LA BANDA DE LOS CUATRO

 Me he informado mejor sobre Marine, no tiene ganas de ser princesa. Está cómoda en su puesto de diputada, su partido recibe las subvenciones correspondientes, al haber obtenido más del 5% tiene derecho a que el Estado le devuelva el costo de la campaña. De eso va la política, dinero para campañas y publicidad.

No me gustó que empezara el debate con el saludo de rigor al globalismo, cuando ella no lo es, es nacionalista: "muy bien Ucrania, sr Macron". No Marine, fatal Ucrania, como todas las guerras imperialistas en las que ademas de atropellar paises pretenden embarcar y obtener el consenso de la población. Pero hoy si no estás con el consenso global no estás. 

 

De todas formas siendo una política con su historial dudoso, en frente tiene a un mentiroso compulsivo y vanidoso. Que solo hace de Robin Hood al revés. 

Cuando presentó su candidatura declaró 500.000 euros de patrimonio, pobre de pedir para un negociante  de su nivel en Rotschild, donde ha cerrado contratos importantes de miles de millones, le han investigado y no se sabe donde los ha escondido. En particular 3 que reconoce ganó durante sus años en ese banco. Si el poder mundial está contigo, da igual. Por mucho menos dinero desviado se cargaron al candidato Fillon en 2017. 

Aquí los que se preguntan ¿quiere Marine de verdad ser Presidenta?

 Como la media de politicos españoles, el asiento en Cortes es un modus vivendi en el que piensa jubilarse sin necesidad de despeinarse con los "fregados" de presidir la República. Así que si fraude electoral hubo, OK, pas de problème,  como pasó en Madrid cuando Pilar Baselga and cia descubrieron irregularidades en las elecciones autonómicas que perjudicaban al PP y VOX y los primeros en decir, "no queremos saber nada", fueron los propios PPs y VOXs.

https://odysee.com/@apellidoobligatorio:9/la-proclamaci%C3%B3n-de-la-asamblea-de:0

El periodista  que ha realizado la serie documental sobre los millones missing de Macron Rothschild gate. 

 

Don Mercedes y  LA BANDA DE LOS CUATRO

 

A finales de mayo de 2017, el Papa Francisco redujo definitivamente al estado laico al sacerdote italiano Don Mauro Inzoli, condenado en 2016 por la justicia a casi cinco años de prisión por haber abusado sexualmente de cinco adolescentes.

Esta decisión la hizo pública el miércoles 28 de junio Monseñor Daniele Gianotti, obispo de la diócesis de Créma, donde ofició el ex sacerdote más conocido como "Don Mercedes", en referencia a sus gustos de lujo.

El lector desinformado de “La Croix” habrá recordado sobre todo un escándalo más vinculado a la pedofilia.

El lector informado de “L'envers du décor” también ve un triste episodio más de una interminable serie de escándalos que han salpicado la historia del movimiento Comunión y Liberación desde su creación. En efecto, lo que no dice la prensa francesa es que don Inzoli también era presidente del Banco de Alimentos y que este establecimiento había sido fundado en 1989 por Danilo Fossatti y don Luigi Giussani, fundador del movimiento Comunión y Liberación. El Banco de Alimentos es parte de la "Compania delle Opere" (CDO) que es la rama económica y financiera del movimiento, calificada modestamente como "economía social y solidaria" y que de hecho mueve casi el 5% del PBI italiano. .

Este vínculo permanente entre este movimiento de inspiración religiosa y el empresariado ha sido la fuente permanente de escándalos revelados desde 2007 cuando los jueces de la operación "Manos limpias" sacaron a la luz el informe "Why not?", en referencia a una agencia de trabajo temporal en el sur de Italia.

 

En 2012 CyL pidió se iniciara el proceso de beatificación de don Giussani, su fundador fallecido en 2005

 Desde entonces siguen y no paran de salir casos de corrupción cuando se habla de Roberto Formigoni, presidente de la región de Lombardía, miembro de los "Memores Domini", (Especie de nume de CyL) un movimiento opaco e híbrido mitad laico, mitad consagrado por los votos monásticos. y se supone que es la élite de Comunión y Liberación (En 2019 Formigoni condenado a 5 años y 10 meses de cárcel por corrupción en el caso del hospital San Rafael) . Más recientemente, el escándalo de la cooperativa "La Cascina", vinculada a la mafia central en Roma y que supuestamente se ocupaba desinteresadamente del destino de los inmigrantes en los campos de refugiados, asestó un nuevo golpe a la imagen de un movimiento que los italianos ahora apodan "Comunión y Facturación". Sería tedioso repasar en detalle todos estos casos, la corrupción ligada a la organización de la Expo Universal, las retrocomisiones en varios contratos públicos, etc.

 

Don "Mercedes", hoy reducido al estado laico por el Papa

 

Así que volvamos para entender los fundamentos de CyL, a las palabras de “Don Mercedes” en la inauguración del almacén del Banco de Alimentos. Se refería a don Luigi Giussani, el fundador del movimiento que goza de un indiscutible culto interno, cuyas declaraciones son citadas sin discernimiento, cuyas libros, aunque incomprensibles, deben ser estudiadas por adolescentes en grupos de adoctrinamiento llamados "escuelas comunitarias". Es esta gozosa admiración por la personalidad del fundador la que expresó Mauro Inzoli en su momento:

“Primero, el reconocimiento.

