ESTA VEZ PORQUE SÍ
Sobre lo que dices de ETA, no estamos seguros de si no estaban mezcladas las cloacas del sistema franquista y postfranquista. El resultado de tanto muerto y sufrimiento no ha sido ni un ápice de libertad más para nadie,
son los mártires de la derecha española, por hablar crudamente, es la función desempeñada en la actualidad. Cuando explotaba la goma2 reforzaba el campo agredido, víctimas propiciatorias, además de gentes bien, entre ellos algún que otro opus, mucho guardia civil y mucho policía emigrado al norte. Esos muertos de los 70, 80, 90, esos atentados además de un ataque a la convivencia pacífica han servido para tapar los miles de muertos provocados desde el mismo Estado en total impunidad una vez acabada la guerra civil. Acordarse de eso es de muy mal gusto y el PP nunca lo hace, incluso anima a no hacerlo, fueron más y mucho más injusto, puesto que se actuó desde el "estado de derecho" dictatorial contra la propia población española, matando de hambre y miseria.
Aquí las cosas se han resuelto siempre por las bravas, a lo bestia. Algo sé de eso porque aunque no haya pistolas de por medio ni te lleven a la cárcel de madrugada, cuando toca levemente las narices al poder las agresiones son de campeonato. Hemos interiorizado la cobardía y el "todos quietos" hasta unos límites que rozan y traspasan la indignidad.
Disparo a bocajarro o por la espalda (ley de Fugas) y más modernamente empastillamiento, hospitalización, psiquiatrización del rebelde.
No me cabe en la cabeza que todavía sigamos albergando dudas sobre la filiación y fraternidad dictatorial de "Nuestra vocación".
A mí me ha dado por excavar e informarme, pero la ignorancia sobre lo que pasó de la mayor parte de la población es descomunal. Se sigue cultivando. No entiendo tantas vueltas a Isabel II en el colegio y ninguna a la Segunda República española por ejemplo, sigue la inercia de no querer ilustrar a las jóvenes generaciones. Y hay mucho que contar.
Es penoso que nos lo sepamos todo de los demás países gracias a Hollywood (segunda guerra mundial, Hitler y los campos...) y no sepamos nada de nuestros propios ancestros. Los poderosos españoles siguen teniendo mucho que tapar.
Hay que sufrir un follón para que las cartas estén encima de la mesa de una vez.
Por eso seguiré intentando fomentar al conocimiento.
En especial mi parte, que todavía no les dé vergüenza a los periodista preguntar ¿cuál es la relación entre el Opus Dei y el franquismo? , algún día vendrá en que sea cosa sabida en las escuelas, que fue una excrecencia de la dictadura española, la más duradera en esta parte de Europa. Un auténtico anacronismo cuando el fascismo había perecido en el resto de países vecinos en 1945, aquí seguimos "vistiendo la mona de seda", porque en parte eso hicieron los Laureanos, López Bravos y demás compañeros mártires del entonces instituto secular, hoy prelatura.
Eso no fue todo. Además de los vistosos, están todos los medianos y pequeños opusinillos de medio pelo, disimulando pero trayendo y llevando la info precisa para manipulación y engaño además de estafa de todo el que se cruce en su camino. Y los no opusinillos pero que saben quien corta el bacalao y que saben es preciso arrimarse al sol que más calienta al menos para estar tranquilo. ¡Con cuánta gente de esa me he topado!
El libro de Leguina, aunque fuera becado por poderes franceses que pusieron en marcha el FLP, es un buen testigo de que en los estertores del franquismo, cuando la policía zurraba de lo lindo y tiró por la ventana a Enrique Ruano alegando que fue "suicidio", sacando a relucir sus papeles íntimos y hasta su cita con el psiquiatra Castillo del Pino, Laureano era de los que aunque no salió con porras a zurrar, mantenía aquello de pie. Por ejemplo, organizando vergonzosos homenajes a Franco tras la ejecución de las penas de muerte de los juicios de Burgos que le hicieron quedar internacionalmente peor que mal.
Se añade al olvido buscado la impunidad establecida. Nadie ha pagado por los crímenes de la dictadura. Ni mijita... Eso es muy grave porque lastra como una losa todo lo que ha venido después.
Santificación del apaño electoral:
"Entre las ocurrencias del equipo del Opus, que con Laureano López Rodó a la cabeza y bajo el paragüas de Carrero Blanco, ministro de la presidencia, estaba la de dar paso a un simulacro electoral en el cual se elegirían en urna una pequeña parte de los "Procuradores" que componían las cortes franquistas, el llamado tercio familiar. Sólo los cabeza de familia tenían derecho al sufragio, tanto activo como pasivo.
