H. ARENDT Y "OPUS DEI"
¡Qué coincidencia Alejandra que saques a relucir la Alemania de Hitler! y así es, todos los alemanes bien pensantes, cultos, refinados, cristianos católicos y protestantes incluidos en masa apoyaron y sostuvieron aquello.
No sé si sabes algo de filosofía pero si hay alguien que ha llevado sus reflexiones al límite, y pienso no hay mejor examen de porqué pasó lo que pasó en Alemania, es Hannah Arendt. Parece que no leo otra cosa últimamente, pero es que todo lo que dice esta mujer sobre como pudo ser que uno de los países más cultos, más desarrollados, más laboriosos y por el que siento una gran admiración por motivos varios, entre otros ser el "país de la filosofía" pudo llevar a cabo el asesinato en masa de inocentes.
Es un ejemplo extremo, pero en absoluto descabellado comparar el Opus Dei y sus métodos "psiquiátrico-espirituales" de rematar a la gente con la destrucción técnicamente planificada y llevada a cabo de miles de seres humanos por los nazis. Con el problema añadido que tenían estos últimos de como matar más gente en menos tiempo y con el menor gasto de munición posible, estaban en guerra.
La verdad que leyendo a Arendt me doy cuenta de que la mayor parte de la humanidad somos loros de repetición que no nos paramos a pensar en lo que estamos haciendo. La costumbre, lo que todo el mundo hace, lo que vemos a nuestro alrededor, es nuestra norma de conducta. ¿Para qué poner en tela de juicio si todo "parece" que va sobre ruedas?
Lo normal en la ciudad de Pamplona es admitir el "Opus Dei", su universidad, su clínica, su indiscutible influencia de apisonadora inmobiliaria que arrasa y decide incluso la política navarra. Si alguien se opone son cuatro gatos en una esquina y por poco tiempo.
Hornos crematorios no tiene el Opus Dei, pero ¿cuántas han pasado en esa ciudad por la consulta de sus psiquiatras? hasta me atrevería a decir que sería interesante un estudio sobre consumo de medicinas psi en la comunidad foral y comparar con las comunidades no forales. En mis años pamploneses estaba rodeada de grandes consumidoras de todo tipo de productos para dormir, antidepresivos, Haloperidol que no sé ni para que sirve... sólo en mi centro el gasto en estos medicamentos era considerable. La otra persona que consumía era mi madre. Drogas recetadas. Ellos que tanto hablan y persiguen la droga, como un gran mal para la juventud. Pero las drogas oficiales no son mucho mejores, aunque te las recete un médico.
La filósofa a la que me refiero explica la diferencia entre conocer, cuyo fruto es lo que vulgarmente llamamos ciencia, conocimiento acumulado que llena a rebosar nuestras bibliotecas, y pensar, que es reflexionar, hablar consigo mismo, desdoblarse en dos y pararse a examinar lo que uno hace. Esta segunda actividad humana está al alcance de todas las fortunas por supuesto, no hace falta ser un "empollado" de nada para ejercer la capacidad de hablar con uno mismo y reflexionar sobre si los propios actos son correctos o no, con independencia del mundo alrededor, ¿qué pienso de esta decisión que he tomado?
Normalmente el pensar es una asunto marginal para la sociedad ya que como tal beneficia poco a la sociedad. A diferencia del conocimiento que es usado para infinidad de propósitos.
H. Arendt se dió cuenta de que normalmente cuando la sociedad es digamos "normal" en el sentido de que hay unas leyes y unas costumbres aceptables con un mínimo de lógica y sensibilidad, no es tan relevante si la gente piensa sobre sus propios actos, si lleva una vida "examinada", como recomendaba Sócrates. Pero en situaciones extremas como puede ser que en un país se instaure un régimen que "legaliza el asesinato" en masa es cuando como ella dice, las personas que piensan salen del anonimato. El significado político y moral del pensar aflora en aquellos momentos de la historia en que "las cosas se desmoronan, el centro no puede ya sostenerse....cuando los mejores no tienen convicción y los peores están llenos de apasionada intensidad" (Yeats, W.B The second coming)
En esos momentos el pensar deja de ser marginal en las cuestiones políticas. Cuando todo el mundo se deja llevar irreflexivamente por lo que todos los demás hacen o creen, aquellos que piensan son arrancados de su escondite porque su rechazo a participar llama la atención.