Ninguno de nosotros se hubiera movido, ninguno de nosotros hubiera tomado la iniciativa, si antes no hubiéramos reconocido que en nuestra propia vida alguien tomó la iniciativa, nos deseó lo mejor; y nos deseó suerte en la realidad concreta de la vida, nos cuidó.

Fue la primera mirada que nos hizo imaginar y vislumbrar una realidad que está dentro y por encima de nosotros, por eso nos movilizamos cuando cumplimos con las demandas de otra persona". 

Desde sus orígenes, Comunión y Liberación ha excluido cualquier debate interno, siendo la única y última referencia el pensamiento, los escritos e, incluso en el presente caso, la mirada de Luigi Giussani, fallecido en 2005. Esta mirada, que habría sido lo suficientemente fuerte como para movilizar, o eso afirma, Mauro Inzoli.

El sucesor y portavoz de Luigi Giussani, don Julián Carrión (hoy dimitido por las nuevas normas de Francisco), once años después de su muerte, se atrevió a manifestar su personalidad publicando a su vez un libro "La bellezza disarmata", destinado a retomar y ampliar la obra de su maestro.

La publicación de esta obra fue obviamente un gran acontecimiento en la "banda de los cuatro", el cártel de movimientos que forman y que son "la Iglesia dentro de la Iglesia": los Focolares, los Neocatecumenales, Comunión y Liberación y el Opus Dei. 

Los cuatro, como si de los operadores de telefonía se tratara,  se ponen de acuerdo sobre su cuota de mercado, se vigilan, se espían y se copian mutuamente. Julian Carrión, por lo tanto, aprovechó la ventaja sobre los otros tres creando el "buzz" en torno a su libro "la bellezza disarmata" e invitando a representantes de otros movimientos que no podían dejar de comentar en una sala llena a rebosar de público.  Fue  el 20 de junio de 2016 en el Teatro Manzoni de Monza.

El vicario general del "Opus Dei" en Italia, don Matteo Fabbri, expresó  en un discurso que quedó en la teoría,  su plena coincidencia con Julián Carrión y el pensamiento de don Giussani para marcar su diferencia refiriéndose a José María Escrivá Balaguer, fundador de Opus. Después de decir que cada página de Julián Carrión estimulaba su pensamiento y expresaba puntos de vista notables, debía encontrar el tono adecuado para una comunicación que le permitiera establecer un paralelismo relevante entre san José María y don Luigi Giussani, del que todos los seguidores esperan con impaciencia la canonización, y recuperar   el retraso que llevan con respecto al "Opus Dei".

Apoyándose en el pensamiento abstracto de Giussani que defendió siempre la primacía de la razón y de su razón ["La ragione è immanente a tutta l'unità del nostro io"], Matteo Fabbri, sin más justificación, consideró que se trataba de mucho más que de un  pensamiento brillante: un verdadero carisma  “en sentido literal”.

Había soltado la palabra clave. 

Don Fabbri no lo justifica: lo afirma. Para terminar con cualquier discusión repite: Giussani recibió una irrupción del Espíritu Santo, un don para la edificación de la Iglesia, dice, "esta fuerza que viene del Espíritu Santo que es fuente de luz e inspiración. Es una mirada que resiste la prueba del tiempo. Y esta mirada no es la de un vidente: esta mirada es la de un profeta”. Caso cerrado.

Una mirada  que influyó tanto en Mauro Inzoli…

Para que quede claro hay que decir que Giussani es como San José María Escrivá, el fundador del "Opus Dei".  Matteo Fabbri se pone lírico y habla de “carisma en la historia”: “aceptar, recibir y transmitir un “carisma en la historia”, como por supuesto hicieron Josemaría el español y Luigi el italiano, es reconocer los signos de los tiempos". 

Y  el público ganado para la causa de antemano aplaude enfervorizado.

Sin embargo, era necesario retomar al final de la presentación la ventaja en beneficio del Opus Dei. Por esto Don Fabbri recordó la exigencia de santidad del movimiento: “queremos ser santos”. En el Opus Dei, este voluntarismo viene del hombre siempre con un toque de orgullo: nunca dicen: “queremos ser santificados”. Sino: “queremos ser santos”. “Así, a pesar de todo, el carisma se convierte en historia en nuestra vida, en la vida de cada uno de nosotros” exclama don Fabbri y cita a Escrivá Balaguer para terminar su intervención en medio del aplauso del público asistente.

Epílogo:

Después de este acto, business as usual: quieren ser santos, pero también tienen que seguir firmando contratos, haciendo pequeños componendas. C'est la vie… 

En este tipo de encuentros, apenas se habla de los beneficiarios del Banco de Alimentos, ni de los migrantes que recibe Italia:  mejor quedarse en generalidades y bellas fantasías.

La caridad  desarmada.