EL JUDIO JESÚS

 No estoy dispuesta a que me basurees el blog con anónimos repitiendo barbaridades, quiero verdades. Por eso me la he jugado. 

El trasfondo económico del asunto.

Una médico de urgencias que trabaja en Menorca da testimonio de que en las alturas no están dispuestos a saber qué está pasando tras la administración de. Sanción al canto por desvelar los secretos de la "casa", un hospital público  oculta información de interés. 

Denuncia la doble vida: la cosa esa para  el pueblo, "a mis hijos que no los toquen y a mí tampoco". En el trabajo soy uno y en mi casa otro. Veremos cuánto dura la broma del desdoblamiento.

 El judío Jesús

¿Cuándo el reformador Jesús de Nazaret se transformó en el fundador de una nueva religión? Judaísmo y  cristianismo se fueron separando  durante varios siglos. La devaluación del judío es uno de los rasgos identificativos de la joven iglesia. Hasta hoy no hemos superado la ruptura.

De Marie Wildermann


   





“Cuando era niña, Jesús era alguien que había sido cruelmente clavado en una cruz, cruz que se veía por todas partes y que no tenía nada que ver conmigo por ser judía. No fue hasta mucho después que descubrí que Jesús fue judío y que  es el vínculo entre el judaísmo y el cristianismo. Entiendo que Jesús es una personalidad destacada: un judío, un rabino peregrino que quiso transmitir el bien, que quiso romper viejas estructuras ”, dice la artista Ilana Lewitan.

"Jesús a los doce años en el templo" es el nombre de un cuadro de Max Liebermann. Un niño hablando con un rabino. El niño de pelo negro explica pasajes de la Biblia a los eruditos. El pintor Max Liebermann implementó su idea de esta escena de los Evangelios en su cuadro. Cuando la imagen se exhibió en Munich en 1879, la sección de reportajes y el público se horrorizaron. ¿Cómo puede un pintor judío  mostrar al fundador del cristianismo como un niño judío de cabello negro? Bajo la presión de la tormenta de críticas, Liebermann cambió al niño judío de pelo negro  en un Jesús rubio.

Orígenes judíos reprimidos y eliminados

 El cristianismo  borró los orígenes judíos de Jesús. Degradó la tradición judía. Sin embargo, Jesús mismo era judío.
 

 "El escándalo de Jesús - Un cuadro de Liebermann

 Foto: Klaus-Dietmar Gabbert dpa +++ (c) dpa - Report +++ | Uso en todo el mundo (Picture Alliance / dpa / Klaus-Dietmar Gabbert) 

“No es necesario recordar que todas los que aparecen en los Evangelios, al igual que Jesús de Nazaret, son judíos. Van a la sinagoga, van a Jerusalén para la fiesta de la Pascua. Lo que también demuestra que son judíos piadosos ”, dice Christoph Markschies, profesor de cristianismo antiguo en la Universidad Humboldt y presidente de la Academia de Ciencias de Berlín.


Fueron los discípulos judíos de Jesús quienes llevaron el evangelio al mundo desde un pequeño pueblo de pescadores en el norte de Galilea. Los 40 autores de la Biblia, con una excepción, eran judíos. Todo el fundamento del cristianismo se basa en el judaísmo.

Entonces, ¿cómo puede ser que haya tan pocos rastros del judaísmo en el cristianismo? ¿Cuándo y por qué se separó el cristianismo del judaísmo? Y sobre todo: ¿Cuándo se produjo la devaluación del judío por parte del cristiano, con las conocidas y dramáticas consecuencias de siglos de exclusión? Con demasiada frecuencia, el antijudaísmo cristiano fue también un modelo y una ayuda para la argumentación de los pogromos y las persecuciones.

Un  progresivo proceso de separación

“La separación entre lo que llamamos judaísmo y cristianismo hoy en día es un proceso gradual que, por supuesto, comienza en el siglo I, pero continúa en el siglo IV”, dice Christoph Markschies.

