INCOMUNICACIÓN.
Hay muchos cortocircuitos que causan, evidencian, perpetran la incomunicación que nos está matando.
1. A uno se le podría llamar hablar a alguien que no soy y sin tener en cuenta dónde estoy. Si lo transponemos a un ser y estar visible es más fácil de entender porque desgraciadamente los seres humanos han llegado a un punto en el que solo entienden lo visible. Pero lo esencial es invisible a los ojos. Si yo estoy colgada del Tajo de Ronda sujeta a una mata por una mano y eso es lo que me salva de caer al abismo tú no me puedes reprochar: cómo eres, que te he invitado a tomar una caña y no has venido.
Si yo soy un delfín no me puedes decir: mira que eres vago que no has trepado a ese árbol cuando te lo dije.
O aún peor, los reproches no se formulan pero están ahí latentes, salen por los ojos, por la cara, por la conducta, pero no puedes responder a ellos porque no te los formulan explícitamente.
¿Por qué ocurre esto? Pues porque vivimos en un mundo en el que la gente dedica mucho tiempo a hablar de tonterías pero las conversaciones serias las quiere monosilábicas, sí o no, en las cuales es imposible explicar quién soy y dónde estoy pero es que además si lo explicas a los tres días se les ha olvidado. A veces porque solo escuchan para saber qué pueden sacar de ti, no porque les interese saber quién eres ni dónde estás. De manera que en su cabeza no se va construyendo una comprensión del otro porque no buscan comprender al otro. Otras porque les importas un poco más que el partido de Albania, pero mucho menos que el partido de España. La importancia, el amor, se pueden medir. Por la atención, energía, dedicación... Si les cuentas chistes les importarás más. Si les haces pensar te mirarán como a una mosca molesta. Si les haces cuestionar lo que no quieren cuestionar te odiarán. Pero avanzamos como individuos y como sociedad pensando, investigando, descubriendo, cuestionando... No contando chistes. La investigación, la reflexión, el cuestionamiento...se pueden aderezar con humor, claro. Pero no es eso lo que quieren, no.
Cuando preguntan ¿hay algo nuevo? en dos minutos que te encuentran por el pasillo en un evento, la única respuesta posible es no o sí, me han ascendido, he perdido el trabajo, me caso, se ha muerto mi... cosas muy estándar que todo el mundo entiende y que se pueden decir en dos minutos. Pero a los seres humanos les pasan muchas más cosas que esas cosas estándar que se pueden explicar en dos minutos.
Escuchando a los ex miembros del Opus en sus coloquios en Youtube, agora coloquios, agora coherencia, les entiendo tan bien. Una de las cosas que cuentan es que los oyentes externos dan mucha importancia al hecho de que les obligaban a darse latigazos y ponerse cilicio. Sin embargo eso ellos ya casi ni lo recuerdan y comentan con asombro que hay muchas otras cosas que les han dejado plomo en las alas, las alas cortadas, un daño indeleble para el resto de su vida y sin embargo los oyentes externos a lo que dan importancia es al cilicio, que es algo de lo que ellos ya ni se acuerdan, ni les importa.
Toda persona que haya sufrido el abuso narcisista puede entender muy bien a esos ex miembros aunque no haya estado en el OD. Conoce muy bien cómo se encierra a las personas en jaulas del alma.
Esa incapacidad de los que no escuchan para ponerse en el lugar del otro, para entender procesos de daño complejos y quedarse siempre en lo más simple, visual, breve, fácil de entender. Porque la mayoría de la gente lo que quiere es creer que escucha, creer que soluciona problemas, no escuchar, no solucionar, sino sentirse bien, sentirse gratificado, ponerse medallas. Esa escucha revictimiza a la víctima de abuso. Y la encierra en el silencio para no ver su sufrimiento multiplicado ante falsas escuchas. Muchas veces pienso que la indiferencia, la incomprensión, la ceguera de los demás hace tanto o más daño que el abuso de los narcisistas.
