TIERRAS DEL SUR

Drewermann frente a un director del o, seguro que ya está bajo tierra, además de Hertel, el alemán, hasta donde se,  que más le ha dedicado al tema. Pinta de pijillo el Deutsch Direktor...Subtítulos en español. Es de 1991,  de rabiosa actualidad.

Con respecto a Dutroux en la cárcel, no ha debido decir mucho, habría que comprar el n de la revista. El entrevistador Karl Zero esta siendo multiplicadamente entrevistado y en todos los lugares explica que se quiso hacer pasar a D por un lobo solitario pero que Stay behind manejaba las redes, usando el chantaje contra personalidades europeas. Y por otra parte Las sobrevivientes están dando que hablar y se proyectan en mas cines. 

No te han publicado los comentarios sobre las 43 pero a isla mejicana sí su advertencia para el 22.08. Que no sé si coincide, con el falso anuncio de la prela en agosto del 82, yo todavía "no era" pero se precipitaron las noticias y sacaron "champán" en los centros y convivencias de verano. El anuncio de la prela se hizo oficial el 27.11.82 día de la Milagrosa por la tarde, "bajó el Padre a contárselo a sus hijas", y el 28 doblaron las campanas. Desde entonces ese día fue fiesta A super A y más A. Para acabar quitándola según contáis a los 44 años. Se tiró la casa por la ventana y se tiraba cada día en esa fecha, aunque no consiguieron todo lo que querían, Iglesia paralela total y absoluta sin serlo, sino cuerpo injertado que absorbe fuerzas del Pueblo de Dios para sus peculiares negocios y de paso destroza personas, como principal ocupación. Pero todo eso en El debate no les interesa. ¿Para qué? somos prescindibles. 

Ahora resulta que Verdaguer y Maragall fueron sus lecturas favoritas. Va a tener razon el informador secreto la "cosa catalana" es obra suya. Estuve casi 20 años y jamás se nos dijo que le gustaran esos poetas. Se habló de su conocimiento de la literatura castellana adquirido en el bachillerato. Fray Luis, Teresa....etc. Jamás esos dos. Y de todas formas no leía, estaba demasiado ocupado dando ejemplo, preparando "l'avenir". 

En el coloquio centroamericano se hacen eco de que recogían sus gotas de sangre y todos los "trozos" de su cuerpo como futuras reliquias, pero eso lo inició él. Era un rústico en el peor sentido de la palabra, que se tenía por iluminado y se lo hicieron creer. Se puede ser rústico y saberlo y no querer hacer alarde de lo que no se es, pero este hombre permitió que llevaran su firma libros que él no había escrito, pasó por doctor sin que nadie haya visto su tesis, un libro publicado en 1970 no es una tesis viejuna amarillenta supuestamente presentada en 1939, nadie la ha visto, no está en la Complu...etc, etc, etc. Y Alvaro siguió por la misma línea. Los descubrimientos de California no es de Alvaro, es de uno que era profe en Sevilla cuyo nombre he olvidado. 

No tiene importancia ser analfabeto, sí la tiene querer pasar por doctor de la Iglesia cuando nadie ha visto el original de tu amarillenta tesis del año 1939. Una tesis no se hace en plan correcaminos como estaba él "en los años de la guerra". No es posible moverse tanto por España, visiteando obispos y gente influyente y parir al mismo tiempo una tesis en dos años. No se puede, materialmente imposible, si se la hizo otro y la firmó el como suelen, es otra cuestión. 

Tampoco tiene importancia ser plebeyo, él se la daba. Qué desequilibrio de personaje y cuánta responsabilidad los que estaban alrededor alimentando sus ínfulas de grandeza. 

De paso veo un coloquio con el hermano del dire del cole famoso del niño fourhouses, aquel que echaron, su hermano cura nos alecciona sobre Finlandia.

Si el Papa vive modo influencer, escrivarianos santifican el modo influencer, viven de la propaganda y cambiando la historia, sin reconocer errores nunca. El Papa al menos reconoce que metió la gamba. Estos no, hacen y dicen como si no  hubiera memoria, ni en ellos ni en los demás. Que por otra parte lo de los escrivanos no son errores,  les va de maravilla una temporada haciendo ciertas cosas hasta que salen a la luz y tienen que parar, y tomar otros derroteros. Aunque el cambio es de boquilla más bien. Y los abusos anteriores "como ya no  pasan" santa palabra.

