BAJAR DEL PEDESTAL

 Alfonso Longo, ingeniero industrial, a partir del minuto 26:51 lo explica estupendamente, que si lo dice Sevillano no cuela, llevamos 2 años de análisis y como si nada. Pero estos son del norte, más fiables y "adelantados" ya era hora de que os manifestarais.


https://odysee.com/@BizitzaKoordinakundea:7/rueda-de-prensa-22:c

estamos en un golpe totalitario, palabra de ingeniero vasco, que nos entre en la cabeza.

Su página, para el 22 enero se manifiestan.

Cuando oigo a Sevillano decir que el premio Nobel se sale de la "ortodoxia" es un loco, así le ha pasado a Luc Montaigner, me recuerda nuestro "nom sectorial" u "opus". Después de ser nume, "salirse" se parece a convertirse en "paria", "príncipe destronado", o etiqueta "loca". De algo nos tenía que servir la experiencia.

https://odysee.com/@laquintacolumna:8/DIRECTONOCTURNODELAQUINTACOLUMNA-PROGRAMA233-:4

Estábamos en 13 años de supernume: esta experiencia no te deja intacta, hacer las cosas, oírlas, repitarlas, corregir y ser corregida, te va "deformando" y aunque no esté totalmente de acuerdo con od, me impregnó bastante. La educación se hace por repitición y por adoctrinamiento y formateo. Cada semana, cada mes, cada año, los mismos discursos, las mismas enseñanzas, los mismos consejos. La repetición hace que se adquieran automatismos, poco a poco sustituye al propio pensamiento.

Las ideas, las verdades que te machacan a lo largo del día son las que primero te vienen a la cabeza, casi se convierten en instintos, en reflejos. Acabé diciendo cosas en las que no creía pero que mi cerebro había almacenado y asimilado.

Me pasó con la confesión, llegué a alabar este sacramento, a ponerlo por las nubes para animar a mis amigas a que se confesaran aunque yo misma no estaba muy convencida.

Lo mismo me pasaba con el tema de los hijos, cuando alguien me decía si no era muy duro tener familia numerosa, si podíamos salir adelante financieramente ya respondía automáticamente: "cada hijo viene con un pan debajo del brazo". Una máxima que se repetía hasta la extenuación en meditaciones  y círculos. Acabé por creer que se trataba de mis propias ideas y convicciones.

Durante mis 13 años de "vocación" viví alerta, tengo que evitar el escándalo. Me esforzaba por guardar las formas, por mostrar un comportamiento digno de la obra. Censuro mi modo de vestir, mi modo de hablar. Adopto una sonrisa artificial. No puedo mostrar signos de tristeza, de duda, de preocupación. Represento un papel sin parar, también a mí misma. 

Adquiero juicios de valor con los que evaluo a los demás: cuántos hijos tienen, profesión, nivel social, modo de vestir. Estos criterios se convierten en reflejos. Me fijo en pequeños detalles insignificantes y me forjo una opinión, lo hago sin pensar. Y si me daba cuenta, me odiaba a mí misma, no quiero convertirme en esa persona que no soy en el fondo.

Una vez fuera del opus es muy difícil y doloroso dilucidar lo que hay de verdadero y auténtico en tí y lo que es postizo. La pregunta ¿quién soy yo? cobra todo su sentido.

Te ves obligada a bajarte del pedestal frente a tí misma y frente a  los demás.

Puedo decir que no era sincera ni honrada ni con los demás ni comigo misma. Vivía en una continua representación. Eso me permitió salir sin demasiado estropicio personal y retomar mi vida con nuevo brío y desde nuevos presupuestos. No me habían aniquilado. La Véronique que fui seguía viva en el fondo de mi persona, había que encontrarla y darle el sitio que se merecía.

Si fue difícil reconstruirse para mí, una persona que me dí al opus de modo bastante superficial, podemos imaginar lo que supone para una persona que se dió cien por cien a la organización (numes, aux, agrs) ¿Cómo reconstruirse a pesar de todo lo que el opus llegó a mandar en su vida?

Salir es un paso, el primero, aunque difícil porque hay que batallar para obtener el derecho a hacerlo. La vida post exige gran fortaleza mental. Dejando el opus perdemos muchos puntos de apoyo y orientación: hay que buscarse otros.

 

 


Comentarios

Entradas populares de este blog

SEXO EN EL OPUS DEI, TEORÍA Y PRÁCTICA

Otra consulta memorable de Enrique Rojas, supernumerario del Opus Dei y psiquiatra de postín

LISTAS ATRASADAS DE MIEMBROS Y SIMPATIZANTES DEL OPUS Dei