Porque al principio, en las primeras iglesias, en la época de Jesús, esta separación no existía. Algunos judíos vieron en Jesús de Nazaret al Mesías esperado, otros consideraron que esta idea era completamente absurda. Ambos grupos seguían yendo a la sinagoga. Cuando se le preguntó si él era el Mesías, el mismo Jesús nunca respondió con claridad. Él no confirmó ni negó la expectativa del Mesías que prevalecía en ese momento. Los cristianos vieron y continúan viendo evidencia en sus respuestas de que él es el Hijo de Dios.

"En los evangelios sinópticos, es decir, Mateo, Marcos y Lucas, parece identificarse con el Hijo del Hombre, como él llama a esta figura, con este Hijo del Hombre que parece identificarse", dice Kathy Ehrensperger, profesora del Abraham Geiger College en Potsdam. “No está claro si se trata de una afirmación mesiánica. No dice explícitamente de sí mismo: yo soy el Mesías. El evangelio de San Juan es otra cosa. En  Juan, la autoidentificación como Cristo es muy clara. Allí dice: Yo soy el Cristo, soy el camino, la verdad ".

¿Puede el Mesías morir en la cruz?

Muchos eruditos consideran que estas formulaciones en los Evangelios son interpretaciones posteriores a la Pascua. Porque los autores escribieron los textos unos 70 años después de la muerte de Jesús, bajo la impresión de la historia de la resurrección y, por lo tanto, a través de los lentes de su fe cristiana.


Jesús era judío, la teología cristiana tardó mucho en reconocerlo. Los eruditos judíos también tuvieron dificultades con el hombre en cuyo nombre los cristianos hacían proselitismo y asesinaban. En su último libro, Walter Homolka describe el regreso a casa de Jesús y critica duramente a Joseph Ratzinger.

Cuando Jesús muere en la cruz en la Pascua, los que no vieron a Jesús como el Mesías vieron confirmado su pensamiento: Una tortura tan vergonzosa como la muerte en la cruz, que los romanos reservaban  para rebeldes y esclavos,  era la señal de que no podía ser  el Mesías. 

Los seguidores de Jesús vieron las profecías de la Biblia cumplidas solo por la muerte en la cruz. Christoph Markschies nos explica:

“El libro de Isaías habla de un siervo de Dios, y este siervo de Dios aparece como el chivo expiatorio, el famoso ritual en el Día de la Expiación, donde todos los pecados del pueblo se cargan sobre  un macho cabrío que seguidamente se despeña desde una roca en el desierto de Judea. Ya  Isaías  dice que vendrá uno que cargará con los pecados del pueblo. Así que la idea básica de que uno muere en la cruz y carga con los pecados de todos en la cruz sigue siendo enteramente judía ".

 

 

 

 

 

 

Sólo tras  la muerte de Jesús  aparece por primera vez el concepto de cristiano en los Hechos de los Apóstoles.

Kathy Ehrensperger: “Entonces los cristianos, los seguidores de Jesús, por primera vez se llaman 'christiana', 'christianoi'. Eso no significa cristianos como lo entendemos. Un 'christianos' es el seguidor de una figura destacada, una personalidad. Dentro de la variada tradición judía de esa época, se  podía ser  fariseo, esenio y 'christiana': diferentes grupos judíos con diferentes perfiles.  Es opinión mayoritaria de la investigación, incluida la investigación del Nuevo Testamento en nuestros días que la separación se fue haciendo a lo largo de los siglos. Probablemente llegó a su fin con Constantino en el siglo IV, porque se aprobaron leyes que cimentaron esta distinción ".

¿Cuándo comenzó el antijudaísmo?

