ANARQUISMO CRISTIANO
No sé a qué nuevo milagro se refiere ni recuerdo el comentario de los paraísos fiscales. Difícil sin nombres recordar.
Pongo un escrito antípodas de mi religión particular, jerarquizada, militarizada, masculinizada y con mucha presión. ¿Y si el fundador, no el "founder" sino el judío, hubiera estado más cerca del anarquismo que del militarismo? sorpresón para los de la vocación eterna a nume o super...
Sebastián Kalicha sorprende con este
libro
Kalicha muestra que la enemistad
histórica del Anarquismo y el cristianismo se debe a la
instrumentalización del cristianismo desde el momento en que fue
elevado a religión de Estado en el siglo IV. Todas las
monstruosidades que se han cometido y se cometerán en nombre del
cristianismo desde entonces ¿deben ser reprochadas a la esencia del
cristianismo? Contra ello se puede objetar que contra la iglesia del
Estado se han levantado siempre movimientos heréticos, que recogían
la crítica del poder y los impulsos igualitarios de las enseñanzas
y el movimiento de Jesús, que lo desarrollaban y lo convertían en
punto de partida de un impulso humanista y socialmente
revolucionario.
Un buen ejemplo sería Peter Chelcicky
en los tiempos de la guerra contra los partidarios de Jean Huss. Con
León Tolstoi anarquismo y cristianismo se encuentran en una nueva
síntesis, cuyo significado no puede ignorarse tampoco en los
movimientos sociales de hoy. Estas corrientes subterráneas, estos
hilos perdidos que caminan por debajo de las enemistades más
visibles entre anarquismo y cristianismo, conducen a interesantes y
exitosos movimientos. Así los democráticos principios del
movimiento “ocupa Wall Street”tienen que ver con la experiencias
de los cuáqueros como ha demostrado David Graeber en un análisis.
Los cuáqueros por su parte hunden sus raíces en las iglesias
revolucionarias del siglo XVII, cuyos teólogos se basan en los
místicos alemanes como Sebastian Frank, Johannes Denck y Jacob
Böhme. Gustav Landauer estima que la mística alemana es subversiva
y abre camino al pensamiento libertario.
Kalicha lee el nuevo Testamento de una
forma novedosa, como un relato que promueve una nueva forma de
sociedad. “La “familia” de los 12 Apóstoles es un grupo libre
de dominación y de estructuras de opresión...En lugar del dominio
establecido de arriba abajo a través del poder está la exigencia
del servicio de unos a otros. Es todo lo contrario de la perspectiva
normal de las relaciones entre los seres humanos, el otro pasa de
objeto de posible dominio a ser alguien con quien compartir, alguien
que tiene derecho a la ayuda y a la donación de mí mismo.” Con su
conducta Jesús rompe con el principio estructural del dominio y el
poder, dado que en su lugar establece el servicio a los demás.
Pero todo esto no puede hacernos
olvidar que en la vida política anarquistas y cristianos tienen una
conducta preponderantemente distanciada entre sí. El ateísmo de
unos y la disposición par la autoridad de los otros en la praxis
hace que no se puedan encontrar. Merece la pena tomar en
consideración las reflexiones de Alexandre Christoyannpopoulos sobre
el Sermón de la Montaña que lo ven como un manifiesto cristiano
anarquista. Es preciso tener cuidado con el poder como medio de
relación con los demás: “Los medios violentos sólo traen más
violencia, corrompen y estropean los mejores objetivos”. Podemos
ver la plausibilidad de esta tesis reflexionando sobre el último
siglo de los extremos. En lo esencial la tesis es irrefutable, la
violencia engendra violencia, las víctimas se convierten en verdugos
y los verdugos en víctimas. Desde un punto de vista
“cristiano-anarquista” se prohíbe el culto del poder como medio
de progreso. Esto vale para el aplastamiento del Fascismo mediante la
violencia como para la lucha violenta de los movimientos de
liberación que quieren justificar hoy la guerra imperial y las
intervenciones en otros países. El rechazo biblicamente fundado de
la violencia como medio del progreso hacia más libertad y democracia
puede ejemplificarse muy bien a la vista de la historia más reciente
de los supuestos movimientos liberadores o de las guerras de
liberación.
Los resultados de la segunda guerra
mundial consistieron desde el punto de vista libertario, en que la
población de la mitad oriental de Europa fue confrontada tras la
violencia nazi a las dictaduras estalinistas, China aterrizó en 1949
en una dictadura maoísta, las potencias europeas vencedoras de la
guerra tras 1945 ejercieron la represión sangrienta en sus colonias,
la lucha por la liberación de Argelia después de una masacre de las
tropas francesas el 8 de mayo de 1945 empezó con el terror
individual y con la puesta en pie de una dictadura represiva contra
los movimientos de liberación que se le oponían.
