FRAUDES
Interesantes preguntas que se hace este comentarista con respecto a la incardinación diocesana del pseudosanto más famoso de todos los pseudosantos. Visto lo visto es bastante probable que no sea el único pseudosanto.
En efecto, no hemos seguido los permisos para estar en una diócesis o cambiarse. "Se conoce" que una vez que uno es fundador está libre de estas pequeñas y pedestres cuestiones que son importantes para el clero de a pie. Un cura no puede salir de su diócesis sin permiso del obispo y quedarse en otra porque sí. Lecciones de obediencia que diría él. Lecciones de servir a la iglesia como ella quiere ser servida. Cuanta inútil palabrería.
Su vanidad no me molesta, es un dato, pero no deja de ser una característica como otro cualquiera y que afecta a gran número de la población.
Molesta el fraude, el hecho de que este hombre era un puro fraude de la cabeza a los pies, desde que se levantaba hasta que se acostaba. No se distinguió por ninguna de las supuestas virtudes cristianas. No hizo nada de lo que repetía y hacía repetir machaconamente. Fui altavoz de un gran embuste. Puesto que creí a pies juntillas que había que vivir la obediencia y fui obediente a las directoras opusinas hasta la extenuación. Por comparar con el tema incardinación, tenemos el tema cambio de centro de las numerarias, durante una temporada cambié de centro anualmente. Máxima estancia en el mismo lugar, cuatro años.
Con la maleta siempre dispuesta. Nunca protesté ni se me ocurrió preguntar el motivo del cambio, la "Obra de Dios" lo necesitaba, se hacía la maleta sin rechistar. Y en efecto Simplicio se hace la gran pregunta que nunca se nos ocurrió, una vez leída la tesis doctoral o lo que fuera que leyó en diciembre de 1939 si hubiera actuado como un cura normal tendría que haberse vuelto a su diócesis original sin más dilación, Zaragoza, Dado que el objetivo de su estancia en la diócesis de Madrid era hacer el doctorado, entonces sólo posible en la Complutense.
Pero todo es fraude, la tesis no la ha visto nadie, el doctorado sí se lo dieron, pero los permisos para seguir en Madrid no conocen. Supongo que a partir de 1939 y al lado del régimen triunfante, formando parte de un Consejo Nacional de Educación, entró en modo "fundador", hizo migas con Eijo y Garay y todo papel estaba de más.
Fraude de la obediencia, no obedeció más que a sí mismo, él tenía el carisma, todos los demás le obedecían y él hacía lo que le daba la gana, para eso estaba en comunicación especial con la divinidad.
Fraude del trabajo, no dió golpe. Todos sus títulos, de regalo.
Las supuestas virtudes que más echaba en falta en los demás, eran las que en él brillaban por su ausencia.
Me acuerdo de que alguna vez en el círculo oí "no se corretea por los centros", me pareció peregrina la admonición ¿A quién se le puede ocurrir corretear por los centros? es decir, ¿quién puede tener ganas de ir de centro en centro visitando y estorbando "el trabajo" de los que allí viven. Pero me parece que ya estoy contestada.
En cuanto a que no existen sectas en la iglesia y que la iglesia católica corrige las derivas sectarias,
¿Es un cura seguidor del barbastrense? empieza por citar un libro escrito por un cura diocesano con vocación "a la santidad en medio del mundo".
Es lo mejor, ser de la Obra de Dios e introducirte o crear, no sabemos, la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas. Así podrías hablar por propia experiencia, desde dentro y no de oídas. El libro citado de Manuel Guerra, el experto antisectas, estaba en los centros publicado por la editorial de "Casa". Era gordo el libraco, hay muchas sectas por el mundo adelante. Por supuesto la Obra de Dios no figuraba.
Suprema ironía, no creo que nadie ate tantos cabos como ellos para seguir la extorsión en la más completa impunidad.
¿Por qué no contesta las interesantes preguntas que él mismo se plantea?
Aunque ya lo hace cuando dice que cada paso que va dando la persona que integra un grupo es un acto libre iluminado por la fe y por la razón. Imposible acto iluminado por ninguna de las 2 cosas, puesto que hubo dolo. Empezando porque la figura del "leader" del grupo no tenía nada que ver con el supuesto dechado de virtudes que nos presentaban, y siguiendo porque sus mentiras eran muchas más de las que entonces se sabían, no paramos de descubrir fraudes. Pensábamos que sólo era el fraude de la "llamada divina", pero ese fraude era el último de una larga cadena de fraudes, sólo que cuando venían a contártelo eras la última en enterarte.
¿Pondrá ejemplos concretos en el siguiente escrito prometido?
Impresiona ver que excelsos ex miembros que peinan canas "recién" se están enterando de la simbiosis de la Obra de Dios con el régimen de Franco. Realidad que ha sido comentada, expuesta y analizada a lo largo y ancho del blog. Eran uña y carne, tal para cual. Hoy en día es uno de los restos vivientes de franquismo más claro, evidente y actuante en la sociedad española. Su capacidad de metamorfosis y disimulo es considerable.
