Análisis de la docuserie "Lobo de Dios"

Añaden consideraciones, como los afanes de distinción entre católicos ricos o no tanto que favorecen estos grupos frente a la parroquia. O el hecho de que la serie se queda corta, seguro que hay todavía más. Que solo sirven para sacar dinero a espuertas, hacer demostración de músculo, esas fotos de muchedumbres recibiendo a Juan Pablo II en Méjico. Esas otras de filas de curas ensotanados. Al final mafia y más mafia protegida bajo el paragüas Iglesia católica.

Me falta el último capítulo de la serie "El lobo de Dios". Dice Angel que hay que destacar que Maciel no llevó vida penitente al final de su vida como le aconsejó Benedicto XVI, que el moribundo no quería confesarse y a pesar de ello no se le negaba la comunión.

Sangrante si se tienen en cuenta las discusiones a cuento del acercamiento a sacramentos de "divorciados vueltos a casar" y similares. Hay niveles.

Como Elena Sada, ex seguidora de Maciel denuncia: ella pasó muchas penas expandiendo Regnum Christi por EEUU mientras el founder no se privaba de lujos.

También interesante todo lo que aporta Guillermo: en los 60, 70, SJ volviéndose a los pobres, dejó campo libre a los "evangelizadores de ricos".  

Una vez que vuelve a la emisión a partir de 57:00 tras algunos problemas. Compara cómo funcionan las parroquias en Mëjico, que las clases altas desprecian y siempre buscan un cura especial para que los case, bautice, dé la comunión a sus hijos, y cómo funcionan en Florida, a las que acude todo el mundo y que son centros que dispensan caridad, no así a sur de Río Grande.

Mientras se hacen series, hablamos, denunciamos, 4 gatos que somos en comparación con los miles de católicos abusados por todos los listos, ellos siguen con su sistema depredador como si tal cosa. Para prueba los dos curas legionarios detenidos últimamente: uno en Méjico, otro en España. No es la Orden quienes los expulsa o quienes los identifica, es la autoridad civil alertada por padres quien va al aeropuerto y detiene al delincuente que ya estaba escapando del país.

Deberían alejar a los niños de todas estas instituciones en lugar de confiarlos, pero la inercia del comportamiento reverente ante una sotana o clergyman es inmensa. Y si además hay que pagar fuertes sumas para "entrar" en el cole, garantía de calidad. Ya dijo José Vaca, quien trabajó en la universidad Anahual de los legionarios en los 80s que no había tal.