CONTRABANDO APOSTÓLICO

Al lado de este documental salía otro que han hecho del célebre Paso de los Pirineos, conocemos el amor a la invención. 

En este reportaje sobre Otiñar. aldea cercana a Jaén, se trata de realidades, del caciquismo renovado versión dos punto cero tras 1939. De campesinos que se conformaban con sus dos cabras, cuatro cochinos y una gallina. Llega el señorito, y porque sí, porque él lo vale...le da un tiro a la gallina. Echaron a los colonos de Otiñar, sacaron hasta los huesos de sus antepasados del cementerio. Abusos, amenazas que la autoridad, el amigo del founder, a cuyas faldas fue a refugiarse en Burgos, no se preocupaba de las gentes humildes.

Una constante cobarde en España, aplastar al que ya está abajo de la sociedad y quitarle lo poco que tiene.

Se pregunta la gente por qué tuvo éxito el anarquismo, el socialismo y demás herejías en el campo andaluz.

He escuchado al disidente sevillano de moda: si tiene papeles de la corrupción que los saque. Como Presencia y Royu dice que tiene las pruebas, incluso grabaciones de los jueces prevaricadores. Pero cuando menciona el franquismo, la historia, me pregunto ¿Se abreva en Pío Moa o César Vidal? 

Se queja de la PSOE sevillana, como otros pueden quejarse de la PP madrileño o de la UPN navarra. Diferentes comanditas siempre en el poder autonómico respectivo, repartiendo prebendas a amigos y correligionarios. Las siglas son lo de menos. 

La buena marcha de la empresa apostólica, con sedes en medio mundo propició la práctica de complicadas ingenierías financieras. Algunos numes cruzaban la frontera "con los cinturones repletos de billetes". El contrabando apostólico de divisas impresionaba a Escrivá, que admiraba el valor de sus hijos.

Con el tiempo, el grupito de estudiantes se había convertido en un compacto batallón de fieles, entregados en cuerpo y alma al founder y a la causa. De los milagros que se atribuyen al founder es éste, quizás, el más sobresaliente: consiguió montar una extraordinaria organización, muy disciplinada, con reglas peculiares y secretas, que el Vaticano o supo encajar jurídicamente hasta 1980. En los 80, con 75.000 miembros, el doble que los jesuitas en sus buenos tiempos, y una cohesión a prueba de bombas, se  convirtió en un sólido báculo sobre el que el Papa Juan Pablo II descansaba su poder.

UN SANTO LENINISTA

El secreto de estas cosas suele estar en una buena organización. El od la ha tenido. "Funciona con la perfección de las organizaciones leninistas clandestinas", dice Luis. G. López, misionero español. El sistema recuerda, ciertamente, el centralismo democrático de Lenin: libertad de opinión, dentro de los límites de la ortodoxia, y disciplina en el cumplimiento. Un grupo reducido, que interpreta el criterio de los demás, da las órdenes. La información está compartimentada: no todo el mundo sabe todas las cosas. El secretismo que el founder llamó "discreción", afecta sobre todo a los nuevos socios, demasiado jóvenes para comprender los "asuntos de los mayores".

EL founder se reserva la última palabra y corrige a quien se distancie del "espíritu de la Obra". Según su hagiógrafo François Gondrand, se trata de "evitar cualquier desviación". Durante toda su vida Escrivá "cuida hasta los menores detalles y no permite la menor negligencia".

Muchos de los usos y ritos del Opus se atribuyen a la voluntad de El Padre. Algunos de sus hijos escriben con pluma "por que al padre le gustaba". Cuenta A.L.M.M. de Madrid, que las mujeres "no fumaban porque al padre no le gusta". Tampoco le gustaba que las numes fueran al cine, abrazaran bebés o durmieran en cama blanda. Las obligaba a dormir sobre un tabla y, un día por semana, con una guía telefónica por almohada. Con los hombres las reglas son más tolerables. Se entiende que el regreso a casa después del trabajo agotador los exime de ciertas cosas: pueden dormir en colchón.

Enrique Ballestero, que en 1972 hizo una crítica exégesis de Camino, observa rasgos sectarios en ese grupo de hermanos que obedecen ciegamente al superior, utilizan cruentos métodos de mortificación, se mantienen en una especie de infancia perenne y conforman "un grupo reducido y selecto", con estrictas normas de apoyo mutuo. "Con tus hermanos el último, con los demás, el primero", dijo el Founder.

Cambio 16, marzo 1992