RAÍCES DE LA VIOLENCIA

Gracias por tus palabras Noelia, siento mucho las represalias, y tengo curiosidad por saber lo que te pasó. Si quieres cuéntame en un correo, tienes mi dirección. No me dejes en ascuas por fa.  El dominio del Opus en esa parte de España es total, una auténtica dictadura. Me lo creo todo, después de ver, padecer y sobrevivir a las truculencias pasadas.
En todas partes tienen mano, pero en la comunidad foral es más que simple mano. El Jorge al que te refieres no tuvo el valor de coger los bártulos y emigrar, y por eso lo cazaron de nuevo como a un conejo, a saber qué han hecho con él. Esta gente no tiene escrúpulos, de ningún tipo. Mira que ha habido y sigue habiendo gente mala por España, pero es que ellos tienen la ventaja de que se santifican así, de modo y manera que imagínate, como para toserles están las cosas. ¡Todo sería tan diferente si más personas osaran dar un poco la cara! la vida con miedo no es vida, todo tapaderas, capas y mantas zamoranas, ocultando la verdad, no se puede. Y esta gente es experta en máscaras.

Las y los combatienes en este tema, que es el tema, lo siento mucho, pero es el tema, desaparecen sin dejar rastro después de unos meses, incluso años, de la noche a la mañana, silence. Dejan de hablar y de investigar aunque vivan a miles de kilómetros de este país, son localizados y neutralizados, no me cabe duda. Todo el mundo tiene "puntos débiles" a los que el opus como auténticos defensores de la familia que son se agarran como sanguijuelas: hijos que alimentar, trabajo que conservar, una vida que llevar.  De figurines por todas partes (universidades, Vaticano, puestazos en milicia, policía, judicatura, gobiernos, empresas) y los armarios llenos de cadáveres y sufrimiento.

Por las buenas, por las malas, por las regulares, hay que acabar neutralizándonos. No me pienso callar una, y tengo la esperanza de crear escuela. Aunque sea después de muerta.

Sobre la catástrofe humanitaria, que cambien el diccionario, porque los horrores que se han vivido y el auténtico genodicio en suelo español no es como para andarse con muchas tonterías por las palabras. No se contentaron falangistas y guardia civil con ir por los pueblos casa a casa papel en mano buscando izquierdosos en los 36 y 39. No. Siguieron limpiando, robando, ofendiendo, marginando en trabajos a la gente hasta 15 años después,  y toda la vida determinadas familias en los pueblos cargaron con el sanbenito. La emigración al norte vino por el hambre y también por la persecución política.
Luego la operación transición se olvidó de ellos, normal, pilotaban franquistas. No tan normal la traición de los de izquierdas que pisaron moqueta, quizás porque no habían dejado de pisarla en el exilio.





Y sobre esos mimbres de matar gente a mansalva por no ser "afecta", por ser pobre, posible militante de izquierdas y humillar, ofender, desposeer de esa manera, no me extraña nada de lo que he visto, vivido y padecido 60 años después de acabada esa guerra que se llevó a cabo con unos propósitos muy claros de "limpieza" ideológica de España, renovando pasados tiempos que no habían acabado de pasar como se vió, y siguen como podemos dar testimonio. Va totalmente a juego y no se puede separar los atropellos de Franco desde 1936 a los derechos humanos contra sus propios connacionales con el comportamiento despótico del "Opus Dei" con todo lo que suponga una merma de su fama y sus posiblidades de pesca. Veo pocas diferencias, todo es más limpio hoy que entonces, y hay nivel de vida, pero el odio, el fanatismo, la violencia capaz de desplegar esta gente, no tiene limites. Lo hemos vivido en carne propia y nuestro único delito es contar la verdad sin paños calientes.