Pero, ¿cuándo y por qué empezaron los cristianos a devaluar a los judíos? Las actitudes antijudías ya están establecidas en el Nuevo Testamento, aseguran los eruditos, entre ellos Daniel Goldhagen, quien recomendó eliminar 450 pasajes del Nuevo Testamento. Otros lo consideran  absurdo, las disputas judías internas no son evidencia de antijudaísmo. Y los pasajes bíblicos que hablan en general de "los judíos", naturalmente, solo se refieren a este pequeño grupo de judíos que estaban en la escena en ese momento. Pero las interpretaciones unilaterales, erróneas y maliciosas de la Biblia tuvieron consecuencias fatales para  la historia judeocristiana que ha durado 2000 años. Un ejemplo: la condena de Jesús. En el Evangelio de Mateo capítulo 27 dice:

"Por la mañana, todos los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo celebraron un consejo sobre Jesús para matarlo, lo ataron, se lo llevaron y lo entregaron al gobernador Pilato".

Jesús frente a Poncio Pilato, representado en un cuadro de Mihaly Munkacsy de 1881 (IMAGO / UIG) 

Fuentes extrabíblicas muestran que solo los romanos tenían derecho a ejecutar sentencias de muerte. Sin embargo en textos cristianos posteriores se dice: "Los judíos mataron al Salvador" y la sangre caería sobre ellos como habían predicho en Mateo capítulo 27, versículo 25:

"Entonces todo el pueblo respondió y dijo: Caiga su sangre  sobre nosotros y nuestros hijos".

Acusación de asesinar a Dios

Pablo también adopta esta posición de que los judíos que no creen en Cristo son los asesinos de Cristo. Después de su experiencia de conversión cerca de Damasco, cuando se quedó ciego durante tres días y pudo volver a ver a Jesús como el verdadero Mesías, se convirtió en un creyente apasionado en Cristo y un defensor de las enseñanzas de Cristo. De sus numerosos viajes misioneros han quedado las cartas a los Romanos, Corintios, Gálatas que forman parte del Nuevo Testamento. En una carta a los Tesalonicenses, Pablo habla del asesinato de Dios por primera vez:

“Porque vosotros, hermanos y hermanas, os habéis convertido en imitadores de las iglesias de Dios en Judea, que son de Cristo Jesús; porque habéis padecido de parte de vuestros conciudadanos lo mismo que sufrieron  ellos de parte de los judíos que mataron al Señor Jesús y a los profetas ".

Para el rabino Walter Homolka, el antijudaísmo comienza con Pablo, porque  niega  la certeza de la salvación a los creyentes que no son de Cristo. Por eso dice en Corintios 1:15:

"Pero si Cristo no ha resucitado, vana es nuestra  fe".

Estereotipos en los padres de la iglesia

Incluso si la separación entre judíos y cristianos aún no se ha completado oficialmente en el siglo II, era inevitable. Y con los Padres de la Iglesia llegaron al mundo estereotipos desastrosos, que a partir de entonces recorrerán toda la historia de la Iglesia. Del obispo Melitón de Sardes se transmite esta declaración del año 160: "Dios fue asesinado". Del asesinato del hijo de Dios Jesús de Nazaret responsabilizó a "los judíos". Este estereotipo anti judío sirvió en tonos y modalidades diversas para justificar la opresión y persecución de las comunidades judías.

Según los padres de la iglesia primitiva, Dios se apartó del pueblo de Israel después del asesinato de Cristo. La dispersión de los judíos después de la destrucción del templo fue un castigo de Dios por el asesinato de Cristo, el judaísmo estaba desactualizado, Dios había cancelado el pacto con los judíos, el nuevo pacto era el pacto con la iglesia. Los principales padres de la iglesia aceptaron estos argumentos de manera incuestionable. Orígenes incluso llamó al asesinato de Cristo una maldición para las generaciones futuras:

"No sólo a aquellos que fueron sus contemporáneos, de hecho, a todas las futuras generaciones judías se adhiere la sangre de Jesús hasta el fin de los tiempos".

