The Opus Dei Vocational Discernment Process

Estupendo que hayan reaccionado rápido al nuevo documento papal, pero no voy a poner a una  numerary predicando. 

De todo lo que han dicho al respecto me quedo con que los laicos están excluidos de esta organización. De donde se desprende dolorosa consecuencia y es que sus directivos, curas en cualquier caso, ¿las mujeres directoras qué pintan ahí?  no tenían ni tienen  derechos sobre las vidas, cuerpos, almas y haciendas de las que ni remotamente íbamos para curas. Pues ya quedó claro en temprano documento de la era Juan Pablo de cuyo nombre no me acuerdo de que el sacerdocio "ni en broma" es para las mujeres, ni las mujeres para el sacerdocio.

Lo que da un balance inquietante por ahora: la estafa a los laicos que "no pertenecimos" ...como que no ha pasado. 

Los laicos de esta organización como de cualquier otra organización de curas están  bajo la jurisdicción única y exclusivamente del obispo diocesano.

 ¿Qué pasa entonces con la entrega del sueldo? ¿con la designación oficial por parte de las directoras de confesor y directora espiritual además de asignación de domicilio y encargos? ¿qué con los nombramientos para consejos locales y demás cargos en asesorías, delegaciones, coles? ¿qué pasa con todo lo que había que consultar antes de comprar, ir, venir, subir, bajar, escribir, viajar, leer, matricularse en o trabajar en? 

Pasa que los directores y directoras mandaban y decidían sobre absolutamente todo lo que a uno se le pueda ocurrir sin tener ni la venia ni el reconocimiento vaticano para hacerlo. Mezclando lo interno, lo externo, lo mediopensionista.

Los "no lugares", dijo un sociólogo. La numeraria ocupa un "no lugar" en la Iglesia católica. Solo queda esperar el curso de los acontecimientos, qué ocurre con la denuncia de que  lo que se vivía en el día a día numeraril no figura en documento público y notorio y no le constaba a las autoridades vaticanas ni el cilicio ni los crespillos ni la cuenta de gastos. Detalle de normas, costumbres y criterios a veces simplemente estúpidos que seguíamos como palabra de Yavéh.

Lo escrito en Praxis y lo inventado sobre la marcha. Recuerdo un curso de verano realizado en casa a una veintena de km de la capital del Viejo Reyno. Todas estábamos en la treintena, año arriba, año abajo. Se nos ocurrió ¡atención! ir a los Fuegos Artificiales, 11 p.m lanzados cada día con motivo de las Fiestas famosas. Aparcar, ver los fuegos y con las mismas, subirse al coche y a la 1 a,m de vuelta.

Nos cayó una buena, hubo aviso de la Delegación: no era plan para numes. 

No recuerdo quién era la dire del curso, ¿la misma que me estaba esperando una noche detrás de la puerta al regreso de un plan con mi madre y mi hermano?

Por no hablar del discernimiento vocacional, que no era discernimiento como comenta este colega ex numerario de EEUU. Era "Mandato imperativo de Cristo".

Y explica que efectivamente, desde que te obligan a escribir la carta, porque Dios te ha elegido, "pasas un período de prueba de unos meses". Pero el examen, el discernimiento, la crítica es unidireccional. Sólo va de arriba abajo. Tú "vocación reciente", no tienes derecho a decir "este no es mi sitio". Está mal visto. 

En todo caso la organización decidirá que no es tu sitio si ven algo en tí que no van a poder controlar o si observan que las condiciones familiares, sociales, académicas, de salud no son las esperadas.

El ex nume norteamericano pone el ejemplo de su hermana Carmelita. Tras el ingreso de la novicia hay un período de prueba y un diálogo real, si la persona no está a gusto, no es lo que esperaba puede irse sin que le caiga la maldición del Carmelo por los siglos de los siglos.

En cualquier caso, prelaturas sí, prelaturas no, quedó claro que la rutina de la vida numeraril, vida que tiende a desaparecer según dicen, poco o nada tiene que ver con lo que pone en los papeles ni en el C.I.C. Aquello era un cárcel del cuerpo y del alma. Ni siquiera cuartel, ni siquiera convento. Un "no lugar" donde campaban por sus respetos las más sádicas y taimadas del lugar, todo muy mono puesto, pero en el fondo, la peor de todas, era la que más lejos llegaba.

COLECTIVO DE SACERDOTES DE CARTAGENA

Ante el hecho anunciado de la próxima beatificación de D. JoséM EdB, founder del od, el grupo de los sacerdotes de la diócesis de Cartagena-Murcia, abajo firmantes, expresa su extrañeza por la rapidez del proceso y, al mismo tiempo pide respetuosamente la paralización de este acontecimiento, ya que escandaliza a numerosos creyentes y no creyentes, por tratarse de una persona discutida, alguna de cuyas actitudes parece que no concuerda con lo que juzgamos una posición radicalmente evangélica.

Creemos que las autoridades de la Iglesia deben escuchar atentamente las numerosas voces que se están expresando, tanto en los medios de comunicación social como en las parroquias, grupos, movimientos y comunidades cristianas, pidiendo que se establezca un amplio debate sobre este tema, ya que las imposiciones autoritarias y sin réplica originan dudas en los creyentes y distanciamiento mayor que en los no creyentes.

No tenemos nada contra la veneración de monseñor por parte de quienes se sienten beneficiados espiritualmente por su mensaje, pero nos parece improcedente que se imponga esa misma veneración a quienes, desde su libertad cristiana, no les convence su modo de explicar y vivir el Cristianismo. Tanto más cuanto que la Nueva Evangelización de la que tanto se habla, necesita que se quiten todos los obstáculos que impiden el camino de los hombres hacia Jesucristo y su Iglesia.

Murcia 30 de enero de 1992