PECES KAMIKAZES

No sé si se nos escapa algo con la salud del Papa.
El encuentro por la paz israelíes - palestinos refleja otras preocupaciones mundiales
que no hemos visto en los dos anteriores pontífices. Parece fácil rezar juntos por la paz, pero no debe serlo cuando en tantos años de conflicto a nadie se le había ocurrido y no se había hecho. Y es elemental si se piensa despacio.

Hemos vivido años de una iglesia muy vuelta hacia problemáticas propias. Se respiran otros aires. Aunque las "sectillas" sigan por ahí.

 Como si dejara hacer, él tiene y demuestra sus propios intereses y estilo.  Es poco y es mucho después de tantos años de hierro.
No me parece que el encuentro de este domingo de Pentecostés estuviera en la agenda OD.

En cuanto a las columnas salomónicas que comentaba, he hilado con otro tema sobre la info que poseen. Debe de estar escrita en algún lugar, porque no hay cerebro que pueda guardar tanto sobre tanta gente. Y eso antes de que hubiera ordenadores y existiera la informática. La posesión de info descomunal no es de ahora. Además se añade que los cambios de casa y de ciudad de las numerarias son constantes, salvo excepciones.

Con el paso del tiempo caí en lo ingenua que fui al pensar que me anotaba un triunfo apostólico cuando llevé a alguna compañera de trabajo al centro. Estaba en la luna.

Pongamos que en el tiempo que estuve de nume, hice apostolado y conseguí llevar a cuatro.

 Todas menos una ya eran conocidas de ellas. Dos porque en el pasado juvenil habían sido tratadas, a saber porqué "dejadas" o ellas "idas".  Ninguna de la dos partes me lo dijo con sinceridad, las opusinas directoras debían de tener el diagnóstico escrito en algún lado. No mostraron interés por ellas, por algo sería.

Pero las apostolizadas tampoco me dijeron con claridad lo que pasaba, imagino que me verían tan entusiasta que vendrían por cortesía conmigo al centro, por no hacerme un feo. Otra tercera, la tenían localizada vía marido. Interesante mujer, pero sabían que ideológicamente no iban a poder con ella, por lo tanto el trato era diplomático. Yo era la medio tonta que me ilusionaba con las conversiones. Cuando el pescado estaba vendido desde el primer minuto.

De primeras cuando entraba en el centro con mi "amiga" no sabían, pero hechas las presentaciones, habría consultas. En algún caso, fácil si mi "amiga" era pariente lejana de alguna opus, no hacía falta ni llamar a Granada. En otros casos quizás había que consultar archivos más polvorientos.

Poca gente de mi edad y condición les debe de quedar sin clasificar y etiquetar en este país llamado España.

Peces "kamikazes", entrenados para pescarse solos.

Se hacen de nuevas pero saben más de lo que aparentan sobre los pececitos que se acercan a su red.