Unas elecciones para el único sector de las Cortes que de aquella manera era de representación popular directa. Elecciones en las cuales los candidatos habían de reunir tales condiciones que excluían ab initio a los discrepantes, en las que la financiación de la campaña electoral corría directamente a cargo de los candidatos, sin que pudiera ser sufragada por asociaciones o instituciones públicas o privadas, en las que no cabían actos específicamente políticos de propaganda electoral, en las que los elegidos habían de ser necesariamente una minoría dócil; convocadas de tapadillo, con una participación muy escasa y resultados previsibles.
A mediados de agosto de 1971 cuando medio país sesteaba en las playas o en la montaña, y la otra mitad sudaba en ciudades, fábricas, campos, el BOE lanzó la noticia de que el 29 de septiembre tendrían lugar las elecciones para la renovación de los procuradores del tercio familiar. Digamos pues que la convocatoria fue, como las instrucciones que López Rodó acostumbraba a enviar a sus colaboradores, estrictamnte confidencial.
El plazo para la presentación de candidatos terminó el 12 de septiembre, cuando coleaba la pausa veraniega. Sin embargo y como se había previsto, todos los que estaban en el secreto presentaron puntualmente su candidatura. Quizá convenga advertir que LLR pretendía dentro de la farsa de la política española que los procuradores familiares fueran hombres suyos, dóciles peones de brega de su complicado tablero cortesano....
La práctica electoral estuvo dominada por la aburrida indiferencia de los ciudadanos.En las provincias los inspectores de los gobernadores civiles patrullaban desde mediados de septiembre instando a los alcaldes de los pueblos a conseguir participaciones electorales masivas y a cuidar escrupulosamente el triunfo de los candidatos predestinados....
Sin embargo había algo de revolución en Madrid aquel septiembre de 1971, y no por la inexistente campaña electoral sino por las huelgas de la construcción y de los médicos y por el homenaje a Franco que se preparaba para el 1 de octubre.
La preparación del homenaje a Franco había comenzado meses antes con el encargo a diversas imprentas de carteles a 4 tintas, alusivos al homenaje con ocasión al XXXV aniversario de su exaltación a la Jefatura del Estado. La razón del homenaje no parecía muy clara. En realidad el homenaje y la manifestación estaban meticulosamente programados por y desde Presidencia (Carrero y López Rodó). Lo único que seguía sin aclararse era la causa de tales actos hasta tal punto que los únicos eslóganes que Rafael Ansón y su brain trust habían podido encontrar eran "Gracias Franco" y "Esta vez, porque sí".
...Desde el min. del Interior Santiago Cruylles y el dir general de Política Interior, 2 hombres de López Rodó, tiraban de todos los hilos. Se trataba de dejar circular la noticia de que la manifestación era cosa de falangistas implicando en su organización a todos los camisas viejas como Girón. Era la pieza de más calado ganada para la causa gracias al trato particular que le daba LLR, comidas en Mayte Commodore, y la magnífica operación inmobiliaria de sus terrenos en Fuengirola, unos cuantos 100s de millones de pts que se embolsó el ex ministro Girón.
...A cada pueblo se le asignó una cuota de participación de manifestantes. Los alcaldes recibieron instrucciones precisas sobre la hora de salida de los buses hacia Madrid y la carretera por la que debían entrar en la capital, cuándo y dónde aparcar, a qué hora iniciar el regreso...
Franco estuvo 25 min. en el balcón, incluidos los 11 que tardó en leer su discurso, un discurso en el que repitió "que el enemigo acechaba". A las 3 de la tarde el millón de españoles llegados de todos los puntos del país ya se habían dispersado.
A las 10 todos volviendo a casa, Franco viendo el éxito en el telediario y Laureano desde el chalecito del Viso, centro de numes donde residía, disfrutaba la perfección de la santificación de la manifa organizada. Un país en la mano.
Con menos de 300 millones de pts. y un millón de personas quedó enterrado el feo asunto que en algún momento pudo representar MATESA, cuando nuestros hermanos se autofinanciaron con el dinero estatal además de financiar futuros presidentes de la République. Qué grandezas.
Dice Leguina que Matesa fue la madre del cordero. Los carteles que decían "esta vez porque sí" significaban "esta vez por Matesa" y los que gritaban "gracias Franco" eran los procesados por Matesa, los procesables con López Bravo y Villar Palasí a la cabeza, todo el Opus económico y político.