En otro lugar, filosofa la Arendt sobre el hecho de que en estos momentos extremos, una Alemania nazi lo es, un "Opus Dei" cuando te topas cara a cara con su persecución y su psiquiatría espúrea también es extremo, resulta que no han sido las gentes "de bien" las que han hecho lo que hoy desde la normalidad juzgamos como "lo que había que hacer". No es la sociedad "bien rangée", por usar la expresión de Simone de Beauvoir, las gentes de "orden" las que dan la nota. Ni mucho menos la religión institucionalizada, no fueron las iglesias las que plantaron cara al nazismo, el propio Pío XII se refugió en el argumento de que podría ser contraproducente para los católicos alemanes sacar a la luz los crímenes de Hitler cuando se lo contaron por vez primera.
Fueron las personas que dijeron "no puedo hacerlo", las que estuvieron a la altura de la situación. La cuestión es que en momentos "raros" como cuando uno después de tiempo se topa con que está viviendo en un mundo sectario, no hay leyes generales a las que acogerse, no hay manual de instrucciones. Es sólo nuestra conciencia, el juicio, la reflexión lo que nos puede salvar. El vivir conmigo mismo, y sentir la amenaza de la autocontradicción o del autodesprecio. El sentir que en el caso de la Alemania nazi, denunciar a alguien por ser judío sería tan contrario a mí como si dijera que dos y dos son cinco. No puedo hacerlo.
Y si denunciara a un inocente me sentiría tan mal que me autodespreciaría, no podría convivir conmigo mismo. Tampoco puedo hacerlo.
Cuando te proponen barbaridades para hacer daño a alguien inocente, es cuando sale a relucir si hay de verdad conciencia o sólo interés. Y los casos extremos nos muestran que sólo por seguir la inercia se puede ser un gran criminal sin proponérselo.
Todos estos temas fueron los que llevaron a H. Arendt a hablar de la banalidad del mal, de lo ridículo que resultaba cada nazi sentado de uno en uno en el banquillo de los acusados, cuando habían vuelto a ser el individuo humano al que supone conciencia y responsabilidad de lo que hace, y ya no había "sistema" en el que ahogar la propia responsabilidad.
Copio un escrito suyo que se puede aplicar salvando las distancias a tanta gente que equivocadamente llamamos "buena" y que hacen posible la crueldad opusina:
..."hablé de la banalidad del mal, y con esta expresión no aludía a una teoría o una doctrina sino a algo absolutamente fáctico, al fenómeno de los actos criminales, cometidos a gran escala que no podían ser imputados a ninguna particularidad de maldad, patología o convicción ideológica de la gente (esto último si puede ser aplicado al "Opus Dei", hay convicción ideológica en la mayoría de los casos), cuya nota distintiva personal era quizás una extraordinaria superficialidad. Sin embargo, a pesar de lo monstruoso de los actos, el agente no era un monstruo ni un demonio y la única característica específica que se podía detectar en su pasado fue algo negativo: no era estupidez sino una curiosa y absolutamente auténtica incapacidad para pensar. Funcionaba en su papel de criminal de guerra, del mismo modo que lo había hecho bajo el régimen nazi: no tenía ni la más mínima dificultad en aceptar un conjunto enteramente distinto de reglas. (Se refiere al nazi Eichmann).
Eichmann sabía que lo que antes era considerado un deber, ahora era definido como un crimen, y aceptó ese nuevo código de juicio como si no fuera más que una regla de lenguaje distinta. A su provisión de estereotipos había añadido algunas frases nuevas...
Tópicos, frases hechas, adhesiones a lo convencional, códigos estandarizados de conducta y expresión cumplen la función socialmente reconocida de protegernos frente a la realidad... si siempre fuéramos sensibles a los requerimientos de la realidad acabaríamos exhaustos. Eichmann se distinguía únicamente en que pasó por alto todos esos requerimientos.