Albert Camus lo vió y lo criticó muy
pronto mientras Jean Paul Sartre se lanzaba al elogio de las acciones
violentas del FNL.El Vietminh vencedor de Francia y Japón mató
seguidamente a todos los trotskistas que pudo detener, la guerrilla
castrista en Cuba tras su victoria no sólo mató a los seguidores
encancerlados del depuesto dictador Fulgencio Batista, sino que
también prohibió los sindicatos de la oposición anarcosindicalista
y encarceló a sus miembros, etc, etc. Todo este excurso histórico
prueba la crítica “cristiano anarquista” que Kalicha desarrolla
primero en su vertiente teórica y teológica.
Es un reto intelectual, tanto en el
plano teórico como en el práctico, intentar ver cómo los
anarquistas cristianos y los cristianos anarquistas se han mezclado
en la política de este mundo. Tenemos a los norteamericanos Dorothy
Day, Ammon Hennacy como ejemplo de dos trabajadores católicos de
tendencia anarquista. Es extraño como una activista libertaria y
socialista como ella justificó la institución jerarquizada y
enemiga de la emancipación de las mujeres que es la iglesia
católica. Tom Cornell ha estudiado este caso. ¿Por qué la
libertad de conciencia, la autonomía del creyente y el evangélico
sacerdocio de los fieles son palabras incompatibles con la iglesia
católica? ¿Es quizás un reflejo a la beatería de las iglesias
puritanas y calvinistas norteamericanas, cuya enseñanza sobre la
predestinación lleva a ver la despreocupación del capitalismo como
un signo de una vida que complace a Dios? No hay ninguna respuesta
satisfactoria a estas preguntas.
Sin embargo las comunidades de
trabajadores católicos en Norteamérica ofrecen un ejemplo llamativo
de coherencia con su creencia cristiana a través del trabajo con los
marginados, los movimientos por la paz y sus acciones directas contra
los objetivos militares.
Jacques Ellul |
Lou Marin escribe sobre “Anarquismo
bíblico”, centrándose en la figura de Jacques Ellul. Nacido en
1912 en una familia de la gran burguesía, con raíces
multinacionales, Ellul interesa porque en él se encuentran la
influencia de la Ilustración francesa con la perseguida tradición
minoritaria en Francia de los hugonotes. Ellul no se hizo marxista ni
se adhirió al Partido Comunista porque ya había visto la
persecución estaliniana a los disidentes tanto en la Guerra Civil
española como en la Resistencia francesa. En la Resistencia
perteneció al grupo socialista, independiente y demócrata radical
“Combat” al que también perteneció Camus. En 1940 se ocupó de
facilitar pasaportes falsos y salvar judíos así como resistentes
perseguidos. Es venerado por este compromiso en Yad Vashem. Tras la
liberación fue por poco tiempo portavoz del alcalde de Bordeaux. Sus
experiencias le llevaron a orientarse hacia la democracia directa.
Mientras que Aldous Huxley difundió su obra en los países
anglosajones como un crítico de la técnica, en el ámbito alemán
se le vió como a Camus, un socialista libertario. La influencia de
Ellul está en Ivan Illich o José Bové. Mayo del 68, los
ecologistas franceses y los movimientos antimilitaristas de la
siguiente década encuentran en Ellul un pariente autorizado. El
compromiso práctico y teórico se funde en una relación protestante
con Dios: para Ellul Dios es un Dios del amor y la comunicación,
“que no puede estar en la cima de una pirámide de causas”. Ellul
invirtió mucha energía en su trabajo de una exégesis de la Biblia
libertaria y libre de violencia y en la crítica de la integración
del cristianismo en la administración del Estado tras la paz de
Constantino del 313.
Interesante libro para que hoy discutan
anarquistas no violentos y cristianos libertarios sobre las formas de
pensamiento y acción de los primitivos herejes de la cristiandad, y
de su significado para los movimientos sociales del presente. Dada la
actual y múltiple crisis en teología, teoría y política no sería
una mala idea fijarse en estos anarquistas cristianos.
Comentarios
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/01/25/actualidad/1390680777_863390.html
http://www.abc.es/sociedad/20131219/abci-vaticano-auditoria-total-201312191317.html
Un cardenal italiano tiene la lista de las "generosas aportaciones" a la Congregación para las Causas de los Santos, y próximamente llegará a alturas superiores. ¿Recuerdan el "Cuervo"?
Una revista italiana está detrás de ella. Habrá casos muy escandalosos. Veremos.
Sinceramente eran bastante trujos. Se decían anarquistas.
http://www.mounier.es/