Y por otra parte, aunque sean gestos, ...para una ex nume imbuida de las vajillas, platos, tazas, cubiertos, mantelerías... y cuando se trataba de él, ni te cuento, la importancia del "tono humano", un Papa que agarra la bandeja de plástico y se sienta a comer con los obreros es una revolución icónica. Tuve oportunidad de decírselo en una carta que le llevaron en mano hace unos años. Ratzinger seguía con el sastre romano especialista de las zapatillas rojas. El fue a Lampedusa, donde los africanos traficados...., el founder jamás pensó en los parias de la tierra, y cuando nos enseñaban el catecismo de la comunión nos dijeron que  esos son en los que había que fijarse.  En el club Isaba en el que mi madre me inscribió con 10 a. la enseñanza era mas sutil y enrevesada, mas sofisticada, mas falsa.

Me encantan les "hors sujets" que planteas, además "todo tiene que ver con todo", a pesar de lo que diga Gustavo Bueno. 

Tampoco me creo el maldito cambio c, me leí una Historia de la humanidad prehistórica y cuando nuestros antepasados iban de sitio en sitio cazando y arrancando peras de los arboles, durante miles y millones de años ¡que no ha pasado! con las glaciaciones, antes de la humanidad, el meteorito que extinguió  los dinosaurios, volcanes, terremotos y tsunamis, plegamientos que hacen surgir montañas y desaparecer mares. De todo hubo. La tierra es un planeta vivo y si llega un momento en que como tantas otras especies del pasado tenemos que desaparecer, bien desaparecidos estaremos, por el meteorito o por subidas y bajadas del mar. Nos lo hemos buscado.

 Cualquier brizna de hierba del campo está mejor de la cabeza y más en su sitio que gran parte de la humanidad, que no paramos de hacer lo contrario de lo que se supone que un ser humano ha venido a hacer.  Parece un disparate conservar el lince y poner al lince por delante del homo sapiens, nuestros semejantes, pero visto lo visto, me da mas ternura el lince. Que precioso bicho.

Lo pienso en la montaña, ¿qué es mi vida de 80 años frente a los millones que llevan estas piedras aquí?  y cuando me entierren la montaña seguirá viéndose, de nosotros se acordarán un momento nuestros allegados y desapareceremos en la nada como tantos antes. Ya está bien de darse importancia. 

Otra cosa es que tengamos fe y pensemos que somos más que biología, pero ese es otro asunto. De tejas abajo, si no somos capaces de frenar a los humanos que son cuatro pero nos llevan al desastre a la inmensa mayoría, lo que nos pase, nos vendrá bien para la humildad.

Elena Longo se hace eco de los opus hablando de abusos pero no dice como yo, "lo que nos faltaba", simplemente piensa que no se han mirado en el espejo. Qué ingenuidad. Es lo mismo que con el Yunque, "nos llaman secta de derechas, trae p'aca´que vamos a crear y poner a nuestros voceros a quejarse de la fantasmal mejicana". 

Que hay abusos espirituales en la Iglesia y nos acusan de ello "fulano, mengano me estáis escribiendo un articulo científico sobre el tema, mirad donde haya que mirar y ni se os ocurra citar los originales, solo Papas, documentos de la Iglesia y gente de nivel".

Y apañado el asunto. No habrá un solo teólogo español o italiano situado en la Academia que se entere y se queje "modo académico". Andando. Va Agustina y lo publicita, si no se ha dado cuenta, que se de cuenta y lo quite. Es una burla, a ella y a mi en especial.

Me ha gustado este texto de Juan Goytisolo, hablando de las regiones ricas y pobres de España. Aunque es de hace medio siglo, historia mas que sociología,   es útil. Como el vine del norte al sur con un gran prejuicio norteño sobre esta tierra, como el descubrí  valores:

TIERRAS DEL SUR

"El escritor que se aventura a describir la realidad del Sur debe enfrentarse a una multitud de mitos hábilmente manejados por quienes intentan inmovilizarnos  para siempre dentro del rígido caparazón de las actuales estructuras. El primero de ellos, ya que no el mas importante, es el de la pereza e incapacidad del hombre meridional.

Una propaganda interesada ha ido entreteniendo una interpretación de la pobreza del Sur fundada en el carácter indolente de sus habitantes. Para muchos catalanes, vascos o asturianos, el murciano y el andaluz son hombres biológicamente inferiores, sufridos, bárbaros, incultos. Preciso es confesar que tal opinión cuenta con defensores ilustres.

En su Teoría de Andalucía, Ortega y Gasset tras haber comparado los andaluces a los chinos y a los vegetales, les reprocha su pasividad e incurre en el tópico de su holgazanería: "esa es la paradoja que necesita meditar todo el que pretendo comprender Andalucía: la pereza como ideal y como estilo de cultura". Ortega echa en cara al andaluz su sentido vegetal de la existencia, y añade: "ese ideal nos parece a nosotros, gentes más del Norte, demasiado sencillo, vegetativo y pobre". De la explotación, el latifundio, el paro ni una palabra....

