PREGUNTAS

 Siguiendo con la vocacion a oveja que nos ha tocado en suerte, no respires, no preguntes, no cuestiones, obedece, come y calla....el colmo, las declaraciones de los "filosofos españoles", por si teníamos alguna duda sobre su valía, os habéis retratado,   como toda la farándula artístico-mediática española.

Etiqueta sobre la persona y basta. Anti no sé qué, solo por preguntar "explícame por qué", no habéis justificado nada, como si hubiéramos aparecido en el planeta ayer y fuera la primera vez que la humanidad estornuda.

Sin tirar de una de las decenas de hilos sueltos en el relato oficial,

 me quedo con el de la prohibición de autopsia porque me recuerda a JPI, y aprendí que es altamente sospechoso prohibir algo tan elemental frente a nuevos patógenos. Solo con eso da para rascarse la cabeza ...¿y tú eres catedrático de filosofía jubilado? necesidad de salir por peteneras ninguna. Otros que a lo mejor "necesitan" hacer el loro, pero no sois de esos. 

Así está la península ibérica y Occidente en general. Echado a perder. Los camioneros nos salvarán... huyamos de los intelectuales. Ni media luz para el espíritu, sois penosos.

Tampoco los camioneros nos salvarán, pero al menos dan testimonio de dignidad, de no dejarse hacer como cordero al matadero, en pie frente a la propaganda y a la arbitrariedad de esa UE cuyos altos funcionarios no elige nadie. Sí, perdón, los pone la finanza y a su servicio actúan. 

Poner la soga al cuello a los países con dinero salido de la nada...que tendrás que devolver.

 

INGENIERÍA SOCIAL (Lucien Cerise)

Todas estas medidas pseudo-sanitarias no tienen relevancia médica y de hecho apuntan a forzarnos al transhumanismo. A la escala de una empresa y su cultura, la dirección habla de “gestión del cambio” para calificar esta transformación de identidad. ¿Cómo surge técnicamente el poder? El gobierno francés y el instituto de encuestas BVA están trabajando en colaboración y aplicando una herramienta de ingeniería social, el Nudge, para fabricar el consentimiento de la población al confinamiento y a todas las medidas como el uso obligatorio de mascarillas, etc. 

En su web, BVA define Nudge como la activación de un "impulso" para provocar fuertes cambios de comportamiento basados ​​en las lecciones de la economía del comportamiento. A lo largo de los siglos, los poderosos se dieron cuenta de que provocan reacciones de desconfianza cuando son demasiado autoritarios, y que las imposiciones autoritarias debilitan así la propia base de su dominación.

Por ello, la reflexión sobre el ejercicio del poder ha desarrollado técnicas de phishing para calmar la desconfianza y captar la confianza de las masas. Las ciencias del comportamiento en general son hoy el nuevo paradigma del pensamiento político porque permiten teorizar y aplicar un control social más efectivo que la supervisión autoritaria al producir la ilusión de la libertad de elección. El concepto de Nudge, o la orientación suave de las decisiones, es una especie de poder blando gerencial extendido a toda la empresa. Recientemente se le dedicó un programa de France Culture en el que se dijo que los gobiernos inglés y francés llamaron a las "Nudges Units", unidades especializadas en la creación de Nudges, es decir pequeños empujones mentales que nos influyen de manera subliminal, como las flechas y puntos dibujados en el suelo para hacer cumplir el distanciamiento social, todo con un aspecto colorido e infantil. Este enfoque ha sido defendido en particular por los asesores de Barack Obama, que se hicieron famosos por su concepto de infiltración cognitiva, y que definen Nudge con el de oxímoron “paternalismo libertario”.

 En las sociedades patriarcales, el Gran Hermano es visible y se destaca del entorno, como un tótem fálico erigido en el centro de atención. En las sociedades histerocráticas, liberales y libertarias, la Gran Madre es invisible porque lo abarca todo, pone el telón de fondo del entorno. Por lo tanto, es más difícil impugnarlo porque está en todas partes y en ninguna al mismo tiempo. Si el mensaje del Gran Hermano es "2+2=5", el mensaje de la Gran Madre es "Puedes elegir entre 2+2=5 y 2+2=6".

Breizh-info.com: ¿Cómo explica la facilidad con la que las autoridades de todo el mundo han logrado confinar a las personas y quitarles cada día un poco más de libertad individual en nombre de la lucha contra un virus que, sin embargo, mata a muy pocas personas sanas?

LC: El poder juega esencialmente con la psicología humana y sus debilidades, sesgos, puntos ciegos, etc. Étienne de la Boétie ya hablaba en el siglo XVI del fenómeno de la servidumbre voluntaria, que se basa en la necesidad de seguridad. Al obedecer ciegamente al poder, se tiene la impresión de ser como los demás, de ser parte de la mayoría, lo que brinda una sensación de seguridad y protección. Sin embargo, una impresión es siempre precaria. Es una alucinación, una percepción ilusoria como un espejismo en el desierto, que solo se basa en combinaciones de palabras, narraciones, lenguaje,  de ahí la necesidad de repetir el mensaje constantemente para tratar de darle consistencia.