Si a una persona le han dado muchos golpes en la rodilla y la tiene en carne viva una palmadita en la rodilla le va a hacer ver las estrellas. Así que, sí, tienes que saber a quién les estás dando una palmadita en la rodilla. Si una persona que está colgada del Tajo de Ronda está esperando una mano que le salve y le dé un tirón para salir, va a sentir desesperación si el "samaritano" que pasa le da una bolsa de patatas fritas. Y encima reprocha: ni me das las gracias, ni te las comes...Si todos los samaritanos tienen esa conducta llegará un momento en que se plantee que a lo mejor soltarse de la mata es la única alternativa.
También hay samaritanos que solo se proyectan a sí mismos en todo lo que hacen. Te ven colgando del Tajo de Ronda y dicen: qué suerte, yo siempre he querido hacer alpinismo y no me han dejado.
Una persona es lo que ha vivido y vive, la huella que eso que ha vivido ha dejado, lo que ha significado, lo que cree, lo que piensa, lo que necesita, de lo que carece... Eso es lo que la persona es y dónde está. Sin entender eso es imposible escuchar. Y eso no se entiende en cinco minutos ni en conversaciones en pandilla. Eso que en España se busca casi exclusivamente. Echo de menos la Zweisamkeit alemana. La profundidad protestante.
Creo que el sentido de la vida es encontrarse con otras personas a ese nivel profundo y sin embargo mucha de la energía vital de la inmensa mayoría de las personas va dirigida a impedir que eso ocurra. En esa locura de mundo vivimos. Un mundo que solo busca distracciones, chorradas, memeces, pasatiempos, engaños para impedir que pase lo único que tiene sentido. Y vivir distraído en esas memeces también impide que la gente se enfrente a sus mentiras, a sus engaños, a sus manipulaciones... Por eso se aferran a esas distracciones. Ruedas de hamster para no afrontar la realidad.
2. Luz de gas. Todo el que ha sufrido abuso narcisista sabe la desesperación que genera esto que se puso de moda con la película, pero que ha sido siempre una parte fundamental del abuso. Negarle al otro lo que ha vivido. Decir que no hubo golpes sino besos, que no hubo mentiras sino verdades, que no hubo coerciones sino ayudas, que no hubo robos sino donaciones... Quien ha sufrido esto mucho, durante mucho tiempo, de personas claves en su vida sufrirá muchísimo cuando alguien no tan perverso como ellos, alguien incluso bondadoso, lo haga de manera más suave por la simple razón de que se engaña a sí mismo sobre sus propios actos y no se mira en el espejo ni analiza sus interacciones comunicativas. Cuántas veces habría que traducirles a las personas lo que te están diciendo porque son inconscientes de lo que está implícito en su mensaje. Si lo tradujeras se escandalizarían pero eso es lo que te están diciendo y ni se enteran, ni se quieren enterar. Y mucho menos quieren saber que eso que te están diciendo implícitamente te está haciendo daño. Quien te quiere, quiere saber si te hace daño. Ergo...
Una dura realidad es comprobar que eso que los humoristas decían y tú pensabas que no sería verdad, es verdad. Los humoristas decían que los hombres daban amor a cambio de sexo y tú pensabas que era un chiste. No. No era un chiste. Y no tiene gracia. Julián me lo confirmaba muerto de risa, como si fuera algo muy gracioso, me contaba que sus amigos invitaban a las chicas al cine para no tener que hablar con ellas antes de acostarse con ellas. Un inglés me decía: "ningún tío se tira hablando contigo hasta las 6 de la mañana si no es porque quiere acostarse contigo." Si a alguien le interesas solo si eres su novia, si te acuestas con él, si... No le interesas. Si una persona te importa, no te importa solo si pasa por un determinado aro. Pues es alucinante la cantidad de tíos que están convencidos de que uno de sus colegas quería muchísimo a X porque estuvo años queriendo salir con ella. Cómo trató a X, qué trato tuvo con ella, si se molestó siquiera en conocerla... eso ni lo miran, eso no viene al caso, no... simplemente que suspiraba por ella, cosa que vieron ellos, no ella, eso ya es señal de gran amor. Ese concepto adolescente del amor. Y luego viene el concepto del pagafantismo para acabar de reventar las relaciones. Para acabar de presionar a todo tío que tuviera intención de comportarse como un ser humano y no como un semental desnortado. Porque con eso se burlan de todo el que tenga relación con una chica que no se acuesta con él.
