REHENES EN PERÚ
Al mismo tiempo que el asunto de los guardias suizos y el
espía doble del FBI, en Perú se estaba produciendo una especie de caso
Watergate peruano que habría de acabar
con las esperanzas del cardenal Juan
Luis Cipriani de llegar al trono de Pedro. Había guerra en la iglesia peruana.
El asunto que la dividía eran las actividades “no cristianas” de Cipriani. En
1997, siendo todavía obispo de una diócesis andina en el quinto pino, Cipriani
tuvo un papel destacado en la liberación de los rehenes en manos de los
terroristas Tupac Amaru retenidos en la embajada de Japón en Lima. Al tiempo
que actuaba de mediador entre los terroristas y el gobierno de Alberto Fujimori
se le acusó de pasar cámaras y micrófonos escondidos en material piadoso
preparando así el asalto de las fuerzas de seguridad. Siempre con el poderoso,
con el que tiene la fuerza, no lo pueden evitar, es su lado de la historia.
Los 14 secuestradores murieron en el asalto. Cuatro años
después Juan Pablo II nombraba a Cipriani arzobispo de Lima sustituyendo así al
Cardenal Augusto Vargas Alzamora. Vargas Alzamora era un jesuita que apoyaba la Liberation Theology, despreciado
por el Opus Dei murió en extrañas circunstancias. Hubo investigación de
asesinato ¿quedó en nada? ¿Dónde anda el ex nume peruano de ascendencia
japonesa cuyo nombre he olvidado? Desparecido en combate hace años…..¿habrán
tocado a su puerta con algún tipo de prebenda, ofrecimiento o amenaza? Otro colaborador
entusiasta de Opuslibros missing, lo
de siempre.
En 2000 el secretario de Estado Vaticano cardenal Angelo
Sodano recibió una carta supuestamente firmada por Cipriani en la que acusaba a
3 prelados peruanos, entre ellos el obispo auxiliar de Lima de “conducta
inmoral”. Cipriani dijo más tarde que la carta había sido un “fake”. En 2001 el
ministro de Justicia Fernando Olivera acusó a Cipriani de asociarse con el
anterior jefe de las fuerzas peruanas de seguridad, Vladimiro Montesinos. Cipriani
apoyaba decididamente al corrupto jefe de Montesinos, el expresidente Fujimori,
el chino, realmente otro descendiente de japoneses. Olivera aseguró que
Cipriani había recibido 120.000 $ de Montesinos además de muchos favores del
propio Fujimori. En aquellos momentos cuando todo esto era noticia, Fujimori
estaba huido de Perú y Montesinos en la cárcel de por vida.
Luego asistimos al asunto de la Pontificia Universidad Católica de Perú con la que batalló para quitarle
lo de Pontificia, el famoso asunto PUCP que fue llegar el papa argentino y acabarse como por ensalmo.
Comentarios