De igual modo, la afición del meridional por los empleos burocráticos y administrativos, Ejército, Guardia Civil, organismos estatales, no hay que atribuirla, como he oído a menudo en Cataluña a un rasgo particular de su carácter y su modo de ser. En Andalucía y Murcia, como en todas las regiones no industrializadas, la pequeña clase media de las ciudades no tiene otra perspectiva que aspirar a uno de los innumerables puestos del aparato burocrático oficial y actuar de intermediaria entre la masa campesina y el Estado. En Cataluña y Vascongadas, por el contrario, el pequeño burgués puede insertarse en cualquiera de los diversos sectores de la producción....La diferencia entre uno y otro no es tanto de carácter como de oportunidades.

Lo mismo pudiera decirse del alto coeficiente de natalidad de muchos andaluces. Contrariamente a lo que muchos piensan, las familias numerosas no son la causa de la pobreza sino un resultado de la misma. Al emigrar a las provincias industrializadas del Norte y disponer de las ventajas materiales del trabajador catalán o vasco, sueldo, alojamiento, cuidados médicos...el índice de natalidad del murciano o almeriense no difiere del barcelonés o del bilbaíno. Únicamente en los barrios de cuevas y chabolas, faltos de las condiciones higiénicas más elementales, los matrimonios son prolíficos, como en Murcia o Andalucía. La fecundidad de los meridionales, que tanto se les reprocha en Cataluña, no es, pues, un fenómeno de naturaleza sino de sociedad.´

LA POBREZA

Otro de los tópicos que conviene deshacer desde ahora, el mas extendido tal vez, es el de la pobreza natural del Sur de España. Esta pobreza, que como dice irónicamente uno de los mejores poetas jóvenes, "no es, sin mas pobreza, sino un estado místico del hombre, la absolución final de nuestra historia", ha sido provocada por los hombres y podrá cesar o disminuir el día en que nos lo propongamos.

El atraso del campo español tiene por causa principal y directa el sistema de latifundio absentista....En España ay 3.075 propietarios que poseen entre 1000 y 5000 ha de tierra por cabeza y 394 propietarios de una superficie superior a las 5000 ha.....4100 latifundistas acaparan 9.500.000 ha, es decir, casi el doble de la tierra que 4.943.000 campesinos (datos de 1959).

La responsabilidad del   latifundio, de fácil comprobación  en provincias ricas como Sevilla, Córdoba o Jaén, parece mas dudosa cuando la establecemos en orden a las comarcas esteparias del  Sudeste. Durante mi primer viaje a Almería (1956), la violenta erosión del paisaje, la desnudez de sus montañas calcinadas ilustraban para mi el mito de la pobreza española. De haberme guiado por mis impresiones de entonces, hubiera incurrido en el tópico de la fatalidad geológica o de la miseria irremediable. En realidad hubiese confundido de modo lamentable causa y efecto, atribuyendo la culpa del mal a lo que es consecuencia del mismo.

Junto al mito de la pobreza natural de España, los defensores de nuestras anquilosadas estructuras han puesto en circulación otros tópicos que tenemos obligación de denunciar siempre que nos salgan al paso. Así, oímos decir con frecuencia que el latifundio es una secuela del secano, siendo, por el contrario, el secano en gran parte, hijo del latifundio. En lo que a la    provincia de Almería se refiere el estudio de numerosos textos y documentos de los s. XVI al XIX me revelo que este sistema era el causante directo de la transformación de antiguos bosques y zonas de regadío en sequeros y dehesas. En el contexto económico-social existente en España, hasta que se inicio el actual despegue capitalista, los grandes propietarios absentistas tenían la posibilidad de obtener una pingüe renta de la tierra pese a los primitivos métodos de explotación y a los bajos rendimientos de los peones agrícolas. Preocupados tan solo por sus inmediatos beneficios, sin tener jamás en cuenta los intereses de la colectividad, los latifundistas almerienses abandonaron las obras de irrigación emprendidas por los musulmanes, talaron los bosques y saquearon las minas, convirtiendo el magnifico emporio de riqueza que describía Mohamed el Idrissi en el s. XI en el grito anhelante de agua que evocaba el propio general Franco en su discurso de Huércal Overa del 1 de mayo de 1961: "¡todo en estas tierras pide agua y agua!".