Esa total ausencia de pensamiento atrajo mi atención..."
Preguntas: ¿Es posible hacer el mal sin ser malo? ¿Es posible hacer grandes crímenes sin ni siquiera habérselo propuesto, sin interés ni volición? ¿no es la "maldad" una condición necesaria para hacer el mal? los que vivimos en 2016 y conocemos algo la historia y vida, podemos responder ¡vaya que si es posible!
Las personas que incluso sin estudios, que tampoco se las daban de misa y comunión diarias (tan propio de España como garantía de irreprochabilidad moral hasta hace no tanto), pero dijeron sin más "no puedo hacerlo" fueron las más fiables.
No sé si sabes algo de filosofía pero si hay alguien que ha llevado sus reflexiones al límite, y pienso no hay mejor examen de porqué pasó lo que pasó en Alemania, es Hannah Arendt. Parece que no leo otra cosa últimamente, pero es que todo lo que dice esta mujer sobre como pudo ser que uno de los países más cultos, más desarrollados, más laboriosos y por el que siento una gran admiración por motivos varios, entre otros ser el "país de la filosofía" pudo llevar a cabo el asesinato en masa de inocentes.
Es un ejemplo extremo, pero en absoluto descabellado comparar el Opus Dei y sus métodos "psiquiátrico-espirituales" de rematar a la gente con la destrucción técnicamente planificada y llevada a cabo de miles de seres humanos por los nazis. Con el problema añadido que tenían estos últimos de como matar más gente en menos tiempo y con el menor gasto de munición posible, estaban en guerra.
La verdad que leyendo a Arendt me doy cuenta de que la mayor parte de la humanidad somos loros de repetición que no nos paramos a pensar en lo que estamos haciendo. La costumbre, lo que todo el mundo hace, lo que vemos a nuestro alrededor, es nuestra norma de conducta. ¿Para qué poner en tela de juicio si todo "parece" que va sobre ruedas?
Lo normal en la ciudad de Pamplona es admitir el "Opus Dei", su universidad, su clínica, su indiscutible influencia de apisonadora inmobiliaria que arrasa y decide incluso la política navarra. Si alguien se opone son cuatro gatos en una esquina y por poco tiempo.
Hornos crematorios no tiene el Opus Dei, pero ¿cuántas han pasado en esa ciudad por la consulta de sus psiquiatras? hasta me atrevería a decir que sería interesante un estudio sobre consumo de medicinas psi en la comunidad foral y comparar con las comunidades no forales. En mis años pamploneses estaba rodeada de grandes consumidoras de todo tipo de productos para dormir, antidepresivos, Haloperidol que no sé ni para que sirve... sólo en mi centro el gasto en estos medicamentos era considerable. La otra persona que consumía era mi madre. Drogas recetadas. Ellos que tanto hablan y persiguen la droga, como un gran mal para la juventud. Pero las drogas oficiales no son mucho mejores, aunque te las recete un médico.
La filósofa a la que me refiero explica la diferencia entre conocer, cuyo fruto es lo que vulgarmente llamamos ciencia, conocimiento acumulado que llena a rebosar nuestras bibliotecas, y pensar, que es reflexionar, hablar consigo mismo, desdoblarse en dos y pararse a examinar lo que uno hace. Esta segunda actividad humana está al alcance de todas las fortunas por supuesto, no hace falta ser un "empollado" de nada para ejercer la capacidad de hablar con uno mismo y reflexionar sobre si los propios actos son correctos o no, con independencia del mundo alrededor, ¿qué pienso de esta decisión que he tomado?
Normalmente el pensar es una asunto marginal para la sociedad ya que como tal beneficia poco a la sociedad. A diferencia del conocimiento que es usado para infinidad de propósitos.