López Rodó había comenzado el estudio del indulto a los procesados por Matesa antes del verano, más o menos cuando encargó los carteles. El indulto, un indulto de gracia que no tuvo limitación para las penas pecuniarias, que conllevó el sobreseimiento automático e inmediato de todas las causas para las que se pudieran pedir penas incursas en el indulto, que suspendió las diligencias y hasta destruyó físicamente los sumarios, fue un oportunísimo indulto. Sin huellas, sin manchas.
son los mártires de la derecha española, por hablar crudamente, es la función desempeñada en la actualidad. Cuando explotaba la goma2 reforzaba el campo agredido, víctimas propiciatorias, además de gentes bien, entre ellos algún que otro opus, mucho guardia civil y mucho policía emigrado al norte. Esos muertos de los 70, 80, 90, esos atentados además de un ataque a la convivencia pacífica han servido para tapar los miles de muertos provocados desde el mismo Estado en total impunidad una vez acabada la guerra civil. Acordarse de eso es de muy mal gusto y el PP nunca lo hace, incluso anima a no hacerlo, fueron más y mucho más injusto, puesto que se actuó desde el "estado de derecho" dictatorial contra la propia población española, matando de hambre y miseria.
Aquí las cosas se han resuelto siempre por las bravas, a lo bestia. Algo sé de eso porque aunque no haya pistolas de por medio ni te lleven a la cárcel de madrugada, cuando toca levemente las narices al poder las agresiones son de campeonato. Hemos interiorizado la cobardía y el "todos quietos" hasta unos límites que rozan y traspasan la indignidad.
Disparo a bocajarro o por la espalda (ley de Fugas) y más modernamente empastillamiento, hospitalización, psiquiatrización del rebelde.
No me cabe en la cabeza que todavía sigamos albergando dudas sobre la filiación y fraternidad dictatorial de "Nuestra vocación".
A mí me ha dado por excavar e informarme, pero la ignorancia sobre lo que pasó de la mayor parte de la población es descomunal. Se sigue cultivando. No entiendo tantas vueltas a Isabel II en el colegio y ninguna a la Segunda República española por ejemplo, sigue la inercia de no querer ilustrar a las jóvenes generaciones. Y hay mucho que contar.
Es penoso que nos lo sepamos todo de los demás países gracias a Hollywood (segunda guerra mundial, Hitler y los campos...) y no sepamos nada de nuestros propios ancestros. Los poderosos españoles siguen teniendo mucho que tapar.
Hay que sufrir un follón para que las cartas estén encima de la mesa de una vez.
Por eso seguiré intentando fomentar al conocimiento.
En especial mi parte, que todavía no les dé vergüenza a los periodista preguntar ¿cuál es la relación entre el Opus Dei y el franquismo? , algún día vendrá en que sea cosa sabida en las escuelas, que fue una excrecencia de la dictadura española, la más duradera en esta parte de Europa. Un auténtico anacronismo cuando el fascismo había perecido en el resto de países vecinos en 1945, aquí seguimos "vistiendo la mona de seda", porque en parte eso hicieron los Laureanos, López Bravos y demás compañeros mártires del entonces instituto secular, hoy prelatura.
Eso no fue todo. Además de los vistosos, están todos los medianos y pequeños opusinillos de medio pelo, disimulando pero trayendo y llevando la info precisa para manipulación y engaño además de estafa de todo el que se cruce en su camino. Y los no opusinillos pero que saben quien corta el bacalao y que saben es preciso arrimarse al sol que más calienta al menos para estar tranquilo. ¡Con cuánta gente de esa me he topado!
El libro de Leguina, aunque fuera becado por poderes franceses que pusieron en marcha el FLP, es un buen testigo de que en los estertores del franquismo, cuando la policía zurraba de lo lindo y tiró por la ventana a Enrique Ruano alegando que fue "suicidio", sacando a relucir sus papeles íntimos y hasta su cita con el psiquiatra Castillo del Pino, Laureano era de los que aunque no salió con porras a zurrar, mantenía aquello de pie. Por ejemplo, organizando vergonzosos homenajes a Franco tras la ejecución de las penas de muerte de los juicios de Burgos que le hicieron quedar internacionalmente peor que mal.
Se añade al olvido buscado la impunidad establecida. Nadie ha pagado por los crímenes de la dictadura. Ni mijita... Eso es muy grave porque lastra como una losa todo lo que ha venido después.
Santificación del apaño electoral:
"Entre las ocurrencias del equipo del Opus, que con Laureano López Rodó a la cabeza y bajo el paragüas de Carrero Blanco, ministro de la presidencia, estaba la de dar paso a un simulacro electoral en el cual se elegirían en urna una pequeña parte de los "Procuradores" que componían las cortes franquistas, el llamado tercio familiar. Sólo los cabeza de familia tenían derecho al sufragio, tanto activo como pasivo.
