Edith Stein: la historia de sor Benedicta de la Cruz
Se pueden poner los subtítulos en español, translate/Spanish. La recuerdo cada año el 9 de agosto, día de su santo, fecha en la que desapareció en Auschwitz, una mujer y una personalidad única, judía, agnóstica, cristiana...ella misma fuera cual fuera su creencia o su increencia a lo largo de su vida, siempre buscó la verdad.
Antonio Ruiz Retegui, sacerdote numerario y capellán de Filosofía en la uni de Navarra y nuestro profesor de teología me recomendó la lectura de su biografía para aprobar la asignatura que tuve que cursar a distancia.
Fue mi primer encuentro con esta filósofa y fenomenóloga. Luego, cuando había dejado de vivir en el centro, aunque sin haber realizado el proceso de deslavado cerebral ni tener idea clara del camino a ninguna parte en el que había estado implicada durante años, volví a encontrar otra biografía en el escaparate de una librería en Lourdes.
La tercera vez de la manera más inopinada en un viaje a Alemania, no tenía ni idea ni el proyecto de que iba a poder visitar en Espira, el colegio de Dominicas en el que trabajó y la habitación que ocupó mientras estuvo en ese colegio de 1922 hasta 1933, cuando decidió con 42 años entrar en el Carmelo.
También ella intentó hacer carrera en la universidad sin éxito, y acabó en un colegio, que le sirvió para descubrir la adoración, el ciclo litúrgico, la oración que llevaban a cabo las monjas Dominicas, la sencillez de su vida. Vivía en otra onda que la que llevamos comúnmente. La vida de oración no le impidió seguir con su trabajo intelectual tanto en el colegio como luego en el Carmelo.
Y ahora este documental, y cada vez, aparece algo distinto de su vida que me inspira. Hoy su búsqueda infatigable de la verdad, a través de todos los obstáculos, una filósofa no tan conocida, pero que hace honor como pocos a la etimología griega de la palabra: amante de la sabiduría, buscadora de la verdad, una búsqueda que duró toda una vida y que acabó de la manera más cruel posible: En el sacrificio de su propia vida que compartió con los millones de judíos exterminados en los campos de concentración, Dios no le ahorró sufrimientos.
Sin derecho al descanso ni pensamiento al respecto. Toda una vida entregada a los demás y a la Verdad. Empeñada en no perderse nada del dolor de sus semejantes, ni la primera guerra mundial, no puede seguir con sus libros mientras sus compañeros están en el frente, y por eso se enroló como enfermera. Luego tras la guerra, cuando mira su estantería y ve que todos sus amigos filósofos autores de sus libros habían fallecido, se da cuenta de que la filosofía no basta.
A partir de ahí la cuestión de Dios le viene por uno de esos colegas, Adolf Reinach que se interesó por la fenomenología de la religión. Le sorprendió que la viuda de su amigo, también católica, asimilaba la muerte de su marido con la fuerza de Cristo, así fue como a sus ojos palidece el judaísmo y brilla la luz de la Cruz.
Su conversión al catolicismo en 1921 tras la lectura de la vida de santa Teresa de Jesús fue un golpe duro para su madre, judía practicante, y el segundo golpe terrible consistió en la entrada en el Carmelo. Que no le sirvió de refugio frente a los nazis, la trasladaron de Colonia a Holanda, y al convento de Holanda fue a buscarla la Gestapo. Ella y su hermana Rosa fueron detenidas y enviadas al campo, el último escrito autógrafo que queda de ella es un mensaje enviado desde una de las estaciones de tren, camino de Auschwitz.
En España solo hablan de ella nuestros amigos, que me parece le han puesto el nombre a un cole en Madrid y los carmelitas, es preciso rescatarla de sus garras. No de las de las carmelitas, de las otras.
Comentarios
Colegio Pasteur de Arroyomolinos: https://colegiopasteur.es/about-our-school/identidad/
Colegio Chesterton de Meco: https://colegiochesterton.es/
Colegio Edith Stein de Madrid: https://www.colegioedithstein.es/el-proyecto
Y un avance enorme respecto a lo que tú dices arriba: "Tampoco Fomento es del Opus Dei".
Y luego los críticos podemos añadir: En realidad, esos colegios están controlados desde las delegaciones del Opus Dei y su misión principal -¡no reconocida!- es captar adeptos; numerarios (alumnos), supernumerarios (padres y profesores), cooperadores y miembros de la opusfera (todos).
No puede ser que sigan como si nada, en permanente huída hacia adelante. Si no lo arreglan hoy, solo están posponiendo el problema, dejando una bola de nieve que crecerá y crecerá si nadie lo remedia.
Necedad en pleno seno de la Iglesia. ¿Por qué se lo permiten?