H. Arendt se dió cuenta de que normalmente cuando la sociedad es digamos "normal" en el sentido de que hay unas leyes y unas costumbres aceptables con un mínimo de lógica y sensibilidad, no es tan relevante si la gente piensa sobre sus propios actos, si lleva una vida "examinada", como recomendaba Sócrates. Pero en situaciones extremas como puede ser que en un país se instaure un régimen que "legaliza el asesinato" en masa es cuando como ella dice, las personas que piensan salen del anonimato. El significado político y moral del pensar aflora en aquellos momentos de la historia en que "las cosas se desmoronan, el centro no puede ya sostenerse....cuando los mejores no tienen convicción y los peores están llenos de apasionada intensidad" (Yeats, W.B The second coming)
En esos momentos el pensar deja de ser marginal en las cuestiones políticas. Cuando todo el mundo se deja llevar irreflexivamente por lo que todos los demás hacen o creen, aquellos que piensan son arrancados de su escondite porque su rechazo a participar llama la atención.
prisioneros de los nazis |
En otro lugar, filosofa la Arendt sobre el hecho de que en estos momentos extremos, una Alemania nazi lo es, un "Opus Dei" cuando te topas cara a cara con su persecución y su psiquiatría espúrea también es extremo, resulta que no han sido las gentes "de bien" las que han hecho lo que hoy desde la normalidad juzgamos como "lo que había que hacer". No es la sociedad "bien rangée", por usar la expresión de Simone de Beauvoir, las gentes de "orden" las que dan la nota. Ni mucho menos la religión institucionalizada, no fueron las iglesias las que plantaron cara al nazismo, el propio Pío XII se refugió en el argumento de que podría ser contraproducente para los católicos alemanes sacar a la luz los crímenes de Hitler cuando se lo contaron por vez primera.
Fueron las personas que dijeron "no puedo hacerlo", las que estuvieron a la altura de la situación. La cuestión es que en momentos "raros" como cuando uno después de tiempo se topa con que está viviendo en un mundo sectario, no hay leyes generales a las que acogerse, no hay manual de instrucciones. Es sólo nuestra conciencia, el juicio, la reflexión lo que nos puede salvar. El vivir conmigo mismo, y sentir la amenaza de la autocontradicción o del autodesprecio. El sentir que en el caso de la Alemania nazi, denunciar a alguien por ser judío sería tan contrario a mí como si dijera que dos y dos son cinco. No puedo hacerlo.
Y si denunciara a un inocente me sentiría tan mal que me autodespreciaría, no podría convivir conmigo mismo. Tampoco puedo hacerlo.
Cuando te proponen barbaridades para hacer daño a alguien inocente, es cuando sale a relucir si hay de verdad conciencia o sólo interés. Y los casos extremos nos muestran que sólo por seguir la inercia se puede ser un gran criminal sin proponérselo.
Todos estos temas fueron los que llevaron a H. Arendt a hablar de la banalidad del mal, de lo ridículo que resultaba cada nazi sentado de uno en uno en el banquillo de los acusados, cuando habían vuelto a ser el individuo humano al que supone conciencia y responsabilidad de lo que hace, y ya no había "sistema" en el que ahogar la propia responsabilidad.
Copio un escrito suyo que se puede aplicar salvando las distancias a tanta gente que equivocadamente llamamos "buena" y que hacen posible la crueldad opusina:
..."hablé de la banalidad del mal, y con esta expresión no aludía a una teoría o una doctrina sino a algo absolutamente fáctico, al fenómeno de los actos criminales, cometidos a gran escala que no podían ser imputados a ninguna particularidad de maldad, patología o convicción ideológica de la gente (esto último si puede ser aplicado al "Opus Dei", hay convicción ideológica en la mayoría de los casos), cuya nota distintiva personal era quizás una extraordinaria superficialidad. Sin embargo, a pesar de lo monstruoso de los actos, el agente no era un monstruo ni un demonio y la única característica específica que se podía detectar en su pasado fue algo negativo: no era estupidez sino una curiosa y absolutamente auténtica incapacidad para pensar. Funcionaba en su papel de criminal de guerra, del mismo modo que lo había hecho bajo el régimen nazi: no tenía ni la más mínima dificultad en aceptar un conjunto enteramente distinto de reglas. (Se refiere al nazi Eichmann).
