordenador de capacidad estratégica, cuyos terminales están instalados en el Vaticano. Se ficharon e introdujeron en él todas las actividades políticas de los religiosos latinoamericanos. A partir de estas informaciones se planearon los asesinatos llevados a cabo por los escuadrones de la muerte del padre jesuita Ignacio Ellacuria o Monseñor Oscar Romero. Juan-Pablo II promulgó un nuevo código de derecho canónico, cuyo autor principal fue un prelado del OD, Monseñor Julián Herranz-Casado, que llegó a ser presidente del Consejo pontificio para la revisión de los textos legislativos.
Por otra parte dió al OD un estatuto hecho a medida, el de « prelatura personal ». Desde ese momento los miembros del OD escapan definitivamente al poder de los obispos diocesanos. No obedecen más que al prelado y al Papa. Su organización se ha convertido en un instrumento de control de las iglesias locales al servicio del poder temporal del Vaticano. Un destino que recuerda el de otra secta que dominó con el terror religioso en la España del siglo XVI antes de imponer su fanatismo en la iglesia universal: la Inquisición.
Y para colofón el papa confió la "Congregación para la causa de los santos" a un opusino, Rafaello Cortesini. Juan-Pablo II inició el proceso de canonización de Escrivá de Balaguer y eligió para su beatificación el día de su cumpleaños, el 17 de mayo de 1992. Esta canonización provocó agrias y enconadas polémicas en la iglesia católica. Los testimonios contrarios a la santidad de Escrivá fueron rechazados (con malos modos en el caso de Carmen Tapia de la que el recientemente fallecido Echevarría escribió maravillas), hubo 6000 cartas pidiendo la canonización, procedían de 69 cardinales, otras de 987 obispos y el resto de jefes de Estado y de gobierno.
Comentarios
“Todas las campanas de las iglesias de Madrid tañerán el sábado en el aniversario del 11-M”
Hay una gran vía de investigación del 11-M abierta y expedita.
Si alguien demuestra tener una información privilegiada de un atentado, como primera providencia hay que acudir a él. Si demuestra conocer con antelación lo que luego sucede es indudable que antes que nada hay que recurrir a él. Más todavía si su información es sobre el arma del crimen o la prueba fundamental del caso. Así es en todo tiempo y en todo lugar, en toda la historia de la humanidad.
En el 11-M hay una persona que está en esa situación, que ha demostrado tener información adelantada sobre el arma del crimen o prueba fundamental del caso. Se le conoce con nombre y apellido: José Apezarena. Además está muy activo en su medio “El Confidencial Digital”, con su “Religión Confidencial”.
Demostró tener ese conocimiento especial en los micrófonos de la COPE, en el programa que dirigía, horas antes de que apareciera la bomba de la comisaría de Vallecas. Como ha relatado Ignacio López Bru en su libro “Las cloacas del 11-M”:
José Apezarena a las 23:03:
«También hay que decir como dato que aportaba Juan Baño que en una de las mochilas que no ha estallado había un teléfono móvil, y que todo indica que el mecanismo para hacer estallar esas mochilas ha sido, precisamente, la llamada telefónica, por teléfono móvil, y que en la furgoneta en la que han encontrado esta cinta con cánticos del Corán aparecía también un teléfono móvil que parece ser que es el que ha hecho, el que se ha utilizado para accionar los explosivos. Por tanto, hay pistas desde el punto de vista de la investigación que van en una dirección bastante clara, hoy por hoy, en este momento, a estas horas, pero habrá que esperar».
Su redactor Juan Baño a las 21:10:
“una de las mochilas, precisamente una que no explosionó, portaba en su interior un teléfono móvil, que ha servido, al parecer, de detonador, un teléfono móvil que habría activado, a través de sistemas de teléfono móvil colocados en cada uno de los artefactos explosivos, las distintas bombas. Es decir, en la mochila no explosionada se ha encontrado ese teléfono móvil.”
Si la bomba de la comisaría se considera una prueba falsa José Apezarena tiene la clave de ella. Si se considera una prueba verdadera más aún es imprescindible llamarle a declarar, dado su especial y previo conocimiento del arma del crimen.
Siendo tan clara la vía de investigación del 11-M, ningún juez ni fiscal ha llamado a declarar a José Apèzarena y a su subordinado Juan Baño. Ni siquiera ningún sagaz periodista le ha preguntado por ello, a pesar de ser asiduo a tertulias. ¿Por qué? José Apezarena tiene una cualidad especial: es del Opus.
Quien quiera saber la verdad del 11-M, de verdad, debe empezar por preguntar a José Apezarena. Quizás a muchos les de miedo por presentir que con eso basta. No preguntarle es un modo de culpar a José Apezarena. Lo que es una injusticia. Indudablemente hay que inquirir vivamente a José Apezarena.
Breve biografía con foto de José Apezarena:
http://www.esferalibros.com/autor/jose-apezarena/
Transcripción y audición de las palabras de José Apezarena hace trece años:
https://lascloacasdel11m.wordpress.com/2015/03/11/la-fonoteca-de-la-cope-i-la-mochila-de-vallecas/