Y Efrén el sirio incluso justificó los pogromos contra los judíos:

"Dios te salve, querida Iglesia ... ¡expulsa al pueblo judío! que derramó la sangre de Dios, que ahora su sangre sea  derramada ".

Cuando el cristianismo se convirtió en la religión del Estado en el Imperio Romano, la acusación del asesinato de Dios ya estaba firmemente establecida. Los grandes teólogos de la antigüedad, desde Agustín hasta Epífanes y Cirilo, sostienen este punto de vista. En 537, el emperador Justiniano I incluso privó a los judíos del Imperio Romano de todos los derechos civiles y religiosos por esta razón. A principios de la Edad Media, la acusación del asesinato de Dios era parte integral de la teología cristiana y los cruzados la utilizaron para justificar sus masacres en las comunidades judías, por las que pasaron camino a Tierra Santa.

En la Alta Edad Media, nuevos motivos anti judíos procedían de la tesis del deicidio, como el envenenamiento de las fuentes y el sacrilegio de las hostias consagradas. E incluso Lutero, tras infructuosos intentos misioneros, se enfurece contra ellos y hace uso de todos los estereotipos antisemitas del momento.

Solo con la Ilustración se abren camino otras perspectivas. Kathy Ehrensperger: "en el siglo de las Luces hubo enfoques que prometían una comunicación real con los judíos. Comenzó con Moses Mendelssohn y algunos de su entorno y continuó después de la Primera Guerra Mundial, en la década de 1920  por ejemplo nombres tan importantes como Martin Buber y Franz Rosenzweig estaban dispuestos a una conversación real con el cristianismo. Y también hubo un interés real y genuino del lado cristiano de iniciar una conversación dejando a un lado la agenda misionera ".

Investigación judía sobre la vida de Jesús

Kathy Ehrensperger fue pastora en Basilea durante muchos años, esta profesora suiza ostenta una cátedra de investigación del Nuevo Testamento desde una perspectiva judía en el Abraham Geiger College de la Universidad de Potsdam. "Es único en los países de habla alemana", dice, "que una institución judía contrate a un teólogo cristiano con este enfoque". Walter Homolka, director del Abraham Geiger College y autor de un libro sobre la investigación de la vida de Jesús, la llevó a Potsdam. Piensa que es extremadamente importante oponerse a la apropiación de Jesús por parte del cristianismo desde el punto de vista judío.

El rabino Walter Homolka afirma: “Hay una investigación cristiana de la vida de Jesús. Muchos ignoran que también hay una investigación judía y por eso trato de escuchar ambas y ver sus motivos. De modo que la historia del impacto de Jesús como Cristo dogmático freservó muchas crueldades para el judaísmo. En nombre de Cristo, los judíos fueron perseguidos, humillados, asesinados y exiliados ​​".

El antijudaísmo cristiano fue en parte responsable del antisemitismo que condujo al Holocausto en el siglo XX.



A Homolka le gustaría "traer de vuelta a Jesús" al judaísmo y así relacionarlo con los grandes pensadores judíos del pasado.   Abraham Geiger en el s. XIX fue uno de los primeros en volver a poner a Jesús en el contexto judío. Recordó que Jesús no enseñó nada nuevo, sino que tradujo los elementos esenciales de la ética farisaica a un lenguaje sencillo y gráfico y acercó a las personas al amor al prójimo y al enemigo.

El filósofo religioso judío Martin Buber hizo una distinción entre la fe judía de Jesús y la fe cristiana de Pablo. En el siglo XX fueron sobre todo Shalom Ben-Chorin y Pinchas Lapide quienes descubrieron las raíces judías de los Evangelios.

Fatalmente, un punto de inflexión en las relaciones judeocristianas solo fue posible en Alemania después del Holocausto. Las dos grandes iglesias dejaron atrás su propósito de bautizar a los judíos, la fórmula que acordaron es: "Redención también por Jesús, pero  no sólo por Jesús".

