Así ganó económicamente FRANCO la GUERRA CIVIL ESPAÑOLA. CALVO SERER PATEADO

Muy competente el muchacho, como buen marxista aborrece a los anarquistas, que buena la armaron durante la guerra civil, colectivizando tierras en Aragón y Andalucía. El caos total económico en la zona republicana estaba servido, las tierras no rendian, se interrumpió la circulación de la moneda. La España nacional ponía orden, se cultivaba más o menos, además tanto March como Cambó financieros de postín, pusieron su dinero y buscaron fondos. En plena guerra no era el momento de hacer revoluciones. 

Franco en su zona suprimió los partidos políticos, ¿qué era eso de carlistas por un lado, alfonsinos por otro, nacionalsindicalistas por el suyo y los de la CEDA? a la voz de ¡ar! todos franquistas en 1937, sucesos de Salamanca en los que hubo dos muertos. 

Sigo prefiriendo a los anarquistas, unos idealistas que llevaban todas las de perder, desde la Internacional en que Marx los aplastó. 

Los Estados y estructuras sirven al enriquecimiento de unos pocos a costa de la mayoría. Hemos alcanzado  cotas de bienestar  impensables para nuestros abuelos, pero siguen aprovechándose de nosotros y podríamos estar mejor si las actividades económicas y financieras estuvieran orientadas al bien de la inmensa mayoría, no al de la inmensa minoría.

Al morir Franco los propios falangistas pudieron soltarse la lengua y escribir la verdad de lo que habían vivido. Muy interesante de Alcazar de Velasco, Los Siete días de Salamanca, y de José Luis Alcocer, Radiografía de un fraude, ambos publicados en 1976 y 1978 respectivamente.

Alcocer se refiere a que se había creado en el Frente de Juventudes, nacido en 1936, de adolescente integró como si dijéramos la labor de san Rafael de Falange. Les daban formación semi militar, política, hacían campamentos, marchas, cantaban canciones compuestas especialmente para ellos como el Cara al Sol o Montañas Nevadas...y se pensaban que estaban haciendo así la revolución nacionalsindicalista de Onésimo o Ramiro Ledesma. Los confundo siempre. 

Pura broma. Ya en 1960 en el funeral por José Antonio del 20 de noviembre presidido por el Caudillo un muchacho del Frente gritó en plena misa "Franco traidor". Los del Frente en cuanto crecían se daban cuenta de que los ideales nacionalsindicalistas de "izquierdas" dice, habían sido traicionados. Chicos proletarios y clases medias "entretenidos". ¿Dónde he oído yo eso? Curiosamente ya estos muchachos tenían el ideal de la reconciliación entre españoles. Que no era el de los jerarcas ni el de Franco. Distingue a los nacionalsindicalistas de los nacionalcatólicos, los segundos eran los más beneficiados por el régimen, según Alcocer. Porque Falange era una estructura vaciada de su sustancia, de sus ideales fundacionales.


"En el Ateneo de Valencia pronunció una conferencia Rafael Calvo Serer. Estaban todavia muy lejanos los tiempos de la Junta Democrática de España, por supuesto. El tema de la intervención se refería a la doctrina de Menéndez Pelayo. Asistimos varios miembros de las Falanges Juveniles y del SEU (Sindicato de Estudiantes de Falange). El planteamiento era el típico de las dos Españas: a un lado, la ortodoxia y la verdad intangible; al otro, la heterodoxia y la mentira. Por supuestos, las ideas falangistas las situaba al conferenciante del lado del mal. Le pateamos. Fuimos tachados de comunistas. Entonces las cosas eran así". 

El escrivariano de turno, el moderno, el precursor del concilio Vaticano II, defendiendo lo más rancio de lo  rancio, lo de siempre, el siglo XVI, la elección divina de los ricos de España. Ya en 1960 cosechaba "éxitos" entre la juventud.
Alcocer se queja del arribismo de los Opus Escrivae, de su entrada en tromba en los penúltimos gobiernos franquistas. Se suponía que los Falange habían sido educados para subir en el escalafón y llegar a los altos puestos estatales...ingenuidad la suya. Con Franco como sin Franco a los mandos siempre los mismos.

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