Autor de la pobreza de los campos, el latifundio lo es, igualmente de su despoblación. La emigración rural andaluza, murciana y extremeña no solo es debida al alto coeficiente de natalidad de esas regiones sino también a la injusta distribución de las tierras. Según estadísticas oficiales, entre 1946 y 1955 casi dos millones abandonaron su lugar de origen para emigrar a los centros urbanos del Norte o el extranjero...

Ya en 1828, Flores Estrada escribía: "sin crear intereses materiales en favor de las grandes masas de cultivadores, en vano esperemos que triunfe la causa de la libertad". 86 años después, Flores de Lemus preconizaba una colonización en gran escala de las regiones agrícolas del Sur repitiendo en términos casi idénticos las observaciones de su ilustre antecesor. Pero, como decía Larra, para España no pasan días. En 1962, nuestra sociedad es, desde varios puntos de vista, la misma que en 1828, y algunos de nuestros problemas de entonces siguen todavía vigentes. Creemos vivir en el s. XX y, a trechos, desmedramos aún en el XIX. Viajar por la España desmerecida del sur del Río Segura, calar en su intrahistoria nos revela cuando menos una cosa: entre el reloj europeo y el reloj español existe un desajuste que los partidarios de nuestro ingreso en la pequeña Europa parecen olvidar a menudo....

LA BURGUESÍA ESPAÑOLA

Para comprender alguna cosa de los males que afligen a España es preciso tener en cuenta la diversidad de nuestro calendario. En el momento en que en Francia o Inglaterra, p.e, la burguesía adquiría conciencia de sí misma y asumía sus responsabilidades, en España demostró una incapacidad enfermiza en el desempeño de la función rectora que la evolución del mundo imponía. En 1900 no había sabido llevar aún a buen término la industrialización y la reforma agraria indispensables para liquidar las estructuras medievales de nuestro país. Más tarde, al originarse el gran desenvolvimiento del sistema bancario y la formación de los primeros monopolios, estos fenómenos característicos del s. XX, se produjeron paralelamente a un conjunto de situaciones y tensiones sociales propias del s. XIX. 

La interrelación de hechos económicos pertenecientes a distintos siglos explica a la vez nuestras contradicciones políticas y la debilidad de la clase burguesa. Poco a poco se habían ido creando en España una serie de problemas de producción  y conflictos sociales sin que surgiese al mismo tiempo, como en Francia o Inglaterra, los factores susceptibles de mitigarlos. Así nació un desajuste de las situaciones históricas, mal endémico de los países subdesarrollados, que impidió la estabilidad del sistema de democracia parlamentaria y pluralidad de partidos.

En España, el capitalismo de tipo monopolista coexiste con la agricultura atrasada, cuya transformación capitalista a partir de las sucesivas desamortizaciones del s. XIX ha sido frenada por las secuelas anacrónicas que dejó el feudalismo en la distribución de la tierra. La simultaneidad de los fenómenos aclara la actual confusión: mientras la burguesía catalana, demos por caso, lucha contra el feudalismo para imponer su política de monopolio industrial, el bracero andaluz lo hace enarbolando la bandera de la reforma agraria; al mismo tiempo, y el ejemplo ilustra la yuxtaposición de la que hablamos, el proletariado catalán y el proletariado andaluz de Cataluña combaten frente a la explotación a la que los somete la burguesía catalana antilatifundista.....

La burguesía española no osó enfrentarse sino en fecha muy reciente con las supervivencias feudales del latifundio y no ha alcanzado hasta ahora su desarrollo normal, debido a que cuando cobró conciencia de si misma, con un siglo de retraso, el proletariado había despertado también. Privada del sostén popular que permitió las grandes realizaciones de la burguesía europea, prefirió pactar con las estructuras feudales que se oponían a estas realizaciones. De tal modo se condenaba a no cumplir su misión histórica más que a medias, a ser, desde su propio punto de vista, una "mala" burguesía. La historia española de los últimos 100 años es un perpetuo regateo entre los intereses encontrados de la clase latifundista castellana y andaluza  y la burguesía de Cataluña y Vasconia. Originariamente adversas del anacrónico sistema feudal de aquéllas, acabaron por entenderse con él y elaborar los términos de un arreglo beneficioso para ambos.

Durante la segunda república, que murió víctima de las contradicciones que señalamos, mientras la burguesía industrial defendía un reformismo democrático en Cataluña y las  provincias del Norte, mantuvo el campesinado de Andalucía, Murcia, Extremadura y Castilla bajo un régimen socialmente opresor. Partidaria de la libertad cultural de catalanes y vascos, hollaba la libertad económica de castellanos y andaluces.

