Papagayos

No sé si lo habréis observado, por un azar he caído en un blog opusino que parece ser ha nacido para contrarrestar otros blogs inadecuados. Y la idea que me ha venido a la mente es este magnífico ave que pongo hoy en pantalla. Sobran explicaciones.

Encantada de saber que un tal Antonio Cazorla se dirige a mí.

No tengo certeza de si Camps, Costa... toda esta gentecilla del PP valenciano son Opus, pero el corte del traje, la carilla, la sonrisita y en general el aura de niños bien de colegio más que bien lo tienen. Si algún lector de la zona de Valencia pudiera aportar datos se lo agradeceríamos...

En cuanto al tufillo PSOE del blog que me achaca Antonio Cazorla, que reduccionismo tan imbécil... a ese partido como a ninguno le debo nada. Si acaso algún disgusto por no tener enchufes en él.

¿Este es el nivel de argumentación racional de la "mis contrincantes"?

Seguimos con la soberbia que me caracteriza como la gran baza: ¿Y vosotros quién os creeis que sois para llegar aquí y soltar esa opusmajadería? la directora de la delegación de Granada no lo habría hecho mejor si le hubiera dado la oportunidad para una de sus sesiones de lavado cerebral.

No tengo ni idea de si lo hago mejor que todos los cardenales y el papa juntos. Sé y no ne callo lo que sé. ¿Y tú qué? ¿consultando siempre a los cardenales y el papa para tomar tus decisiones importantes?

Interesante lo de la iglesia apoyándose en Opus para contrarrestar a otras iglesias cristianas. En la medida en que la iglesia se ve a sí misma como una institución política supongo que harán eso. El opus tiene sus raíces históricas en la guerra civil española, a pesar de las actuales"coreografías solidarias", y una de las grandes lacras que el catolicismo español ha tenido es esa mezcla de por el "poder hacia Dios" o ¿"por Dios hacia el poder"?.

No corren vientos favorables, al parecer, para pedir explicaciones a la "iglesia oficial". Si hubo persecución religiosa del 36 al 39 habría que hacer un análisis de "los modos de cría del anticlericalismo".

¡Qué bueno lo de que es un imposible criticar al opus dei! No me digas, ¿y esa verdad metafísica de donde la sacas?

En cuanto a Concepción, tú añades un argumento interesante: no valgo ni aquí ni allí. Ya, pero el hecho es que a pesar de no valer, me tuvieron de esclava, haciendo interesantes trabajos de contable, enfermera , profesora, "charlista y charlera" sin cobrar un solo duro y recibiendo correcciones fraternas y críticas de todas las numerarias que valen tanto que no hacen nada. Por eso tienen tiempo de fijarse en los asuntos trascendentes como una manga dos milímetros más corta, unas piernas estiradas en la tertulia, o mi manera de moverme y la velocidad a la que lo hacía.

Es la única verdad que he escuchado de labios opusinos: no valía para el opus. Ni siquiera fueron capaces de decirme esta verdad: "Ana que no te enteras, que no has entendido de qué va esta fiesta."

Cuando me enteré sólo un poco (en 2002 no sabía prácticamente nada) dí tal salto que no me volvieron a ver el pelo del susto que me llevé. Efectivamente cuando yo escuchaba a una supernumeraria durante varias horas seguidas contarme sus problemas matrimoniales o familiares, no valía para ir seguidamente a contar aquello en Granada y burlarme como hacen ellas. No valgo para traicionar los sentimientos de la gente, no tengo esa madera, encima de que estaba perdiendo miserablemente el tiempo en vez de leer, viajar, conocer el mundo, escribir, sentía una satisfacción de hacer algo por alguien: escuchar.

Escuchar charlas de supernumerarias toda una tarde una detrás de otra puede ser un trabajo alienante. No tengo formación de psicóloga, pero es lo que hice muchas horas de mi vida, ser una oreja atenta e interesada de personas que necesitaban desahogarse. Como tambén hice de enfermera de numerarias que necesitaban atención especializada. Hay numerarias que están francamente mal, enfermas de la psique de verdad, a esas no las van a poner en los folletos de propaganda, pero yo las he conocido y he convivido con ellas. También me llevaban tiempo todas las "conferencias cuaresmales" que impartí.

Si realmente hubiera sido la ambición la que me sacó de allí, habría dado el salto antes.

Esa es mi gran paradoja, siendo el opus el colocadero eficaz por antonomasia en Pamplona ¡yo no estaba colocada! jamás lo estuve. Me salvó que esas tareillas opusianas no me llenaban. No eran suficientes. Necesitaba estudiar, leer, aprender. Estaba muy bien escuchar a las supernumerarias y organizar los círculos y ser la directora de san Gabriel o la secretaria de las agregadas, todo esto son galones de lo bajo de la escala, como cabo o sargento. Te da un "plus", pero ese plus no me valía, y es normal que yo buscara otros horizontes.

Jamás me quejé de no tener becas para estudiar teología o hacer una tesis como veía que tenían tantas numerarias. Nunca me presenté en la delegación reclamando ningún derecho. Tragué, tragué y tragué el ninguneo.

Sé que si a mí me ha tocado soportarlo como numeraria del opus, hay muchas mujeres en este país que como yo han sido educadas para la servidumbre. Efectivamente, las mujeres no valemos para nada pero acabamos sacando las castañas del fuego en las familias cuando hay un cargo de enfermos/as, y allí donde estamos, porque nos han enseñado a "dar sin recibir nada a cambio".

De ahí que nos cuadrara de maravilla el opus, fue una continuación de los "no derechos", "no libertad", "no contamos contigo en lo serio". Sólo contamos para "les corvées" que dicen los franceses.