Y así el lenguaje y la presión social nos arrastran y obliga a la gente a actuar conforme a reglas no escritas que no se pueden siquiera explicitar, reflexionar, debatir, expresar que no las compartes... Reglas que nos destruyen, reglas que van contra lo que somos, reglas que no te dejan cuestionar, mucho menos disentir. No te dejan. Reglas sobre las que jamás han reflexionado, pero rigen aspectos fundamentales de su vida por ellas.
La comunicación es algo muy importante. Yo diría que sagrado. El descuido con que se solventa es descorazonador. Si das una palmada en una rodilla en carne viva va a ver las estrellas. Si su conversación contigo es un pasatiempo a los cinco minutos lo habrá olvidado. Pero si es una persona que no va buscando pasatiempos, matar el rato, que da importancia a las conversaciones y a las relaciones y a las personas le dolerá. Si espera una mano que le saque del Tajo de Ronda, no reaccionará igual que si es el rey en una recepción a mil diplomáticos. El valor de esa mano es completamente distinto. Por eso quién es, dónde está, cómo te ve y quién eres para él... es determinante.
Y la revictimización de la clásica frase estúpida : "¿lo has hablado con él?" Es verdad, cómo no lo he pensado antes, cómo no se me ha ocurrido antes que no he hablado con Drácula para decirle que no me gusta que me muerda el cuello. Igual es que no lo sabe. Pero la estúpida que suelta esa frase se está poniendo internamente medallitas: ¡qué buena soy! Escucha de recetario del que solo tiene una sota, un caballo y un rey y se las saca a todo el mundo, en cualquier contexto. Y se pone la medallita de buena samaritana. Y luego esa gente se extraña de que nadie les cuenta nada. A mi siempre la gente me ha contado su vida y milagros. Y aún hoy las recuerdo. Todas. Y son muchas.
Lo peor es que lo has hecho, es que sí le has dicho a Drácula que no te gusta que te muerda el cuello, lo has hecho mil veces, desde que tienes uso de razón. Y a tus padres también, que tenían que protegerte de Drácula. Y la consecuencia han sido mordiscos más brutales.
3. Romper el principio de cooperación. La pragmática es una disciplina de la lingüística. Enumera las reglas básicas que rigen la comunicación. La principal a mi modo de ver es el principio de cooperación, que consiste en que uno no contesta sin cerciorarse de que ha entendido lo que el otro ha dicho. Si observamos cualquier acto de comunicación hoy, sea privado, público, político, en medios de comunicación... veremos que el principio de cooperación se rompe en el 99% de las veces de manera brutal y descarada. Algunas veces se rompe por torpeza, pero en un gran número de ocasiones se rompe porque quien lo hace no quiere entender al otro, quiere manipularlo, quiere sacar ventaja, quiere salirse con la suya. Y ese modo de comunicación absolutamente perverso es promovido desde los medios de comunicación. ¿Acaso alguien cree que décadas en televisión con cuatro horas diarias de Sálvame no tenían una intención? Y las tertulias políticas que son un Sálvame político, y las deportivas que son un Sálvame deportivo...
Cuando la persona quiere cooperar se produce lo que se llama en lingüística negociación del significado. Es decir, hay preguntas de comprobación: ¿quieres decir x, no he entendido esto...? Cualquiera que observe interacciones comunicativas verá como la negociación del significado cada vez brilla más por su ausencia. Y si tú eres una persona que coopera en la comunicación, que negocia el significado, que no atropella, eso te lleva a ser un eterno perdedor, a ser permanentemente avasallado, atropellado por quienes ponen en tu boca cosas que no has dicho y tiran adelante y meten la primera y aprietan el acelerador dando por sobreentendido lo que nunca dijiste sin darte opción a corregirlo.
Comentarios
Pues el Retretes una vez que ha hecho el espantoso ridículo, libros incluidos, con sus análisis (cobrados de la embajada de Rusia en España donde es asiduo) políticos, militares, energéticos sobre la guerra en Ucrania, la que hoy 15 de agosto tiene perdida Putin (y hace un año también) , cambia de tercio y "aquí no he dicho nada "para seguir engañando a incautas y saca nuevos conejos de la chistera y a vivir del cuento..
Que reconozca las mentiras y pida perdón, eso es de honrados, de hombres y de militares, pero ni una de las 3 cosas el farsante este
Sarna con gusto no pica