Eichmann sabía que lo que antes era considerado un deber, ahora era definido como un crimen, y aceptó ese nuevo código de juicio como si no fuera más que una regla de lenguaje distinta. A su provisión de estereotipos había añadido algunas frases nuevas...
Tópicos, frases hechas, adhesiones a lo convencional, códigos estandarizados de conducta y expresión cumplen la función socialmente reconocida de protegernos frente a la realidad... si siempre fuéramos sensibles a los requerimientos de la realidad acabaríamos exhaustos. Eichmann se distinguía únicamente en que pasó por alto todos esos requerimientos.
Esa total ausencia de pensamiento atrajo mi atención..."
Preguntas: ¿Es posible hacer el mal sin ser malo? ¿Es posible hacer grandes crímenes sin ni siquiera habérselo propuesto, sin interés ni volición? ¿no es la "maldad" una condición necesaria para hacer el mal? los que vivimos en 2016 y conocemos algo la historia y vida, podemos responder ¡vaya que si es posible!
Las personas que incluso sin estudios, que tampoco se las daban de misa y comunión diarias (tan propio de España como garantía de irreprochabilidad moral hasta hace no tanto), pero dijeron sin más "no puedo hacerlo" fueron las más fiables.
Comentarios
El Opus hace un uso concentrado y programado de la banalidad del mal. Hanna Arendt explica que el nazismo fue posible por el fuerte sentimiento de obediencia que tenía el pueblo alemán, que podría interiorizar "obedezco, luego existo". El Opus hace un uso intensivo de ese sentimiento de obediencia, induciendo a sus socios a que interioricen: "obedezco al Opus, luego hago la voluntad de Dios".
El Papa viaja a México el próximo viernes 12 de febrero, hasta el día 18. Acude a los sitios más violentos y peligrosos.
Hace unos días el régimen opusino quiso recordar el peligro que corre el Papa, con una entrevista exclusiva, que sólo recoge la opusina La Gaceta:
'El Papa es objetivo de los terroristas'
Así lo ha confirmado Lamberto Giannini, director de la Oficina Antiterrorista de Italia, que en la actualidad se encarga de coordinar la vigilancia antiterrorista en el país.
En una entrevista concedida a El Periódico”
http://gaceta.es/noticias/papa-objetivo-los-terroristas-26012016-1150
25 DE ENERO DEL 2016
“Lamberto Giannini, el policía italiano que dirige la Oficina Antiterrorista de Italia,
-Tras los atentados de París, ¿el Papa y el Vaticano están más a riesgo de atentados?
-Es evidente que el carisma de su persona y la situación actual lo hace un objetivo potencial. En varias ocasiones, hemos encontrado amenazas en internet. Dicho esto, hasta la fecha, pruebas de una amenaza inminente no hay.”
http://www.elperiodico.com/es/noticias/internacional/papa-objetivo-los-terroristas-4844030
Uno de los sitios más peligrosos que visita el Papa es el norte de México, con violentos narcotraficantes. En estas últimas semanas el régimen opusino ha movido el caso de un poderoso mexicano de esa zona. Ha detenido al ex presidente del partido gubernamental PRI, Humberto Moreira, con acusaciones de lavado de dinero, posible relación con narcos, etc. Luego le ha puesto en libertad. Y finalmente han dicho que no había ningún motivo para estas actuaciones. Humberto Moreira residía en San Cugat del Valles, como Isidre Fainé, municipio en que el Opus tiene colegios y fuerte presencia de alto nivel. Extraña operación en vísperas de la visita del Papa a México.
http://politica.elpais.com/politica/2016/02/09/actualidad/1455025352_535613.html
Los dirigentes del Opus están actualmente en una situación de fortísimo stress, por el juicio por traición en el Vaticano contra el cura del Opus Vallejo Balda, que dicen contaba con su “acompañamiento espiritual”, y que hasta grabó en secreto al Papa. Tanto stress que incluso sus dos jefes máximos, Echevarría y Ocariz, llevan desaparecidos desde noviembre. El juicio se celebra dentro de unos días, y no sabemos cómo decidirán solventarlo los dirigentes efectivos del Opus.