La historia demostrará un día que la primera no puede desglosarse de la segunda. Sin comprender la realidad del Sur, los catalanes no resolverán jamás los problemas planteados en su propia casa.

EL AUGE DEL MOVIMIENTO CATALÁN

coincide con la ruina económica del Sudeste. En su breve pero sustanciosa Historia de España, Pierre Vilar analiza magistralmente cómo la oposición política de la Lliga disfrazaba una serie de reivindicaciones de tipo comercial. En 1900, como ahohra, el problema de la burguesía catalana era encontrar mercados a los productos de su industria. Al acaecer el desastre colonial, con la pérdida consiguiente de los de Cuba, Puerto Rico y Filipinas, la cuestión nacional se agudizó considerablemente. Imposibilitada de competir con la industria francesa, inglesa o alemana en el mercado alemán, privada de sus colonias, la burguesía catalana obtuvo del gobierno un régimen de proteccionismo a cambio de renunciar a sus veleidades nacionales y culturales. En otros términos: sustituyó los mercados de Cuba, Puerto Rico y Filipinas con su mercado colonial interior. 

Hasta finales del s. XIX existían en la provincia de Almería industrias mineras, alimenticias y textiles que fueron barridas a raíz de la entrada de la Lliga en el gobierno. Pasea por la bellísima costa del Sudeste, Cabo de Gata, Garrucha, Águilas, Cartagena, es contemplar un paisaje de canales de fundición agrietados, chimeneas mochas, edificaciones sin techo, minas abandonadas. En Herrerías, las ruinas de la próspera industria de antaño se extienden por espacio de varios km.

El proteccionismo otorgado a las industrias catalana y vasca acabó con la industria y artesanado del Sudeste. A partir de entonces el interés miope de aquella fincaba en que la mitad sur de España permaneciese petrificada e inmóvil. Enemigas del latifundio  en Cataluña y regiones industriales del Norte, se aliaron con el en las zonas del centro y Andalucía.

 

La política del Estado favorecía sus objetivos. Por un lado, decretaba el proteccionismo industrial por otro, mantenía el libre cambio respecto a los productos agrícolas. Es decir, mientras los campesinos del Sur soportaban la competencia extranjera en el mercado nacional, debían dirigirse a Cataluña y País  Vasco para vestirse, proveerse de utillaje agrícola, comprar abono, etc. Tras vender sus productos a bajo precio, tenían que pagar el instrumental necesario a su cultivo al precio que les dictaba la industria bilbaína y barcelonesa.

LAS AGITACIONES SOCIALES ANDALUZAS

fueron la respuesta del campesinado a la expoliación de que era objeto. Descuidando la educación, permitiendo el saqueo de las minas y el abandono de la tierra, canalizando la emigración hacia las zonas del Norte o al extranjero como válvula de seguridad necesaria a sus intereses, la alianza de la industria vascocatalana y el latifundismo andaluz significaba, a fin de cuentas, el mantenimiento del Sur a un nivel de colonia de explotación. Carentes de una organización política eficaz, los campesinos manifestaban su oposición de modo anárquico, ocupando las tierras de los latifundistas o quemando las cosechas. En 1855, 1869, 1870, 1892, 1900, 1904, 1917, las violencias brotaron como llamaradas espontáneas, apagadas en seguida gracias a la brutal intervención de los poderes públicos.

La segunda República no introdujo un cambio real en sus precarias condiciones de vida. Los sectores populares se organizaron, pero las estructuras sociales siguieron inmóviles, aunque una parte de la prensa denunciaba los abusos, los abusos continuaban. La libertad de la República se reducía a la libertad de protestar. El 29 de mayo de 1936, en pleno gobierno del Frente Popular, la fuerza pública asesinó a 16 campesinos que talaban unos bosques pertenecientes al cacique de la región (...)

LA INEPTA PASIVIDAD  de un amplio sector de nuestra cultura, vuelta de espaldas a las realidades nacionales se nos aparece crudamente en situaciones cruciales como la que vivimos. La amnesia voluntaria de la historia española, añadida a nuestro proverbial orgullo, nos ha hecho creer en la posibilidad de una cultura ajena a las estructuras sociales del país. Pero la pobreza no se combate con el olvido, sino asumiéndola. Los intelectuales españoles conscientes de la realidad patria no debemos desentendernos de una novela, una poesía, un ensayo, un teatro que respondan a las necesidades de nuestra sociedad. Si un pueblo es atrasado, si el pueblo es inculto, si el pueblo es analfabeto ¿es motivo suficiente para que actuemos como si no existiese?....

Extraído de Tierras del Sur, por Juan Goytisolo (1967) en el volumen España y sus Ejidos (2003)