En efecto, no hemos seguido los permisos para estar en una diócesis o cambiarse. "Se conoce" que una vez que uno es fundador está libre de estas pequeñas y pedestres cuestiones que son importantes para el clero de a pie. Un cura no puede salir de su diócesis sin permiso del obispo y quedarse en otra porque sí. Lecciones de obediencia que diría él. Lecciones de servir a la iglesia como ella quiere ser servida. Cuanta inútil palabrería.
Su vanidad no me molesta, es un dato, pero no deja de ser una característica como otro cualquiera y que afecta a gran número de la población.
Molesta el fraude, el hecho de que este hombre era un puro fraude de la cabeza a los pies, desde que se levantaba hasta que se acostaba. No se distinguió por ninguna de las supuestas virtudes cristianas. No hizo nada de lo que repetía y hacía repetir machaconamente. Fui altavoz de un gran embuste. Puesto que creí a pies juntillas que había que vivir la obediencia y fui obediente a las directoras opusinas hasta la extenuación. Por comparar con el tema incardinación, tenemos el tema cambio de centro de las numerarias, durante una temporada cambié de centro anualmente. Máxima estancia en el mismo lugar, cuatro años.
Con la maleta siempre dispuesta. Nunca protesté ni se me ocurrió preguntar el motivo del cambio, la "Obra de Dios" lo necesitaba, se hacía la maleta sin rechistar. Y en efecto Simplicio se hace la gran pregunta que nunca se nos ocurrió, una vez leída la tesis doctoral o lo que fuera que leyó en diciembre de 1939 si hubiera actuado como un cura normal tendría que haberse vuelto a su diócesis original sin más dilación, Zaragoza, Dado que el objetivo de su estancia en la diócesis de Madrid era hacer el doctorado, entonces sólo posible en la Complutense.
Pero todo es fraude, la tesis no la ha visto nadie, el doctorado sí se lo dieron, pero los permisos para seguir en Madrid no conocen. Supongo que a partir de 1939 y al lado del régimen triunfante, formando parte de un Consejo Nacional de Educación, entró en modo "fundador", hizo migas con Eijo y Garay y todo papel estaba de más.
Fraude de la obediencia, no obedeció más que a sí mismo, él tenía el carisma, todos los demás le obedecían y él hacía lo que le daba la gana, para eso estaba en comunicación especial con la divinidad.
Fraude del trabajo, no dió golpe. Todos sus títulos, de regalo.
Las supuestas virtudes que más echaba en falta en los demás, eran las que en él brillaban por su ausencia.
Me acuerdo de que alguna vez en el círculo oí "no se corretea por los centros", me pareció peregrina la admonición ¿A quién se le puede ocurrir corretear por los centros? es decir, ¿quién puede tener ganas de ir de centro en centro visitando y estorbando "el trabajo" de los que allí viven. Pero me parece que ya estoy contestada.
En cuanto a que no existen sectas en la iglesia y que la iglesia católica corrige las derivas sectarias,
¿Es un cura seguidor del barbastrense? empieza por citar un libro escrito por un cura diocesano con vocación "a la santidad en medio del mundo".
Es lo mejor, ser de la Obra de Dios e introducirte o crear, no sabemos, la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas. Así podrías hablar por propia experiencia, desde dentro y no de oídas. El libro citado de Manuel Guerra, el experto antisectas, estaba en los centros publicado por la editorial de "Casa". Era gordo el libraco, hay muchas sectas por el mundo adelante. Por supuesto la Obra de Dios no figuraba.
Suprema ironía, no creo que nadie ate tantos cabos como ellos para seguir la extorsión en la más completa impunidad.
¿Por qué no contesta las interesantes preguntas que él mismo se plantea?
Aunque ya lo hace cuando dice que cada paso que va dando la persona que integra un grupo es un acto libre iluminado por la fe y por la razón. Imposible acto iluminado por ninguna de las 2 cosas, puesto que hubo dolo. Empezando porque la figura del "leader" del grupo no tenía nada que ver con el supuesto dechado de virtudes que nos presentaban, y siguiendo porque sus mentiras eran muchas más de las que entonces se sabían, no paramos de descubrir fraudes. Pensábamos que sólo era el fraude de la "llamada divina", pero ese fraude era el último de una larga cadena de fraudes, sólo que cuando venían a contártelo eras la última en enterarte.
¿Pondrá ejemplos concretos en el siguiente escrito prometido?
Impresiona ver que excelsos ex miembros que peinan canas "recién" se están enterando de la simbiosis de la Obra de Dios con el régimen de Franco. Realidad que ha sido comentada, expuesta y analizada a lo largo y ancho del blog. Eran uña y carne, tal para cual. Hoy en día es uno de los restos vivientes de franquismo más claro, evidente y actuante en la sociedad española. Su capacidad de metamorfosis y disimulo es considerable.
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