En 1981 los dirigentes del Opus también estaban en una situación de fuerte stress. Estaba en juego que el Papa aprobara la nueva configuración del Opus como Prelatura Personal, asunto que consideraban decisivo.
El 13 de mayo de 1981 el Papa Juan Pablo II sufrió el atentado ejecutado por Ali Agca. No se ha esclarecido. Lo único claro es que Ali Agca era un sicario perteneciente a la ultraderecha turca al que alguien utilizó. Ali Agca ha hecho distintas y contradictorias declaraciones. En las últimas acusaba a personalidades del Vaticano.
El Opus en un libro de 2012 hace una sorprendente revelación. Hablando de su lucha porque el Papa aprobara que fueran una Prelatura Personal:
“El 4 de abril de 1981 el Cardenal Baggio entregó al Papa el resultado de aquellos meses de estudio. En una audiencia posterior, Juan Pablo II manifestó al Prefecto de la Congregación que le respondería el 16 de mayo. Pero no pudo hacerlo: el 13 de mayo, festividad de Nuestra Señora de Fátima, sufría un atentado en la Plaza de San Pedro.”
“Alvaro del Portillo Un hombre fiel” Javier Medina Bayo.
http://iebsm.net/06%20Opus%20Dei/03%20A.%20Portillo/UnHombreFiel.htm
No sé si esta información del Opus está corroborada por otras fuentes.
El Opus no dice cual era la decisión del Papa que el atentado frustró. Por lo que dice el Opus se deduce que el Papa cambió la decisión. El Papa fue ingresado en el hospital y luego regresó al Vaticano. Y sufrió una recaída, por una infección, y en julio de 1981 volvió al hospital. Dice el Opus en ese libro:
“Pocos días después, el Papa convocó al Cardenal Baggio desde el hospital, para comunicarle que antes del atentado había examinado la documentación de la Comisión técnica paritaria, y deseaba que prosiguiera el estudio de la transformación del Opus Dei en Prelatura personal. Para eso, quería que se constituyera una comisión especial, al más alto nivel, que examinase las conclusiones de la comisión paritaria”
Tiempo después el Opus consiguió que el Papa le otorgara la Prelatura Personal que tanto ansiaba. Si el Papa cambió su decisión después del atentado, como se desprende de lo que dice el Opus, es lógico pensar que la que tenía previsto primero no era acorde a lo que finalmente consiguió el Opus con gran satisfacción.
Es evidente que el principal enemigo del Papa es Judas, que está dentro de la Iglesia. Solo o en compañía de escribas, fariseos y otras autoridades. Y que la técnica habitual es atribuir los atentados a cualquier falsa bandera, islamistas, narcos, o lo que sea.
Esperemos que a ningún Judas se le ocurra atentar contra el Papa o que Dios mediante no lo consiga.
“XIII reunión del Consejo de Cardenales: Importancia de la sinodalidad y de una saludable descentralización
comenzada ayer lunes, 8 de febrero y finalizada esta mañana.
se procedió a la lectura ''final'' de las propuestas del Consejo a propósito de los dos nuevos dicasterios de los que se habló con anterioridad: ''Laicos, familia y vida'' y ''Justicia, paz y migraciones''. Las propuestas han concluido y se han sometido a la decisión del Santo Padre.”
http://www.news.va/es/news/xiii-reunion-del-consejo-de-cardenales-importancia
Laicos, familia y vida, organismos dominados por el Opus, algo que consideran de su privativa competencia. La reforma puede hacerles perder el poder. Sería un mazazo para el Opus. Asunto trascendental.
Esta reforma la anunció el Papa por sorpresa en medio del sínodo de los obispos en octubre pasado. La respuesta del Opus pudo ser el caso del polaco separata catalán, sobreactuado gay, y el Vatileaks 2 –Opusleaks- con las filtraciones del opusino Vallejo Balda. Plan frustrado con su detención y juicio.