Coloquios nocturnos en Jerusalén

 

En Cañada de las Fuentes, en la foto, nace el río Guadalquivir.

Ya tengo el libro del cardenal Martini. El entrevistador y el entrevistado son los dos jesuitas, el entrevistador se dedica a los niños de la calle en Rumanía y Moldavia. El entrevistado ha sido arzobispo de Milán de 1980 a 2002. Es por su enfermedad de Parkinson, dicen, por lo que no fue elegido papa, a pesar de estar nominado. "Coloquios nocturnos en Jerusalén", editado por ed. San Pablo. A los 75 años se retiró a Jerusalén, al instituto biblico que su orden tiene allí. Lo poco que he hojeado me parece un hombre de fe sincera y entre tanto aprovechado de llevar el adjetivo católico, una persona que vive lo que cree.

Ayer en el programa Regreso al futuro de canal sur pusieron un reportaje sobre la muerte de Juan Pablo I. No mencionaron las razones de los que sospechan que no fue un infarto, con base en las contradicciones del Vaticano y en los sucesos de aquellos días. No nombraron a Yallop ni a Zizola, ni se habló de las finanzas-mafia vaticanas dirigidas por Marckinkus. Parecía un reportaje al estilo opus: pura propaganda, todo es bello y maravilloso y el que diga lo contrario no es científico y además ningún juez lo ha demostrado... (Si tuviéramos que esperar a que una sentencia judicial dictaminara que el opus es una mafia y una secta, llegaba el juicio final). No se pusieron seriamente los datos sobre la mesa, una lástima. Se me escapa quien puede haber en Canal Sur (televisión oficial de la comunidad autónoma andaluza, socialista desde su creación) interesado en ocultar estas verdades sobre la iglesia católica tan necesitadas de darles publicidad.

La vocación desde la eternidad. No me lo dijeron exclusivamente a mí, es una constante en la predicación general de los curas y de las numerarias. Se dice a cada uno, y se dice en las meditaciones y en las charlas dirigidas a muchos. El tema de la "predestinación" es otra de las tiradas de la moto de fundadores como Escrivá. Está en Efesios 1, 4. Evidentemente San Pablo no se dirigía con estas palabras a los miembros del opus: "El nos ha elegido en Cristo antes de crear el mundo, para que fuésemos santos e irreprochables a sus ojos." Escritas en un contexto escatológico, de primeros cristianos, muy cercanos a la muerte de Jesús y con una creencia muy viva en su segunda venida. No había nacido aún la iglesia romana, católica, apostólica que nos recordaba Alvaro el otro día. Era otro mundo previo a la iglesia jerárquica, con esa separación fieles-pueblo y las rigideces características. Ni siquiera sé si para entonces Pedro había llegado a Roma, de donde consta que no fue obispo por cierto.

"Jesús es el Señor", esta era la confesión de fe de los primerísimos cristianos... y hay que ver lo que se ha alargado con el curso de los siglos hasta formar el credo nicenoconstantinopolitano... Y hasta la declaración de la infalibilidad papal en el siglo XIX...