Unas elecciones para el único sector de las Cortes que de aquella manera era de representación popular directa. Elecciones en las cuales los candidatos habían de reunir tales condiciones que excluían ab initio a los discrepantes, en las que la financiación de la campaña electoral corría directamente a cargo de los candidatos, sin que pudiera ser sufragada por asociaciones o instituciones públicas o privadas, en las que no cabían actos específicamente políticos de propaganda electoral, en las que los elegidos habían de ser necesariamente una minoría dócil; convocadas de tapadillo, con una participación muy escasa y resultados previsibles.
A mediados de agosto de 1971 cuando medio país sesteaba en las playas o en la montaña, y la otra mitad sudaba en ciudades, fábricas, campos, el BOE lanzó la noticia de que el 29 de septiembre tendrían lugar las elecciones para la renovación de los procuradores del tercio familiar. Digamos pues que la convocatoria fue, como las instrucciones que López Rodó acostumbraba a enviar a sus colaboradores, estrictamnte confidencial.
El plazo para la presentación de candidatos terminó el 12 de septiembre, cuando coleaba la pausa veraniega. Sin embargo y como se había previsto, todos los que estaban en el secreto presentaron puntualmente su candidatura. Quizá convenga advertir que LLR pretendía dentro de la farsa de la política española que los procuradores familiares fueran hombres suyos, dóciles peones de brega de su complicado tablero cortesano....
La práctica electoral estuvo dominada por la aburrida indiferencia de los ciudadanos.En las provincias los inspectores de los gobernadores civiles patrullaban desde mediados de septiembre instando a los alcaldes de los pueblos a conseguir participaciones electorales masivas y a cuidar escrupulosamente el triunfo de los candidatos predestinados....
Sin embargo había algo de revolución en Madrid aquel septiembre de 1971, y no por la inexistente campaña electoral sino por las huelgas de la construcción y de los médicos y por el homenaje a Franco que se preparaba para el 1 de octubre.
La preparación del homenaje a Franco había comenzado meses antes con el encargo a diversas imprentas de carteles a 4 tintas, alusivos al homenaje con ocasión al XXXV aniversario de su exaltación a la Jefatura del Estado. La razón del homenaje no parecía muy clara. En realidad el homenaje y la manifestación estaban meticulosamente programados por y desde Presidencia (Carrero y López Rodó). Lo único que seguía sin aclararse era la causa de tales actos hasta tal punto que los únicos eslóganes que Rafael Ansón y su brain trust habían podido encontrar eran "Gracias Franco" y "Esta vez, porque sí".
...Desde el min. del Interior Santiago Cruylles y el dir general de Política Interior, 2 hombres de López Rodó, tiraban de todos los hilos. Se trataba de dejar circular la noticia de que la manifestación era cosa de falangistas implicando en su organización a todos los camisas viejas como Girón. Era la pieza de más calado ganada para la causa gracias al trato particular que le daba LLR, comidas en Mayte Commodore, y la magnífica operación inmobiliaria de sus terrenos en Fuengirola, unos cuantos 100s de millones de pts que se embolsó el ex ministro Girón.
...A cada pueblo se le asignó una cuota de participación de manifestantes. Los alcaldes recibieron instrucciones precisas sobre la hora de salida de los buses hacia Madrid y la carretera por la que debían entrar en la capital, cuándo y dónde aparcar, a qué hora iniciar el regreso...
Franco estuvo 25 min. en el balcón, incluidos los 11 que tardó en leer su discurso, un discurso en el que repitió "que el enemigo acechaba". A las 3 de la tarde el millón de españoles llegados de todos los puntos del país ya se habían dispersado.
A las 10 todos volviendo a casa, Franco viendo el éxito en el telediario y Laureano desde el chalecito del Viso, centro de numes donde residía, disfrutaba la perfección de la santificación de la manifa organizada. Un país en la mano.
Con menos de 300 millones de pts. y un millón de personas quedó enterrado el feo asunto que en algún momento pudo representar MATESA, cuando nuestros hermanos se autofinanciaron con el dinero estatal además de financiar futuros presidentes de la République. Qué grandezas.
Dice Leguina que Matesa fue la madre del cordero. Los carteles que decían "esta vez porque sí" significaban "esta vez por Matesa" y los que gritaban "gracias Franco" eran los procesados por Matesa, los procesables con López Bravo y Villar Palasí a la cabeza, todo el Opus económico y político.
López Rodó había comenzado el estudio del indulto a los procesados por Matesa antes del verano, más o menos cuando encargó los carteles. El indulto, un indulto de gracia que no tuvo limitación para las penas pecuniarias, que conllevó el sobreseimiento automático e inmediato de todas las causas para las que se pudieran pedir penas incursas en el indulto, que suspendió las diligencias y hasta destruyó físicamente los sumarios, fue un oportunísimo indulto. Sin huellas, sin manchas.
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