Esta facilidad para encerrar a la gente en sus casas también viene de que esta crisis tiene un punto de partida en la realidad a pesar de todo. Hay debates en torno a la realidad del virus y su origen, posiblemente artificial, o incluso su inexistencia. No importa: hay un síntoma típico. Las personas enferman y muestran síntomas reconocibles y similares. Por lo tanto, podemos hablar al menos de un síndrome de Covid-19. Sabemos que las estadísticas de número de casos y muertes están amañadas al alza, pero sin embargo hay una enfermedad que tiene un perfil unificado, una estructura, una silueta.

Si esta enfermedad es causada por un virus, exosomas o 5G es una pregunta secundaria, el verdadero problema es el virus político-mediático. La enfermedad existe, pero no en la forma que se presenta en los medios. Sin embargo, es esta forma mediática la que impacta en la psicología y provoca una ola de conformismo imitativo que también afecta a los gobiernos. Las autoridades saben muy bien que este virus no es tan peligroso. Pero si sumamos los corruptos y los seguidores, llegamos al punto de inflexión necesario y suficiente para inducir esta ola de histeria política y mediática mundial. China inició el movimiento con las medidas dramáticas tomadas en enero de 2020 en Wuhan. Pero también es China la que pone fin a la epidemia mediática con la gran fiesta organizada en Wuhan el 20 de agosto.2020, y que reunió a miles de personas sin mascarillas ni distanciamiento social. Puede ser que el estado profundo chino esté dividido entre los pro-virus, que tuvieron la mano en enero para lanzar la operación, y los antivirus, que creen que ya es suficiente y que pitan el final del juego. En cualquier caso, es un mensaje contundente enviado a todo el mundo para decir que China está pasando página con el coronavirus. La epidemia ha terminado en realidad, el gobierno chino lo sabe y lo da a conocer públicamente en lugar de intentar que perdure en lo virtual, como aquí. Esta vuelta a la normalidad es una victoria para las autoridades chinas, pero sería un fracaso para las autoridades occidentales, que temen más que nada que su opinión pública se dé cuenta de que la epidemia ha terminado.

(...)

LC: Si los medios no hablaran del coronvirus, la gente no pensaría en él. Peor aún, ni siquiera sabrían que existía. El papel de los medios es construir una realidad, es decir una representación de la realidad, que tendrá el mismo peso que la realidad si crees en ella. Antes era la religión la que construía la percepción de la realidad, hoy son los medios de comunicación. Los discursos, las grandes narrativas y las creencias tienen la capacidad de modificar el comportamiento con un nivel de restricción comparable al de las leyes físicas.

Estamos en una película de terror en 3D, una superproducción mundial titulada “El coronavirus nos matará a todos”, que sale de la pantalla para convertirse en un holograma virtual superpuesto al mundo real, como si tuviéramos unas gafas en la nariz de realidad aumentada. 

 

Para volver a la realidad hay que quitarse las gafas, es decir dejar de confiar en el filtro impuesto por el discurso político y mediático, que pretende convertirse en la nueva parrilla de lectura universal y definitiva. De hecho, para los pro-virus, no se espera que esta crisis termine algún día. Es inconcebible volver a la normalidad. Las máscaras, el distanciamiento social, los gestos de barrera y el riesgo de reconfinamiento son la nueva normalidad. Al igual que la “amenaza terrorista”, la “amenaza para la salud” está ahí para siempre. 

 

Una alucinación colectiva dirigida y reformada en tiempo real es el nuevo pacto, el nuevo mundo, la nueva realidad. Después de encerrarnos en casa, el siguiente paso será, sin duda, cortar Internet. El objetivo final parece ser hacernos vivir bajo tierra, siempre con el pretexto de un terrible virus o cualquier otro invento, como en la película de ciencia ficción "La isla".
 

Hay que reconocer que el tratamiento mediático de la epidemia varía considerablemente de un país a otro, lo que demuestra que todavía estamos lejos del gobierno mundial. Estuve de vacaciones en Polonia durante el verano. En los hoteles teníamos varios canales de televisión de Europa Central y del Este, así como las imprescindibles CNN y BBC. En estos dos canales en inglés, pareciera que el mundo estuviera viviendo sus últimas horas. 

Se desplegó una verdadera dramaturgia teatral completamente histérica, mientras que el tono de los canales polacos y de los países vecinos era flemático, pragmático y racional, y decía en esencia: "Hay un problema de salud pública, lo trataremos así, lo vamos a arreglar" etc Incluso en Europa occidental, algunos medios y algunos periodistas están comenzando a comprender que existe una desconexión entre la epidemia real, que es de escala bastante modesta, y la epidemia puramente psicológica del pánico. 

 

Siento que los individuos que pertenecen al sistema se preguntan si todo esto no está yendo demasiado lejos. En ausencia de un riesgo grave para la salud, las medidas de contención y distanciamiento social siguen un protocolo de gestión de multitudes cuyo carácter político es evidente: la gente debe tener miedo de salir de casa y reunirse. El poder inventó la cárcel para todos, por eso la cárcel en casa. Personas como Alain Bauer, el famoso criminólogo, llevan años trabajando para aplicar los métodos de gestión penitenciaria a toda la sociedad. Esta crisis orquestada por los medios es su obra maestra. El bombardeo informativo es diario, es artillería realmente pesada. Y mientras tanto, China celebra el fin de la epidemia...