Fabricando novelas

La entrevista que me enviáis de Navarro Valls, un auténtico rollazo. Justo he preparado un post sobre como no dejó que se investigara el caso de un triple asesinato que hubo en el Vaticano en 1998. También hablan de su dictadura y exclusión de los periodistas de los viajes papales que por lo que fuera no le eran afines. Sin que le temblara el pulso. Un perfecto opusino, tirano, embustero que encima va de dandy, ensayista, escritor y no sé que más. Pero bueno en este país en el que después de lo que ocurrió con el  Ruiz Mateos que en una segunda navegación pequeños ahorradores hayan confiado otra vez en él y se han quedado sin los ahorros de su vida, está todo dicho. Nos tragamos las milongas opusinas solas, con leche y como se tercie.

Me dejé por el camino la sugerencia de Noelia sobre este turbio asunto tapado en el Vaticano en los tiempos gloriosos del numerario Navarro Valls. Fue en mayo de 1998. Recordaba haber leído algo en "El poder y la gloria" de David Yallop. Y lo que más chocaba de la historia de los tres muertos por disparo era que la madre del supuesto criminal el cual se suicidó tras matar a un guarda suizo y su mujer, no estaba nada de acuerdo con la versión que dió el Vaticano de los hechos. Pero que a pesar de su lucha esa señora no consiguió mover un ápice la versión oficial.

 La historia tejida  para presentar una versión asimilable de lo que pasó hace pensar que una vez más el Vaticano ocultaba la verdad. Esta vez el opusino Navarro Valls fue directamente responsable de la ocultación

Guardia suiza

Según la versión oficial fue un "ataque de locura" del vice cabo Cédric Tornay que le llevó a entrar en el apartamento de Alois Estermann, recién nombrado comandante de la guardia suiza, y de su mujer Gladys Meza Romero. Disparó al matrimonio y luego se suicidó. Este matrimonio sin hijos eran conocidos como cercanos al Opus Dei. En 15 minutos Navarro Valls se presentó en la escena del triple crimen y dió la versión que no se movió un ápice tras el simulacro de investigación llevado a cabo por el fiscal Nicola Picardi, que es como decir por el Vaticano mismo.

 Se taparon las evidencias, se engañó a la madre de Cedric Tornay, el supuesto "asesino loco", presionándola para que no acudiera a Roma al funeral de su hijo, se le dijo que el Papa la llamaría, que esperara en el hotel, mentira. La mujer se fue de Roma sin que le dieran explicaciones satisfactorias, ante las grandes farsas tejidas desde arriba por el Vaticano la gente común y corriente no tiene nada que hacer. En virtud de su "extraterritorialidad", el Vaticano es el lugar idóneo para todo tipo de crímenes y tapaderas de los mismos.  En esencia, lo mismo que predicaba Jesús de Nazaret.

La madre de Tornay, Muguette Baudat contrató a dos abogados en 2005 para que llevaran el caso e investigaran el homicidio según el sistema judicial suizo. Un año más tarde Mugette Baudat seguía sin saber la verdad, como siempre que ha habido muertes extrañas en las que el vaticano está implicado: Calvi, Juan Pablo I.... 

Tejieron una maraña de mentiras, amenazaron a los compañeros de la guardia suiza del supuesto criminal, inventaron un pasado glorioso para Estermann como defensor del papa el día del atentado de 1981, él mereció un funeral en san Pedro por todo lo alto presidida por el cardenal secretario de Estado Sodano. El del supuesto loco, Tornay, se celebró en la pequeña iglesia de Santa Ana, y el obispo suizo que la celebró suplicó el perdón de Dios para él por lo que hizo. 

Cosas sin aclarar del crimen: ¿con quién estaba hablando por teléfono Estermann cuando llegó el asesino? el auricular se quedó colgando. ¿Por qué los testigos primeros que llegaron dijeron que había cuatro copas de vino y esas copas desaparecieron así como las primeras fotos hechas por un funcionario del vaticano? ¿por qué no se pidió ayuda a las autoridades italianas para las autopsias? ¿por qué se despidió a la ambulancia que llegó para transportar los cuerpos al policlínico Gemelli? ¿por qué no se llamó a ningún médico ni de dentro ni de fuera del Vaticano? ¿por qué se trasladaron los cuerpos a media noche a la morgue vaticana por miembros de la guardia suiza? ¿cómo pudo saber en 15 minutos Navarro Valls la "verdad" del caso y tener la "certeza moral" sin investigación policial de ningún tipo de lo que había pasado?

En especial cuando no se protegió el escenario del crimen, ni se levantaron huellas digitales, ni entró un patólogo. Minutos después de las tres muertes el apartamento y alrededores eran un caos de curiosos, monseñores y gente diversa. Las descripciones de la posición de los cadáveres variaban lo que sugería que habían sido movidos.

Parece que el tal Estermann había hecho la vida imposible al subordinado Tornay, impidiéndole obtener una medalla que se les da a los guardias suizos a los tres años de estar allí. Pero de esa mala relación Navarro Valls no dijo nada. Sólo explicó que Tornay no se sintió reconocido en su trabajo y que nadie podía prever lo que finalmente pasó. Era el carácter inestable de Tornay que explotó sin lógica lo que llevó a perder los nervios.

Había también una carta de Tornay a su familia de la que en ese momento Navarro Valls no quería desvelar el contenido que ya la familia si lo veía oportuno lo haría. Pero que la carta confirmaba la "versión verdadera". Otra mentirijilla de nada: El propio Navarro ya había filtrado a la prensa una mala traducción del francés al italiano de la carta.

En un punto se "pasó" Navarro con el maquillaje, al subrayar que los tres cadáveres estaban completamente vestidos. Allí se dispararon las especulaciones, ¿habían sido sorprendidos Gladys y C. Tornay por el marido? o dado que en el Vaticano no es rara la relación homosexual ¿eran amantes los dos guardias? Lo muy extraño de la versión Navarro es que si Tornay había decidido matar a Estermann, no tiene sentido ni móvil la muerte de la mujer.

En otro libro que ahora no recuerdo se explicaba con más detalle las trayectorias de las balas que hacían pensar que hubo un cuarto protagonista en este crimen.

En esta historia hay una constante de todos los make up opusinos: el culpable elegido por ellos, que no demostrado por ninguna policía ni juez, estaba mal de la cabeza.

Si dijeran la verdad, esa verdad que tanto proclaman al mundo sobre la esencia, el destino del hombre y la moral que nos lleva a cumplir con la vocación a la que Dios nos llamó, el pueblo no nos daríamos tanto a la novelería.

Pero siempre están ocultando e inventando ¿qué quieren?