1988 EL MARCA

El Marca comprado en 1984 por un grupo de periodistas del "Opus Dei". Enfrentamiento con el "carismático" Gil. Hasta que 20 años después un opus lo adquiere para venderlo a Unidad Editorial, la misma sociedad que posee el Mundo. Entonces entró Inda de director. Entrevista a Kindelán en el vídeo, presidente del grupo Recoletos. ?Supernume? Y obsérvese a Gil en el 88 inventándose una cita del founder, "no hay que mentir", cita apócrifa, "sed salvajamente sinceros", mientras se callaba el resto: tú sincero conmigo no yo sincero contigo, . Restricción mental.

Dice de La Morena que Vasile el ex Consejero delegado de Tele5, la fama de esta tele no procede precisamente de retransmitir la santa Misa, pertenece a  Comunión y Liberación, min.8:10. Chispazo por incongruente, una vez más. 

Palabras inspiradoras del disidente soviético Solzhenitsyn en su Archipiélago Gulag. Que no es un conjunto de islas siberianas, sino el conjunto de cárceles de tránsito, cárceles propiamente cárceles y campos de concentración desperdigados por toda la extensión de la URSS, desde Leningrado a Sovietskaya Gavan en la costa del Pacífico, y desde el Círculo polar Artico a la frontera con China.  Inmenso  imperio comunista.

Stalin realizó una limpieza de millones de rusos, afines y no afines, sin distinción, cambió la sociedad quitando millones de en medio. Mucha miseria, enfermedad, falta de higiene, hacinamiento, hambre en las cárceles en las que residió Solzhenitsyn. Casi no se distinguía el cubo de los desperdicios y excrementos de la escudilla donde les ponían la magra sopa. Humillaciones, torturas, degradación. Reconoce que pudo sobrevivir a sus 10 años de prisionero porque un buen día el Estado soviético se tomó en serio que sabía física nuclear.  

Reconoce que sufrió el proceso de "institucionalización", el interno que ya no sabe vivir fuera de los cuatro muros y el horario carcelario. El ser humano es capaz de acostumbrarse a las más penosas condiciones.

Lo sacaron del campo y lo llevaron a otro especial para científicos que trabajaban para mayor gloria de la URSS. Gracias al traslado el disidente sobrevivió. Pero en el viaje en tren desde su auténtica cárcel a la prisión más liviana, tenía que disimular él y sus dos guardianes que era un preso en tránsito. Su reacción al verse de nuevo entre la gente corriente que habla de los problemas de la vida me ha llegado hondo:

"Si es cierto que a veces las almas de los muertos flotan entre nosotros, que nos ven y pueden leer sin dificultad nuestros insignificantes anhelos, mientras nosotros no podemos verlas ni sospechamos su presencia incorpórea, lo mismo ocurre con los transportes bajo escolta especial.

Te sumerges en el mundo de los libres en lo más profundo, te codeas con la gente en el vestíbulo de la estación. Examinas con mirada ausente los anuncios, completamente seguro de que ya no te atañen. Te sientas en un banco de estación de los de antes y escuchas conversaciones extrañas e intrascendentes: que cierto marido le pega a su mujer, o que la ha abandonado, que, no se sabe por qué, la suegra no se aviene con la nuera, que los vecinos del apartamento comunal dejan encendida la luz del pasillo y no se restriegan los zapatos en el felpudo, que alguien le está haciendo la vida imposible a otro en su trabajo, que a uno le ofrecen un buen puesto en otra ciudad pero no acaba de decidirse: ¡como si fuera tan fácil mudarse! Y mientras escuchas todo esto, unos escalofríos de rechazo te recorren la espalda y la cabeza:
 
¡Hasta tal punto percibes ya con toda claridad la auténtica medida de las cosas en el Universo, la medida de todas las debilidades y de todas las pasiones! Y a esos pecadores les está vedada esta percepción. Sólo tú, incorpóreo, estás auténticamente vivo, estás verdaderamente vivo; y esos otros creen estar vivos, pero se equivocan.
 
¡Y entre vosotros hay un abismo infranqueable! No es posible gritarles, ni llorar por ellos, ni sacudirlos por el hombro, pues tú eres un espíritu, un espectro, y ellos, cuerpo material. 
 
¿Cómo iluminarlos? ¿Con una inspiración? ¿Con una aparición? ¿Con un sueño? ¡Hermanos! ¡Hombres! ¿Para qué se os dado la vida? En el silencio de la medianoche las celdas de los condenados se abren de par en par y se arrastra hasta el patíbulo a personas con gran alma. En este preciso momento, en esta hora, por todos los ferrocarriles del país hay hombres que pasan su lengua amarga por los labios resecos de haber comido arenques, hombres que sueñan con la felicidad de poder estirar las piernas, con el alivio de que les dejen hacer sus necesidades.
 
Cuando el verano llega a Kolymá (en Siberia) la tierra se deshiela hasta un metro escaso de profundidad y solo entonces entierran los huesos de los que murieron en invierno. Pero vosotros gozáis del derecho a determinar vuestro destino, tenéis sobre vuestras cabezas el cielo azul y el sor ardiente, os está permitido ir a beber agua, estirar las piernas, ir sin escolta a donde se os antoje. ¿Qué importa la luz del pasillo? ¿Qué pinta aquí la suegra? ¿Queréis que os revele ahora mismo la esencia de la vida y sus secretos?
 
No persigáis fantasmas, ni posesiones, ni honores: solo se consiguen tras años, decenios de nervios y se confiscan en una sola noche. Vivid con serena superioridad sobre la vida, no os asuste la desdicha, ni languidezcáis tras haber conocido la felicidad, pues ambas no importan: jamás lo amargo es para siempre, ni lo dulce colma nunca la medida. Consideraos afortunados si no pasáis frío, si el hambre y la sed no desgarran vuestras entrañas. Si no se ha partido vuestra espalda, si caminan ambas piernas, si ambos brazos siguen articulándose, si ven ambos ojos y oyen vuestras orejas, ¿a quién podéis envidiar? ¿De qué os serviría? Envidiar al prójimo corroe ante todo a uno mismo.

 
Frotaos los ojos, limpiad vuestro corazón y valorad por encima de todo a quines os aman y desean vuestro bien. No los ofendáis, no los injuriéis, no os separéis de ellos sin antes haber hecho las paces: porque, quién sabe, ése puede ser vuestro último acto antes de que os arresten, ¡y el último recuerdo que quede en su memoria!
 
 


Comentarios

Magí Ribas Alegret ha dicho que…
La Santa Sede confía mi vida e inquietudes al Señor. Ahora la pelota está en el tejado de Dios.

https://twitter.com/MagiRibas/status/1602611366455648256

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