"Testimonios  en el arte"

El dominio del cristianismo también tuvo un impacto en el arte y la historia literaria europeas. La iconografía cristiana ha dominado la historia del arte a lo largo de los siglos. Eso ha cambiado en las últimas décadas. Walter Homolka dice:

"Además de esta cuestión teológica, encontramos evidencia literaria de que los escritores judíos tratan con Jesús y también se identifican - uno de los más importantes es Amos Oz con su novela 'Judas' - pero también encontramos evidencia asombrosa en las artes visuales".

(picture alliance / dpa / Stephanie Pilick) (picture alliance / dpa / Stephanie Pilick) Jesús y Judas en la obra de Amos Oz: El Evangelio según Amos

 
El escritor israelí Amos Oz (fallecido en 2018) estaba fascinado por Jesús; fíjate, el Jesús judío. Sin embargo, Oz no estaba de acuerdo con la interpretación de que Judas era un traidor. Presentó una historia alternativa que presenta lo que realmente sucedió entre Jesús y Judas.

En Alemania, es  la artista visual Ilana Lewitan quien se ocupa de Jesús. Levitan dice: “Murió judío, fue asesinado como judío. Fue solo mucho más tarde que surgió el cristianismo y se hizo cristiano. Y siempre me he preguntado cómo puede suceder que le roben la identidad a alguien, que se le asigne otra identidad después de que ya haya fallecido. Y que durante más de 2000 años la gente ha olvidado que era judío y que se hayan cometido crímenes terribles  en su nombre".

Descubrió que Jesús era judío cuando era adolescente. Pero la preocupación artística por la figura de Jesús vino mucho más tarde. Ilana Lewitan: “Al ocuparme de  la Shoah y de la historia de mis padres en algún momento me hice esta pregunta, qué hubiera pasado si Jesús hubiera vivido como judío en 1938 ".

Jesús como prisionero en un campo de concentración
 

La artista creó una instalación  para el Museo Egipcio de Munich. En el centro: una estructura de acero de casi cinco metros de altura que parece una cruz. De él cuelga un cuerpo con ropa de recluso del campo de concentración.

Ilana Lewitan: “Prefiero mostrarlo con los brazos en alto, un cuerpo, que se eleva hacia Dios que está en diálogo con él y  pregunta: "Adán, ¿dónde estás? Hombre ¿dónde estás?"

Responsabilidad, pertenencia, exclusión: estos son los temas de Ilana Lewitan. “¿Qué significa tener la identidad incorrecta en el momento equivocado o la identidad correcta en el momento adecuado? Soy hijo de supervivientes de la Shoah. Sé lo que mis padres tuvieron que experimentar porque eran judíos en el momento equivocado. Y me considero afortunada por  haber nacido en el momento adecuado. Lamentablemente, todos tenemos que experimentar que la estigmatización, la exclusión, el racismo y el antisemitismo han vuelto a aumentar de forma pronunciada. Por eso estoy feliz de poder mostrar mi exposición nuevamente en octubre en la Parochialkirche de Berlín, y espero poder sensibilizar a muchas personas sobre este tema. También estoy feliz de que mi galería Noah en Augsburgo piense en una exposición de mi obra en Berlín a partir del otoño ”.

Kathy Ehrensperger, la profesora cristiana que enseña el Nuevo Testamento desde una perspectiva judía en Potsdam,  comenzó a abordar el tema porque lo que encontró no la convenció:

"El punto decisivo fue que me preocupaba mucho desde joven que la identidad cristiana y la autoimagen cristiana se formularan negativamente en términos de demarcación y devaluación de la tradición judía", dice Kathy Ehrensperger. "Y con todo mi amor por mi propia tradición, la tradición crítica, ya no podría identificarme con ella si esa tradición incluye esencialmente la degradación de los judío".